[GIANNA]
Aun no me creo que Matt Ferrer haya estado escondido detrás de mi barra. No me ha explicado porque se escondía de esos paparazzis, pero supongo que sus motivos tendría, al menos que sea así con toda la prensa... eso sí que me decepcionaría ya que realmente me gusta mucho su música. Termino de acomodar todo y ya me puedo ir a mi piso. En momentos como este es cuando aprecio mucho vivir en el edificio que está justo enfrente del bar.
Cierro la puerta del bar y caminó hasta mi piso mientras observo la foto que me he tomado con Matt, sí que es guapo y mucho. Mientras subo al elevador, abro la aplicación de I*******m y subo la foto etiquetando a Matt, sin poner el sitio donde se ha tomado la foto; lo que menos quiero es buscarle problemas.
Abro la puerta de mi piso y me voy desvistiendo mientras camino al baño para darme una ducha. Estoy agotada, ya está amaneciendo y yo recién me estoy yendo a dormir, pero esta es mi vida. Me ducho rápidamente y con la misma velocidad me meto en mi cama para poder dormir.
[...]
La luz de la mañana entrando a la habitación me hace despertar. Miro el reloj y ya es el medio día, busco mi móvil y aun así en pijama camino hacia la cocina para prepararme algo de almorzar ya que realmente mi estómago me exige algo de comer. Busco algo ya preparado en el congelador, lo pongo en una bandeja, y meto la comida en el horno.
Mientras espero a que se cocine, voy a la sala, me siento en el sofá, y prendo la televisión en el canal de música mientras reviso las redes sociales. Creo que mi móvil ha enloquecido, tengo más de 300 notificaciones entre I*******m, F******k, y Twitter. Claro, es que todas están conectadas y la foto que he puesto con Matt es la causante. Abro I*******m y me llama la atención la nueva cantidad de seguidores que tengo. Abro cada una de las notificaciones y veo que Matt me está siguiendo. «Esto tiene que ser broma.»
Abro Twitter y veo que también me está siguiendo allí. Al abrir el buzón de mensajes me doy cuenta de que tengo un mensaje de él, ¡esto es una locura!
"Gianna, muchísimas gracias por lo que has hecho por mí anoche. Perdona que me haya ido así, entre toda la locura me olvide de decirte que me han encantado tus ojos. Pasaré a verte pronto, solo espero no haberte traído problemas con tu jefe.
Un Beso
Matt"
De acuerdo, creo que solo pude leer hasta lo de los ojos... No me considero una fan obsesionada con él, pero vamos, recibir un mensaje de Matt Ferrer no es cualquier cosa.
Con mi corazón latiendo a mil por hora, respondo a su mensaje.
"Ha sido un gusto poder ayudarte. Ya sabes, cuando necesites esconderte cuenta con mi bar (Soy la co-propietaria, así que no me has metido en problemas con mi jefe) Gracias por el cumplido hacia mis ojos.
Un Beso, Gianna."
Pulso el botón enviar y me doy cuenta de que la comida debe de estar lista. Me levanto del sofá y siento como me tiemblan las piernas, esto no es normal. Ayer cuando lo vi en el bar no temblaba de esta manera, «¿Por qué lo hago ahora? Ah, si... porque uno de mis cantantes favoritos me sigue en las redes sociales, y me ha escrito un mensaje.» Se auto responde mi subconsciente.
Preparo mi plato de comida e intento almorzar con tranquilidad, pero es prácticamente imposible. Se me ha hecho un nudo en el estómago que no me deja comer con normalidad. Esto es ridículo, me estoy poniendo nerviosa por alguien que apenas conozco, es decir, si lo conozco, pero como cantante.
Quizás esto de seguir a una fan que lo ha ayudado sea normal para él, y entonces siento esta sensación en mi estomago, tal como si me hubiese enamorado. Tengo que ser más realista y comprender que solo ha sido un lindo gesto de su parte y nada más.
[MATT]—Tío Matt, tu móvil.— Dice Clara.Quito mi móvil del bolsillo de mi pantalón y al ver que es un mensaje de ella no puedo evitar sonreír."Ha sido un gusto poder ayudarte. Ya sabes, cuando necesites esconderte cuenta con mi bar (Soy la co-propietaria, así que no me has metido en problemas con mi jefe) Gracias por el cumplido hacia mis ojos.Un beso."¿Un cumplido hacia sus ojos? Se ha quedado corta, en realidad yo me he quedado corto, pero creo que haberle dicho que toda ella me ha parecido una escultura es algo fuera de lugar en este momento. ¿Así que es copropietaria del bar? Ese es un dato bastante interesante...—¡Tito!— Me grita Claudia regresandome a la realidad.—Discúlpame princesa, ¿Qué decías?— Cuestiono. —Que si podemos ir a tomar un helado allí.— Dice señalando la heladería que hay en la calle de enfrente.—Claro que sí, vamos.— Les digo sonriente. Cruzamos la calle y al entrar la mujer que nos atiende me reconoce, lo que me da un poco de gracia a causa de su reacc
[MATT]La observo haciendo tragos e interactuando con los clientes que están de este lado de la barra y me doy cuenta que muchos de ellos están aquí por la misma razón que yo, ella. Es hermosa y además de eso, su sonrisa ilumina todo con esa alegría que transmite.—Estabas aquí.— Me interrumpe una voz que tan bien conozco.—Hasta que al fin llegas.— Le digo a Manuel saludándolo.Él me mira regañandome y sé que tiene razón, le dije de venir aquí hace menos de una hora. –Si me avisaras con más tiempo...— Se queja. —Siento mucho haber cambiado de planes, pero tengo mis motivos para estar aquí.— Respondo sonriente y bebo otro sorbo del exquisito trago que me ha hecho Gianna.—¿Y cuáles son esos motivos?— Pregunta con mucha curiosidad.—Es uno solo y se acerca aquí.— Contestó sonriente.—Hola, ¿Te sirvo algo?— Le pregunta la mujer de ojos color mar que me está gustando más de la cuenta.—Gianna, te presento a mi amigo y músico Manuel—los presento.—Sé quien es, lo vi en uno de tus concier
[MATT] Estoy sentado en el sofá de su sala esperando mientras ella prepara el café; y no puedo dejar de observar a mí alrededor. Sofá blanco, que me recuerda a uno que tenía en mi habitación en mis inicios, mesa de vidrio, paredes y piso en color gris, pero con texturas diferentes y varios detalles que hacen que este lugar se vea increíble. Definitivamente tiene un gusto exquisito.—Me gusta tu piso.— Le digo lo suficientemente alto como para que me escuche desde la cocina que solo está dividida por una isla.—¡Gracias!— Me responde con una enorme sonrisa y luego se me queda mirando por un instante. —Sabes, me es difícil actuar normal contigo aquí en mi casa.— Me explica mientras coloca las tazas en una bandeja junto a unas tostadas y mermelada.Me pongo de pie para intentar ayudarle, pero ella niega con su cabeza y luego mira el sofá para hacerme saber que me siente. —¿Por qué dices que te es difícil actuar normal conmigo aquí?— Le pregunto con muchísima curiosidad.Coloca la bandej
[MATT] Estamos en medio de una conversación bastante interesante de cómo decidió trabajar en el bar y no en cualquier otra cosa, por ejemplo, en marketing ya que eso es lo que estudió. Al parecer su mente está puesta en otra cosa porque se queda en absoluto silencio.—Gianna,¿me escuchas?— Le pregunto y paso una de mis manos enfrente de ese rostro que parece hecho de porcelana y tanto me gustaría acariciar.—Si, perdón... ¿Qué me decías?— Pregunta confundida haciéndome sonreír.—¿Cansada? Quizás prefieras que me vaya y te deje descansar—propongo.Casi con vergüenza ella me mira y asiente. —Lo siento, estoy hecha un zombie— se disculpa. —Déjame decirte que eres la zombie más guapa que he visto y mira que miro muchas series de zombies—le aclaro, sonriente.—Te creo, he visto tu fanatismo por los zombies en Instagram—Me responde y ambos reímos como tontos.—Veo que me conoces más de lo que creía—le comento y sus mejillas se tornan coloradas. —Me gusta que sea así, porque eso quiere dec
Debo de estar absolutamente loca por haber aceptado no solo ir a cenar con Matt Ferrer, si no lo que me propuso de casarme con él. Esto ha sido casi como haber firmado un contrato a ser conquistada por él que con tan solo hablarte puede conseguir todo. No hay que ser una genio para darse cuenta que ese hombre de porte elegante, con cuerpo absolutamente tonificado, y una voz de ensueño, puede hacer que caiga rendida a él. Así que para enfrentar esto necesito las mejores ropas. Luego de maquillarme y peinarme, observo la montaña de ropa que hay sobre mi cama, y solo se me ocurre jugar con una minifalda a rayas blanca y negro con un top corto que combina bastante bien. Busco zapatos negros, un bolso que haga juego, y ya estoy lista. Así, justo como si nos hubiésemos puesto de acuerdo, el timbre de mi piso suena en el momento preciso que he terminado de ordenar el desastre de ropa que he hecho. Camino hacia la puerta con mis piernas temblando y me cuesta creer que esté t
Si las miradas me desnudaran, probablemente ya lo estaría y en su cama. Colocó el último trozo de tiramisú sobre el tenedor y lo llevo a mi boca bajo su atenta mirada. No sé cómo he podido cenar con él mirándome de esa manera, estoy demasiado nerviosa.—¿Me miraras así toda la noche?— Pregunto cuando termino con el tiramisú.Una media sonrisa se dibuja en su rostro mientras sostiene su barbilla con la mano del brazo que tiene apoyado sobre la mesa. —Me encantaría hacerlo...— Responde de una manera muy sensual.—Matt... por favor, ya ha sido suficiente aceptando ese trato.— Le pido.—¿No te gusta que te mire?— Me pregunta y vaya que sabe cómo ponerme nerviosa; cosa que es muy difícil de lograr en mí.—La manera que lo haces es muy incomodo— Admito. —¿Y cómo te estoy mirando según tú?——Como si me estuviera desnudando con la mirada.— Digo esta vez con firmeza y mis ojos clavados en los suyos mientras que ahí está él otra vez sonriente.Su cuerpo vuelve a inclinarse sobre la mesa para a
[MATT]Las huellas de sus labios son algo que no quisiera borrar nunca. Aún recuerdo esa dulce y experta manera de besar. Me pierdo en los recuerdos de todo lo que sucedió esta noche, y lo mucho que me ha costado dejarla en su casa y despedirme de ella con tan solo un simple y corto beso. Que no hubiera dado por quedarme besándola toda la noche, pero ella ha puesto un freno a todo y aun no entiendo porque. Sé que le gusto, me lo ha dejado saber, pero ¿Por qué tiene tantos recaudos conmigo después de haber incluso aceptado nuestro trato?Me tumbo agotado sobre mi cama y solo puedo cerrar los ojos y sentir sus labios en los míos, mis manos en su espalda, y las suyas en mi cuello enloqueciéndome. ¿Acaso es normal que me suceda todo esto por tan solo algunos besos? «¡Matt, pareces un adolecente!» Me reclama mi subconsciente mientras sonrió como todo un idiota al recordar esa sonrisa tan perfectamente seductora que ella tiene. Sin pensarlo dos veces, tomo mi móvil y le envió un mensaje.*
[MATT]Ella me mira de manera muy intensa, quizás no es así, pero es que la profundidad de su mirada me hace sentir de esa forma. Recuerdo el sabor de sus labios y solo quiero volver a besarla.—¿Vas a hablar?— Me pregunta con una media sonrisa al notar que me he quedado absolutamente callado.Debo parecer un tonto, pero ella me hacer ser así; un chico tímido que no puede comenzar a hablar.—Lo haré. Solo déjame admirarte un minuto más.— Le pido mientras mis ojos van recorriendo su tan atractiva anatomía.—Están tus sobrinas aquí, puedes dejar de mirarme así.— Me pide entre risas y sé que se ríe por nervios.—Eres muy hermosa.— Le digo ignorando completamente su comentario.—Vale, gracias... pero habla de una vez que me pone muy nerviosa cuando me miras así.—«¿Nerviosa? Si debe de estar demasiado acostumbrada a esto. »—De acuerdo... Solo quería hablar contigo de lo que sucedió anoche, y obviamente del trato.— Le explico.Al parecer la he puesto muy nerviosa. Ella se quita la gorra