Luego de despedir al señor Romanov, decido que necesito un trago, pero antes hago un chequeo general de mis niños, Max se ve más tranquila.
Luego llamo de nuevo a Viktor, quien responde de inmediato.
— Te necesito — dice pareciendo desesperado — ¿cómo mierda lo hiciste con los quintillizos? Apenas y puedo con dos.
— ¿Es enserio? — pregunto, la imagen de Viktor siendo acosado por sus nenitas de cinco años y su bebé de dos.
Luego de un día ajetreado en la oficina, sólo puedo pensar en un delicioso baño caliente y un jodido masaje en los pies.Me quito los tacones en cuanto aparco el coche, maldiciendo cuando decidí ponérmelos, sólo porque combinaban con mi blusa nueva, al principio había parecido buena idea.Gruñendo, me dirijo al ascensor del fondo (que descubrí correteando a Orange cuando declaró no querer usar pañal) deseando que la cena estuviera lista, Frank no era el mejor cocinero del mundo, pero había aprendido una o dos cosas conmigo en los días libres.En cuanto abro el ascensor dentro de casa, una gigante bola de pelos color marrón aparece en mi camino, y la cosa se lanza sobre mí.— FRAAAAAAAAAAANK — Chillo aterrada, el animal, un enorme oso 'bebé' hace un sonido y me derriba, pero yo ya he perdido los papeles — ¡¡¡FR
Cuando se abre el ascensor, Anya corre directo a los brazos de su hermano mayor, quien luce como la mierda, por un segundo, me mareo al ver a Viktor en pantalones de pijama, justo como solía estar su padre, incluso el tatuaje de la unión soviética me hacía querer retroceder y llorar.- Llegaste - dice él luciendo aliviado, en ese momento el pequeño Francis entra corriendo a la sala con un gato en los brazos y el rostro parcialmente limpio.- Lyz va a patearte el trasero - digo riendo antes de cargar a Francis, Anya me mira como si la hubiera traicionado por un segundo antes de cruzarse de brazos y gruñirme.- Alexandra, ven a decirle hola a la tía Nath - llama Viktor, la pequeña sale corriendo de uno de los pasillos y se me lanza encima, haciéndome reír, se sube al sofá y decide hacerme trenzas.- Sabes que técnicamente soy su abuela ¿no? - digo levantando un
Despierto con la deliciosa sensación delos brazos de Frank rodeándome y sus besos suaves en mi cuello, seguido de una mano traviesa que se desliza sobre mi abdomen y se cuela en mis bragas.— Buenos días — murmuro sonriendo y sintiendo el calor de su cuerpo y su erección contra mi trasero.— Son las cuatro...tenemos dos horas antes de que despierten — me asegura antes detomarme por la cintura y sentarme sobre él, su erección caliente contra mis muslos.— Entonces que valga la pena — murmuro inclinándome y besando su cuello, dándole un pequeño mordisco en la clavícula antes de seguir todo el camino hasta abajo, amando la forma en que su respiración se acelera cuando llego a sus boxers, doy un par de besos por encima de la tela antes de liberarlo.— Nath — suspira cuando deslizo mi lengua por su longitud, sin meterlo en mi
Estoy terminando de revisar los documentos de la fusión de las empresas cuando escucho un estrépito en la sala, seguido del grito de dolor de uno de mis pequeños.Me pongo de pie tan rápido como puedo en dirección al ruido.— ¡Mamá! — un grito de dolor y en cuanto llego a la sala mi corazón se detiene, Orange está en el suelo, cerca de las escaleras, llorando del dolor mientras su pierna está en una posición extraña, mi corazón se acelera — mamá mi pierna.— Matthew! — llamo limpiando las lágrimas de mi hijo e intentando tranquilizarlo, mi madre estaba en casa de Henry, y Kyle en la ciudad, solo estábamos Orange, Zhevy, Mör, Max, Matt y yo— ¡Matthew ven aquí!— ¡Joder! Ya voy — gruñe Matt desde el pasillo — es que no...¡mierda!— Cariño,
— No quiero — murmura Frank estirando su mano y tirando de mi hasta tenerme atrapada en la cama bajo su brazo y contra su pecho — quédate en la cama.— Amor, es un desayuno con los ejecutivos de España — le recuerdo, pero él gruñe y me alborota el cabello — ¡Frank! Lo acabo de lavar.— No me importa, es muy temprano — murmura atrapando ahora mis piernas con las suyas y poniéndose sobre mí.— Frank, maldita sea, suéltame &mdash
Al llegar a casa, Orange está dormido, pero sus hermanos lo están esperandoatentos, y junto a ellos, mi madre luciendo preocupada.— Cariño, despierta — digo sacudiéndolo ligeramente — vamos,voy a preparar tu habitación y hacerte algo de comer ¿Quieres algo en especial?— ¿Puedes hacer alitas? — pregunta haciendo una mueca mientras lo ayudo a salir del coche, las muletas parecían molestas ahora, pero el mocoso encontraría como divertirse. Ponta Delgada - PortugalDespierto con el sonido de las gaviotas, el sabor a sal en mis labios y la sensación de mi brazo faltante empieza a ser una molestia.— André — me llama Videl, abriendo la puerta de mi habitación — Es tarde, tenemos un pedido grande ¡arriba hombre!— Ya voy — me quejo rondando en la cama y poniéndome de pie, mis piernas ya no dolían, pero trabajar con un solo brazo le daba serios problemas a mi espalda — ¿Hay desayuno? —Antes
- ¿Vas a salir? - pregunta Matt mirándome con los ojos entornados, yo aprieto los labios, intentando buscar la manera de evitar la confrontación.- Sí, iré a cenar con alguien esta noche - respondo lentamente, mirándolo desafiante, su sonrisa cínica no augura nada bueno, así que me pongo de pie, intentando ignorar su mirada.- ¿Desde cuándo "sales a cenar"? - pregunta apretando los puños.- Matt...no quiero hacer esto - me quejo - voy a salir y no tienes nad