El odio fue mi fiel compañero cuando lo conocí, Alonso Maximo, el hombre más despreciable en este mundo y por culpa del destino... mi marido. El arroganter hombre apenas y da las gracias, excepto cuando se trata de cumplir la ultima voluntad de su madre, solo entonces pone una rodila sobre el suelo para mirarme a los ojos y maldecir mi existencia antes de murmurar un juramento de amor.
Leer másNarra Andra- Amor, no encuentro mi...-- Shhh- silencié a Alonso cuando llegó al cuarto gritando, él me miró dudoso pero yo señalé hacia mis hijos que estaban dormidos en la cama- Se ven hermoso- él se acercó a mi abrazando me por la cintura- Lo hemos hecho bien ¿no es así?- pregunté mientras me daba un beso.- Lo hemos hecho más que bien, la vida nos ha puesto demasiados obstáculos para que llegar a este momento y que valiera la pena-- William ya va a cumplir un año y aún no puedo creer que haya pasado tan rápido- suspiro acariciando la suave mejilla de mi bebé provocando que abra sus pequeños ojos de color.- He aprendido a disfrutar cada momento y cada pequeña cosa a tu lado, sabiendo que en cualquier momento todo puede cambiar-- Nuestro futuro es incierto pero si de algo puedo estar seguro es que nunca dejaré de amarte, aquí o en otro mundo mi amor hacia ti simple será incondicional-- Hace años te hice una promesa frente a un juez, juré mi amor hacia ti aún y cuando no lo sen
Narra AndreaDesperté en una sala blanca con una luz que me segaba los ojos sin embargo no era una luz natural era artificial como la de un foco.- Duele- murmuré tocando mi cien.- Señorita, ¿se encuentra bien?, ¿recuerda algo?- dijo una, creo que era una enfermera por su uniforme, los ojos me pesaban, quería volver a cerrarlos pero luchaba contra ello.- No, me duele demasiado todo, podría bajar las luces- dije con voz ronca, la vi asentir y las luces bajaron de intensidad.- ¿Qué hago aquí? ¿Dónde están mis hijos? y - la siguiente pregunta quedó incompleta en el aire.Boom! La bomba explotó en mi cabeza, la verdad llena de recuerdos.- No, Alonso no, ¿Dónde está mi marido? Quiero verlo Alonso no está muerto , Él no puede morir-- Señora le voy a pedir que se tranquilice o voy a tener que aplicarle un sedante-- Quiero verlo, a mi esposo, por favor, necesito, lo necesito - traté de tranquilizarme- Él no se encuentra por ahora, señora usted tiene que descansar acaba de salir de un
Narra AndreaNadie planea nunca su muerte, uno no va por la vida pensando en el día que muera simplemente espera morir cuando tengas demasiados años para poder contar tus historia o por lo menos así lo planeaba yo.Ja, que ilusa! La vida estaba en contra de todos mis planes para bien o para...mal.Vuelvo al lugar de hace unos años, lo había olvidado pero ahora que lo veo me es lo suficientemente familiar como para recordar.En el nacimiento de mis hijos, he estado aquí ese día cuando mi madre casi me lleva pero ahora heme aquí de nuevo y no se porque.Recuerdo estar apunto de dar la noticia sobre mi bebé y cerrar los ojos por un momento pero en otro ya estaba aquí, sola.Me senté en el suelo, llevaba un vestido blanco muy bonito, toqué mi vientre con una sonrisa pero esta se borró inmediatamente cuando no sentí mi pequeño bulto, alarmada me volví a parar de golpe, jadee al sentir mi abdomen plano.Que demonios era esto?!!- Tranquila amor- oí una voz suave tras de mí - Papá ¿que pasa?
Narrador OmniscienteLa vida es buena...o por lo menos eso es lo que dicen algunas personas y no es porque no conozcan la cruda realidad en su vida, es sólo que no quieren hacerla ver a otros.El silencio puede ser agradable en algunas ocasiones, perturbador en otras o simplemente incómodo...- No te quedes callado, mierda. Dime lo que le ha pasado a Andrea, ¿porqué se ha desmayado de la nada?- gritó Alonso con voz eufórica y restos de lágrimas en las mejillas hacia William al verlo salir de la habitación donde se encontraba revisando a su esposa."Silencio" eso era todo lo que había entre ellos, la mirada triste de William provocó que con tan sólo verlo Alonso supiera lo grave que era.Alonso calló de rodillas tapando su cara entre sus manos sollozando como un bebé en la obscuridad pues tal vez era eso en lo que viviría desde ahora, si Andrea no podía salir de esto.La mirada de William aún seguía perdida igual de triste pero perdida, los pensamientos de años atrás que alojaron en su
Narra AlonsoHabía aparcado el carro en la entrada de la casa de mis padres, Andrea no había esperado si quiera a qué le abriera la puerta, salió inmediatamente del carro para abrazar a nuestros hijos los cuales nos esperaban en la entrada, yo en cambio salí desinteresadamente mientras trataba de calmar mis sentimientos de odio hacia aquel que se hacia llamar "doctor".- ¿Qué pasa hijo?- mi padre me tomó de los hombros haciéndonos parar en la entrada mientras los demás seguían, afortunadamente mis hijos estaban tan emocionados con su madre que había ignorado mi mal temperamento.- He estado estresado, eso es todo- murmuré sin querer dar más detalles, tan solo recordarlo lograba alterarme más.- La vida de casados es difícil ¿no?- preguntó a mis espaldas.- Algo así- dije sin interés, no tenía ganas de hablar con nadie, justo ahora.- Pensé que tardaría más en darte esta platica pero creo que este es justo el momento... cuando naciste tu madre inmediatamente supo que tenías el típico ca
- Deja de decir mentiras solo para que nos quedemos más tiempos si?- habló Alonso con recelo, podia ver como apretaba sus manos hasta hacerlas puños- Soy doctor, mis años de ética en esta carrera no me permiten jugar con los análisis de mis pacientes- respondió William con enojo mientras se acercaba a Alonso como retándolo- Bueno mandaste tu ética al demonio cuando trataste de besar a tu paciente casada- Ironizó Alonso mientras lo tomaba por el cuello de su camisa-Pueden calmarse los dos?! Por si alguno no lo recuerda nos encontramos en un hospital- me interpuse entre los dos y solo así Alonso lo soltó- Andrea, ¿en donde te hiciste tus estudios?- habló William ignorando completamente a Alonso mientras trataba de arreglarse su bata, tomó asiento tras el escritorio con un poco de dificultad por sus golpes y sacó un folder de su cajón- No recuerdo muy bien... era uno bueno porque cuando fui había muchos lujos y todo eso, el nombre era de un santo, creo- tanta información me fatigaba
Alonso y yo Comíamos entre risas y recuerdos con una maravillosa vista de toda la ciudad.- Te tengo una sorpresa para el postre- dijo giñandome el ojo mientras le hacia una señal al mesero, este asintió y trajo hasta nosotros una charola con un plato de pastel de chocolate un poco deforme en su forma- Pruevalo- me animó Alonso entregándome un tenedor, tomé una pequeña porción y la metí en mi boca esperando un sabor inigualable y realmente lo fue, era horrible, hice una mueca en mi rostro y cuando lo iba a escupir Alonso habló- Lo hice yo mismo- dijo emocionado, sonreí falsamente y como pude pasé el bocado- Esta bueno- mentí con una mueca- Vamos prueba más- dijo cortando un trozo más grande- Amm luego, estoy un poco llena- dije tocando mi estómago- Vamos amor sólo un bocado más...me esforcé mucho- no pude negarme más ante su carita de perrito así que encontraba de mi voluntad y la de mi bebé lo hice, literalmente tragué el bocado tratando de no sentir el sabor y cuando iba a com
- Voy a tratar de no sentirme ofendido por esto- dijo acercándose a mi- ¿A que te refieres?- pregunté nerviosa por su cercanía- Bueno, sé que tienes muchas cosas en tu mente y que alguien adentro de tu barriga te fatiga un poco pero de verdad ¿no recuerdas que fecha es hoy ?- insistió- Alonso puedes decirme ¿de que se trata todo esto?- dije sorprendida mientras veía a mi alrededor- Un día como hoy hace un par de años atrás...Dijiste "si, acepto" ante un juez, mi vida- abrí mis ojos de par en par mientras rezaba por que la tierra me tragara.- Amor...yo- tartamudeaba sin saber que decir.- Al principio pensé que era un plan para despistar me de alguna sorpresa y más con esa idea loca de la empresa, no creí que fuera verdad hasta hoy que te levantaste y te fuiste sin darme una despedida digna o un "felicidades, me has soportado un año más"- hizo una mala imitación de mi voz.- ¿Y cómo sabes que no te tengo un regalo en casa?- dije mintiendo.- porque, pequeña mentirosa siempre ocult
Seguía recostada en el sillón de la sala tan sólo con mis ojos cerrados, no sabía exactamente cuanto tiempo había pasado desde ese extraño sueño con mi padre sin embargo me había dejado un poco alterada- Señorita Andrea, ¿quiere comer algo?- Oí la voz de Sara cerca de mí y cuando abrí los ojos pude ver que estaba enfrente de mi.- No tengo hambre- dije en un suspiro desganado pero ella me miró con esos ojos de manera rara.- ¿Segura? Ni siquiera un pequeño antojo de algo con mucho chocolate- dijo con unas extrañas muecas, me iba a negar inmediatamente pero mi estómago habló primero con un gruñido- Tomaré eso como un si- habló antes de que yo misma pudiera confirmarse lo aunque de igual manera lo iba a hacer, oí las ollas y cubiertos ponerse a trabajar y yo decidí cambiarle para disfrutar de mi merienda.Subí las escaleras lentamente por los grandes zapatos de plataforma hasta llegar a mi habitación, literalmente me tiré a la cama y tiré esos zapatos hacia un lado, me puse una sudade