39. Linaje de diamantes

Eso era lo que se leía y los hechizantes ojos azules de Hariella, brillaron de orgullo. Ella lo había enviado, para que ocupara el cargo de gerente de finanzas; lo demás despendía de él, y con esto, habría demostrado que era un hombre brillante para los negocios y las finanzas. Sabía que él se volvería grande, pero si lo hacía a su lado y luego exponían su relación, dirían que era un obsequio de la magnate, y el mérito propio de Hermes, sería infravalorado, e incluso, hasta negado, pues habría comentado que había sido su regalo y no el esfuerzo del muchacho. Se había percatado, que era necesario de que él creciera por un camino diferente, en el de la empresa rival, así nadie colocaría en duda el empeño y la genialidad de Hermes. Lo supo y decidió que la separación era lo mejor. Pero luego se enteró de su embarazo y muchas veces quiso llamarlo para darle la noticia, pero entonces Hermes abandonaría todo por ella y por sus hijos. Él debía crecer solo y hacer una vida prospera y llena de
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo