Piernas

Margarita lo vio con tristeza desde la puerta y el corazón se le apretó al ver lo pálido que estaba, aun cuando siempre conservaba ese bronceado bonito que lo hacía parecer más seductor.

—De-Déjame ayudarte —titubeó y cerró la puerta detrás de ella.

Margarita tomó el desinfectante y se limpió las manos. Luego miró su abdomen y arrugó el ceño con dolor al ver las nuevas marcas que enrojecían su piel; eligió una zona cercana al ombligo para desinfectar.

El hombre se descompensó y cerró los ojos. Dejó caer la cabeza hacia atrás y respiró difícil, sintiéndose mareado y tembloroso.

—Margarita —jadeó y tomó su hombro con fuerza.

Ella tembló tanto como él al sentir lo débil que se hallaba. Aunque el hombre usaba toda su fuerza para apretarla, ella apenas podía sentir su tacto frío.

Lo pinchó con prontitud, con un poco más de seguridad que la primera vez. Siempre iba a odiar las agujas, por muy pequeñas que fueran, pero en ese momento, se controló con raciocinio.

—Tranquilo —susurró ella, pre
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo