ALEXANDER
Maneje lo más rápido que pude hacia la casa de Isabella y al llegar toque la puerta pero nadie me respondió y toque con más fuerza pero seguía sin haber respuesta, esto no me gustó nada, presentía que algo no iba bien, así que empecé a patear la puerta para abrirla, luego lidiaría con las consecuencias por irrumpir en una propiedad privada, en este momento lo único que me interesaba era ver que ella se encontrara bien.Pero cuando logre abrir la puerta la conmoción me inundo, no estaba preparado para esta escena, nunca pude imaginarme que la encontraría de esta forma.Era lo mas aterrador que podía vivir, nunca había sentido tanto miedo de algo en mi vida, pero al verla inconsciente y sangrando me sentía totalmente aterrado, yo no quería perderla.Y en ese momento supe que no podía vivir sin ella y peor aun, tampoco quería, no podía soportar vivir en un mundo en que sus preciosos ojitos no brillaran más, sin volver a ver su sonrisa que iluminaba mi vida. Tengo la certeza de que no quiero una vida sin ella y tampoco sé cómo podría sobrevivir después de conocerla y perderla, después de saber lo que es la verdadera felicidad y que tan maravillosa es la vida si la vivo con ella.Camine hacia ella con todo mi cuerpo temblando, rogando a cualquier poder superior que me escuche que ella estuviera bien, que estuviera viva y al llegar donde estaba ella tirada busque su pulso tocándola con la delicadeza de una pluma por miedo a lastimarla más y cuando pude ver que su corazón aun latía, llame a una ambulancia y a Jackson para que investigara lo que paso, yo quería llevarla lo más rápido posible al hospital en mi carro, pero tenia miedo de lastimarla aun más.— Mi ángel resiste por favor — susurre mientras tomaba su mano. —¿Quién te hizo esto? —pregunte aun teniendo una hipótesis en mi cabeza que no me gustó nada y al mirar a otro lado de la sala esta cobro más fuerza al ver nuestra foto en el suelo junto a una botella rota.Pero, ¿ese bastardo seria capaz de hacerle esto a su propia hija? ¿Qué monstruo le podría hacer esto a la persona quese supone que debería proteger? Quería destrozarlo, acabar con su vida así me condenan a años en prisión, no me importaba nada, solo hacer pagar a la persona que se atrevió a dañar a Isabella.La observe mientras mi interior se quemaba al verla así, con golpes en su hermosa carita, tan lastimada, con su cabeza sangrando, tenia miedo de incluso moverla.— Tienes que estar bien. — dije dejando un suave beso en el dorso de su mano, que se mojo con mis lagrimas, no me había dado cuenta que estaba llorando hasta que vi su suave manito mojada. — No me puedes abandonar así.La ultima vez que habia llorado fue cuando mi papá se fue de casa y mi abuelo al verme llorar me regaño y me dijo que no valia la pena llorar por cosas que no se podrian cambiar y despues de eso no llore nunca más, ni siquiera en el entierro de mi padre, pero este dolor que estoy sintiendo al ver a Isabella así me esta consumiendo y no puedo evitarlo.Pronto llego la ambulancia y me monte con ella para acompañarla mientras los paramédicos la atendían yo rogaba en silencio para que estuviera bien sin dejar de mirarla.Caminaba de un lado a otro en la sala de emergencias donde todo lucia tan monótono y vació, con ese particular olor como un desinfectante que siempre tienen los hospitales que solo me causaba desesperación mientras esperaba noticias de Isabella, tan arrepentido por todo, porque a pesar de que no fui yo el que difundió la foto con ese escrito de m****a y se la hizo llegar al papá de Isabella, fue mi hermana y soy responsable de eso, soy responsable de caer en los engaños de ella y dañar a la persona que amo, nunca debí venir aquí en busca de una venganza que no era mía y de lo que no había nada por lo que vengarse.Todo por una obsesión insana de Emma, termino en peligro de muerte la persona más inocente, la que no merecía nada de esto.— ¿Sabes dónde esta? — pregunte atendiendo le el teléfono a Jackson, esperaba que él tuviera alguna noticia acerca de Robert.— No, pero revisamos las cámaras de la casa y nadie más entro. — hizo una pausa antes de añadir. — Él salió huyendo con una maleta una hora antes de que llegaras, solo pudo ser él.— ¿No se supone que lo tienen vigilado? — pregunté furioso — ¿como no van a saber donde esta ahora?— No esperábamos que él hiciera algo así, por eso no estábamos vigilando su casa, se suponía que todavía estaría buscando salirse con la suya, ya lo estamos buscando.Esta era la verdad, todavía él no sabia que terminaría en prisión y no era el momento para huir, tenia que hacer muchas cosas para no perderlo todo, además ¿quien se podría imaginar que era un psicópata capaz de hacerle daño a su propia hija? Que le haría algo así a la persona que el debería amar y proteger.— Jackson tienes que encontrarlo rápido, quiero que pague.— Lo haré.Luego de escuchar esto colgué, no tenia ánimos para continuar la conversación, me sentía tan devastado como furioso, quiero desesperadamente que Robert pague por lo que le hizo a Isabella y cuando algunas imágenes comienzan a rondar por mi mente, empiezo a entenderlo todo, el porque Isabella no podía salir cuando estaba él, porque simplemente no podía hablarle de mí y porque se estremeció ese día que la abrace como si le doliera, era porque le dolía, quien sabe cuánto tiempo este monstruo ha estado golpeando a su hija y solo me puedo recriminar a mi mismo no haberme dado cuenta y no poder protegerla a tiempo.No poder estar ahí cuando más lo necesito, que ella no se sintiera en confianza para contármelo y ser el detonante de esto que le ocurrió, esto me estaba matando, daría todo por devolver el tiempo y poderla proteger de todo, de su papá, de mi hermana e incluso de mi mismo.— Familiares de Isabella Alarcon — llamó el doctor al salir del quirófano.— Soy yo, ¿Cómo está ella? – pregunté ansioso mientras me acercaba.— ¿Qué vínculo familiar tiene con ella? — preguntó el observándome con recelo.— Soy su prometido, no tiene a nadie más. — mentí, para que terminara de decirme como estaba ella.— Bueno, la señorita tuvo demasiados golpes en el cuerpo y se fracturó dos costillas, además que el golpe en su cabeza fue demasiado fuerte y entró en coma, tenemos que esperar a ver como se desarrolla.Sabia que ese bastardo le había hecho mucho daño y quería acabar con él en este instante por eso, pero no me esperaba que ella terminara en coma, me aliviaba saber que estaba viva pero que no despertará me aterraba.— Señor esto ya lo reporté a las autoridades y no tardarán en llegar, así que es mejor que no se mueva de aquí — dijo y lo mire desconcertado para luego de un momento entender a lo que se refería.Él pensaba que yo le había hecho esto a Isabella y la sola idea me causa repulsión, yo nunca le haría algo así a la mujer que amo, soy un bastardo cruel pero nunca podría hacerle algo así a la persona que se supone que debo proteger para toda mi vida.— Ya lo había informado y lo están buscando. — explique, aunque no tenia porque explicarle nada pero no soportaba la idea de que me acusaran de hacerle esto a mi ángel.— ¿Qué? — preguntó mirándome desconcertado.— Ya están buscando a la persona que le hizo esto, cuando vengan las autoridades les explicare.El me miro aun dudoso, pero asintió, para luego añadir que trasladarían a Isabella a una habitación y así retirarse.Poco después de que se fue, llegaron los oficiales a los cuales les expliqué que ya había informado sobre esto y que si tenían alguna duda hablaran con Jackson el jefe del departamento. Esperaba que encontraran a Robert pronto y así asegurarme que nunca más viera la luz del sol, no se la merece, no despues de hacer tanto daño, incluso a su propia hija.Debe haberle estado haciendo esto por años y mi inocente niña aguantándolo todo sin pedir ayuda a nadie, me duele tanto el corazón de solo imaginar todo lo que ha tenido que vivir y siento tanto odio al mismo tiempo por él.Mi ángel ojala me hubiera dado cuenta de lo que le pasaba, debí prestar más atención, debí poder protegerla, pero estaba tan ciego por mi venganza hacia su papá y por las mentiras de mi hermana, que simplemente deje pasar esas pequeñas señales y ahora lo único que me queda es arrepentirme y recriminarme por no ser lo que ella necesitaba.Pero es que actuaba tan bien, ella siempre dio a notar a todos que tenia una vida perfecta, incluso a sus amigos, porque tengo la certeza de que si supieran por lo que estaba pasando habrían hecho algo, pero ella escogio no confiarle esto a nadie.Quizás tenia mucho miedo de ese monstruo y no la culpó, desde niña estaba indefensa en sus garras, solo me puedo culpar a mi mismo por no darme cuenta de lo que vivía y dejar que mi hermana la orillara a terminar así.Tres meses antes.ISABELLARecién estaba comenzando mi cuarto semestre de la carrera en psicología, llegando a la universidad, robando miradas a mi alrededor como siempre, decidida y aparentando que tenia el mundo a mis pies, una mascara que había creado para ocultar una realidad bastante vergonzosa y triste que ninguna de las personas que me miraban podrían imaginar gracias a la perfecta imagen de frialdad y distancia que he creado a lo largo de los años.Estaba caminando para dirigirme hacia mi primera clase del día, cuando lo vi, el único hombre que robo mí atención con solo mirarlo, transmitía un aura de tener todo bajo control, una seguridad increíble y con una belleza y cuerpo que complementaba todo lo demás, ¿Quién lo podría ignorar? Definitivamente si había una persona esa no era yo, ni nadie más en esta universidad, ya que todas las mujeres alrededor lo observaban con ganas de devorarlo y los hombres lo veían con algo de recelo ¿ Y como culparlos? Seguramente se sentían algo
ALEXANDERApenas iba llegando cuando la vi, la única razón por la que vine aquí con la excusa de hacer una maestría, Isabella Alarcon luciendo tan hermosa como ninguna otra chica que hubiera visto antes, algo fría e incluso se veía inocente y frágil, parecía un jodido ángel, algo inalcanzable ¿Quién podría decir que debajo de esa apariencia angelical se encontraba un alma podrida? Si no conociera su pasado me engañaría con su belleza, la querría tomar y protegerla de este mundo cruel, pero en cambio la conozco tanto que definitivamente no seré su protector si no que soy de la persona que se tiene que cuidar, quien la quiere destruir. Pero en el momento en que cruzamos miradas a pesar de que solo quiero destruir su mundo como destruyó el de mí hermanita, algo en ella me atrapo, fue casi electrizante, esos ojos azules me envolvieron y casi agradecí cuando retiro su mirada, la seguí observando hasta que finalmente se perdió de mí vista, ya la había visto en fotos pero en persona es mucho
ALEXANDERDespués de pensar que ese día ya no tendría tiempo de acercarme a Isabella, mientras manejaba hacia mi hotel, rápidamente me di cuenta cuan equivocado estaba y tenia la suerte de mí lado, quizás un poder superior si es que existía quería que me encargara de hacer pagar a esta chica por todos sus pecados. Al parecer su auto se había averiado, un Audi que seguramente su querido papi le compro con dinero que no le pertenecía.Que buen momento para mí que tuve la suerte de cruzármela en mi camino hacia el hotel donde me hospedaba, necesitando ayuda y esta vez podría hacer el papel de salvador, así que rápidamente me estacione y camine hacia ella para ofrecer mí ayuda.— Hola, ¿que le paso? Si quieres le puedo echar un vistazo. — me ofrecí y ella salto al darse cuenta de mí presencia, lucia hermosa con su cabello suelto ondeando contra el viento, sus mejillas de porcelana ruborizadas, mientras vestía un pantalón negro alto que delineaba muy bien sus hermosas curvas que combinaba
ISABELLAEntrando a mi casa estaba muy nerviosa y ya no solo por enfrentar a mí padre, después de llegar tarde si no también por Alexander, este hombre tenia algo en él que me atraía más de lo que me gustaría admitir, nunca había conocido a alguien así y nunca había sentido lo que siento cuando lo veo o cuando me toca, esa electricidad que sentí cuando me tomo del brazo me tiene totalmente desconcertada, queriendo descubrir si cada toque suyo se sentirá así, pero se que este hombre tiene algo peligroso en él, lo se por la forma en la que me mira y se que no tengo que acercarme pero es lo único quiero cuando lo veo, todo el control y confianza que transpira me hace querer estar cerca, parece que nada lo podría derribar y que nadie lo podría controlar, te hace sentir que puede dominar el mundo fácilmente, eso es lo que más me atrae además de su impresionante atractivo y esos hermosos ojos grises que hechizan.— ¿Por qué carajos estas llegando tan tarde? — preguntó mí padre furioso mi
ALEXANDERQue divertido es ver a una persona esperanzada pensar que todavía se puede salvar, que puede seguir engañando, que todavía hay una salida, cuando mientras más lucha más profundo se hunde en la trampa que cuidadosamente diseñaste. Es que es realmente gratificante verlos pensar que aun pueden ganar, que están por encima y no hay ley para ellos, cuando ya esta todo perdido, cuando se como terminara todo, este juego definitivamente me encanta.Pobre hombre que en realidad no sabe lo que le espera, pero yo si, por eso termine de mandar otras indicaciones a mis subordinados y más información a la policía, todo yendo tal cual lo planee. Ahora que termine tengo que prepararme para mí cena con Isabella.…— Hola. — saludó ella mientras abría la puerta y se sentaba en el auto con una sonrisa tímida, luciendo más hermosa que nunca, estaba vestida con un vestido rosa corto con mangas princesa, ajustado arriba, resaltando su cintura y suelto abajo, con su hermosa cabellera en una una
ISABELLAYa había pasado una semana desde mí primer beso con Alexander y habíamos salido tres veces más, por suerte mí papa aun no llegaba de su viaje y había podido salir con él y disfrutar tiempo juntos y sobre todo besarnos, besarnos mucho. Cuando estaba con él podía olvidarme de todo, de cada cosa que agobiaba mí mente, por fin podía relajarme y solo dejarme llevar y hacer algo prohibido, sabia que esto estaba muy mal y que Alexander no era un hombre bueno para mí pero se sentía tan bien estar con él, esto era lo mejor que me había pasado, estando con Alexander me sentía tan viva, tan feliz que simplemente no quería pensar en las consecuencias que claramente habría, porque siempre las hay.Pero hoy una vez más podía olvidarme de todo eso junto a él, lo estaba esperando para ver una película, Mirtha hoy tenia el día libre y volvería mañana, así que podríamos pasar tiempo a solas. Sonó el timbre y fui a abrirle corriendo y estaba allí parado tan guapo como siempre vistiendo por prim
ISABELLALos días pasaron y las cosas con Alexander iban muy bien, estar con él me encantaba, lo disfrutaba tanto, me hacía sentir totalmente viva, aunque aún no habíamos dado el siguiente paso en nuestra relación espero que sea muy pronto, me moría de ganas por entregarme totalmente a él y ya había perdido un poco más el miedo después de las últimas sesiones en las cuales el placer nos consumía.Lo único que atormentaba mi mente era el regreso de mí padre, eso si complicaría todo, no sé cómo haré para seguir viendo a Alexander, pero de alguna forma tenía que hacerlo, en estos momentos ya no quiero estar sin él, así que definitivamente encontraré una manera para poder verlo.…— ¿Papá puedo ir a casa de Caroline hoy? Necesito hacer un trabajo que mandaron y es muy importante.— ¿ Por qué mierda tienes que ir? Hazlo tu sola— preguntó un poco molesto.— Papá es que la profesora dijo claramente que tenia que ser en grupo, aparte de que es muy difícil, por favor, te prometo que
ALEXANDERAl apenas irse Isabella supe que tenia algo muy importante que hacer, después de todo necesitaba tiempo con ella para que pudiera caer en mi trampa. Aunque lo que estoy sintiendo por ella casi me hace dar marcha atrás, ya que aun no puedo creer que esta hermosa chica pueda ser tan mala y hacer tanto daño, es que parece un ángel, estar con ella logra algo en mí que en mis 25 años de vida nunca había sentido, me da paz, felicidad y una pasión y posesividad descontroladas, todo con ella encaja y me hace querer hacer cualquier cosa por verla sonreír y destruir a cualquiera que la quiera dañar.Y casi dejo todo mí plan de venir aquí atrás, casi tomo la decisión de irme de nuevo y así encargarme de la empresa y estar con mi familia, olvidarme de Isabella para siempre porque a pesar de no querer hacerle daño se que nunca podría estar con ella, no después de lo que le hizo a mí hermana, no podría traicionarla de esa manera, no podría traicionarme a mí mismo de esa manera, pero lueg