¿Y si son hermanas? Tras conocer a Bianca en aquel funeral, Ricardo se hizo esa pregunta una y otra vez, pero, obtuvo la misma repuesta,
–esto no puede ser posible –se dijo él, hasta donde sabía, Beatrice, era hija única, al menos, a Lorena, la madre de su ex mujer, nunca se le conoció otra hija, pero, el comentario de Carmina, amplió la sospecha en Ricardo, no solo él se había fijado en el parecido físico que compartían su esposa y Bianca, aquel comentario de su hija, abrió una ventana de posibilidades.
Decidido a indagar mas, y cada información que encontraba sobre Bianca, lo ayudó a atar algunos cabos sueltos, Bianca vivía en Venecia, a tres horas de su ciudad, pero además, trabajaba en el hospital en donde le dieron asistencia a su mujer, los últimos días de su vida, y ese hospital, lo dirigía Norma, una gran amiga de Ricardo.
Ricardo ya tenía planeado viajar a Venecia a cerrar algunos negocios, pero por igual, quería visitar el hospital para ver a Norma, con la intención de donar una importante suma de dinero para el desarrollo del centro médico, porque cuando Beatrice se enfermó con ese virus extraño, Norma se arriesgó a recibirla sin importar las consecuencias, y aunque no pudo salvar su vida, Ricardo fue consciente, que ellos hicieron todo lo posible para salvarla
Unas semanas después de la muerte de Beatrice, Ricardo le comunicó a Norma que viajaría hasta Venecia, y ella sin duda, arregló todo para recibirlo
Luego de algunas horas de viaje Ricardo llegó a su cita, la doctora Norma lo esperaba en su despacho, amablemente lo invitó a sentarse
–siéntate Ricardo, que gusto recibirte amigo, ¿deseas tomar algo?– le preguntó Norma
–agua estaría bien–agregó él
Norma llamó de inmediato a su secretaria, y ordenó que le llevara agua para su invitado y café para ella
–Ricardo, muchas gracias por animarte a venir, se que no la has estado pasando muy bien, –le dijo Norma, mirándole a los ojos
–Norma, para mi es un placer estar aquí, lo que hicieron por mi esposa, te lo agradezco inmensamente, aunque lamentablemente murió, –añadió Ricardo agachando su cabeza y cruzando las piernas, –pero, al menos se que con esta donación, ayudará a salvar vidas, es lo menos que puedo hacer, concluyó él
Norma se permitió tocarle la mano a su amigo, en un intento por consolarlo, entonces el la miró y sonrió, en ese momento la secretaria de Norma entró a la habitación con el agua y el café que le habían pedido.
–y cuéntame Ricardo, que es eso que me quieres preguntar, te escuché un poco desorientado cuando hablamos por teléfono hace días, –expresó Norma
Ricardo suspiró un segundo, miró a su amiga seriamente y le dijo
–es que ando en busca de una información
–si, ¿sobre que, yo en que te puedo ayudar?, si acaso tienes alguna duda sobre tu donación, mira, estos son papeles para que veas el buen funcionamiento de nuestro hospital, y para que estés seguro en donde será invertido tu dinero, –le dijo Norma, y le pasó una carpeta con algunos documentos
–no Norma, esto no es necesario, no tengo la menor duda del funcionamiento de este hospital, cuando te dije que ando en busca de información, no me estaba refiriendo a eso –agregó Ricardo
–ah no, y a qué?
–es que, necesito información sobre una empleada de este hospital
–ah si, de quien, –preguntó Norma con un extraño gesto en su rostro
Y antes de que Ricardo dijera de quien se trataba, tocaron la puerta de la oficina de Norma –perdona Ricardo dijo Norma –pase –gritó ella desde su escritorio
Entonces se abrió la puerta y Norma dijo
–ah Bianca, eres tu, dime, que necesitas
De inmediato, cuando Ricardo escuchó ese nombre, volteó la cabeza automáticamente y miró fijamente a aquella figura frente a el, era la persona que el buscaba, cuando Bianca lo vió, se quedó perpleja ante su presencia, sin poder pronunciar alguna palabra por unos segundos, Ricardo y Bianca, se quedaron en una mirada fija, y parecía como si se estuvieran hablando, sin pronunciar una sola palabra, pero Norma irrumpió el silencio
–a ver Bianca, estoy en una importante reunión de negocios, puedes decirme que pasa –dijo ella confundida, al ver la reacción de Bianca y Ricardo
–si Norma, disculpa, –le contestó Bianca, es que necesito que me autorices esto, entonces le pasó un papel, Norma tomó la hoja con rapidez, puso su firma y se la entregó de inmediato
–algo mas Bianca, –pregunto Norma
–no, es todo, permiso agregó Bianca y se fue
Otra vez quedaron solos Norma y Ricardo, y ella no podía dejar pasar desapercibido, aquella reacción que tuvo Ricardo, al ver a Bianca entrar por esa puerta
–que, la conoces, –le preguntó Norma enseguida
–a quien– respondió el
–a Bianca, acaso crees que no me di cuenta como te sorprendiste al verla entrar por esa puerta–agregó Norma
Ricardo guardó silencio por unos segundos, no sabía que contestar, el no esperaba encontrase con Bianca de esa manera, el tenía planeado vigilarla de lejos sin que ella se diera cuenta, pero fue inútil
–contéstame Ricardo, acaso, es de ella de quien quieres información,–le interrogó Norma
–si,no te voy a mentir –dijo el de inmediato, por ella te iba a preguntar, es que se apareció en el velatorio de Beatrice
–¿Quién? Bianca en Florencia–agregó sorprendida Norma
–pues si –dijo el– ella misma
–explícame y que relación tenía ella con Beatrice –preguntó
–eso es lo que necesito saber, ella me dijo que eran muy intimas amigas, pero Beatrice, nunca la había mencionado, pero, cuando me puse a investigar sobre ella, me di cuenta que trabajaba aquí, y adivina que mas
–¡que! –Se alarmó Norma
–tiene el mismo apellido paterno de Beatrice
–no te lo puedo creer –agregó Norma bastante anonadada, –Bianca trabaja con nosotros hace menos de un año, me la recomendó un amigo abogado, ella es latina, y tiene mas o menos un año en el país, creo, hace un excelente trabajo como recepcionista, no he tenido queja en lo absoluto de ella, si quieres, la puedo mandar a llamar para arreglar esto.
–no, por favor Norma, esto lo quiero solucionar a mi modo –dijo Ricardo agradezco mucho tu ayuda, pero debo llegar al fondo de esto
–esta bien, te respeto –dijo Norma, pero, esta noche debemos celebrar nuestro acuerdo, contar contigo como socio para esta nueva investigación, es muy importante para mi
–si Norma, eso lo se, me quedaré unos días en Venecia, estaré en el hotel, podemos vernos ahí si deseas
–no, esta vez yo invito, –agregó ella
Norma y Ricardo se quedaron un buen rato en la oficina de Norma, coordinando sus asuntos de negocios, mientras que Bianca, volvió a su puesto de trabajo, unas horas mas tarde, a la salida del hospital, Ricardo esperaba a Bianca, se le cruzó en el camino al verla salir, él caminó apresuradamente detrás de ella, para evitar que se fuera
–Disculpe– le gritó el, puede dedicarme unos minutos, Bianca Panizzolli
Ella se detuvo, y volteó para atrás,
–como sabes mi apellido, acaso estuviste investigando sobre mi, –preguntó ella
–no es lo que crees, no te estoy acosando ni nada, no creas que vine hasta acá detrás de ti, agregó Ricardo excusándose, –Norma es mi amiga de años, y aquí, atendieron a Beatrice sus últimos días de vida, pero, supongo que eso ya lo sabes, ¿o no? Le preguntó el mirándola a los ojos
–pues si, lo se, todo eso lo se, añadió Bianca
–ey, dijiste ser la mejor amiga de mi esposa, pero, mi hija y yo, no sabemos nada sobre ti, me preguntaba, como es que Beatrice nunca me dijo nada sobre su mejor amiga
–es que es complicado Ricardo, le dijo Bianca y se dio la vuelta para continuar su camino, pero el la siguió insistentemente
–espera por favor, le pidió Ricardo –nunca fueron amigas, ¿verdad? agregó
–Ricardo, perdón, pero tengo que seguir, le dijo Bianca abriéndose paso ante el,
–no, no te vallas por favor, solo dime, cual fue el verdadero motivo de tu visita
Bianca se detuvo y lo miró a los ojos
–a ver, es que, ¿enserio no sabes nada? Le preguntó ella
–saber algo de que, la interrogó Ricardo sorprendido
Entonces Bianca pasó su mano derecha por la frente y murmuró frente a el,
–esta Beatrice hasta la tumba se llevó sus secretos
–¡que dices! Gritó Ricardo sorprendido
–nada Ricardo, siento no puedo ayudarte, dijo ella y caminó unos pasos
–es que, tienes su mirada, y el color de sus ojos, que por un momento pensé que,Tras aquellas palabras, Bianca se quedó helada por unos segundos, mientras que Ricardo seguía detrás de ella en silencio, para ver su reacción, y ella volvió a ponerse frente a el –que pensaste que Ricardo, por favor, termina la frase –pidió Bianca
–y, si mejor te invito un café y charlamos –sugirió Ricardo.
Tal parecía que el plan de Ricardo para encontrarse con Bianca en aquella ciudad, estaba marchando de acuerdo a lo esperado, o talvez mejor aun, porque sin hacer mucho esfuerzo, dió con el paradero de ella, aquella misteriosa mujer que no hizo mas que sembrar dudas con su visita en el velatorio de Beatrice, pero, lo que Ricardo no se cuestionó, o analizó siquiera, es que, Bianca deseaba ser encontrada, ella, planeaba acercarse a esa familia, pero quería hacerlo sin ninguna presión, necesitaba ganarse la confianza de Ricardo y la de su hija. Bianca, tenía demasiadas razones para hacerlo, llevaba planes muy ocultos, que luego serian revelados, y Ricardo, ya había mordido el anzuelo.Esa noche, Ricardo se reunió con su amiga Norma, y socia a la vez, ella quiso impresionarlo, lo invitó a un prestigioso restaurante, con una hermosa terraza en medio del agua, estaban en Venecia, las edificaciones en medio del agua, eran muy comunes, aunque a Ricardo esos lujos y peculiaridades, no lo impr
Bianca tenía objetivos bien claros y los estaba llevando a cabalidad sin tregua, la aceptación de Ricardo para que ella participase en la celebración del cumpleaños de Carmina, era vital para lo que ella tenía en menteEsa mañana, después de desayunar con Ricardo, Lorenzo, el abogado amigo de Norma quien había recomendado a Bianca para el trabajo de recepcionista en el hospital, y quién además, estaba asesorándola en algunos asuntos legales, pasó por ella al hotel, Ricardo la acompañó hasta la puerta, se quedó observando a Lorenzo desde afuera con cara de curiosidad, y Ricardo, en su cabeza pensaba, ¿quién será este hombre?, será su esposo, novio, o será Paulo, y Bianca, para alivianar la cara de indiscreción de Ricardo hizo que Lorenzo saliera del auto, y los presentó—Ricardo, te presento a Lorenzo, mí amigo y mí abogado, es amigo de Norma, gracias a él, tengo trabajoEntonces Ricardo le dio la mano y Recordó lo que Norma le había contado, que un amigo abogado, había recomendado a B
Ricardo todavía charlaba con Norma en su hotel, acerca de los planes que tenía con Bianca, cuando recibió una llamada inesperada, era Lorena, su ex suegra, cada vez que a Ricardo le tocaba cruzar alguna palabra con aquella mujer, que eran ocasiones muy escasas, su mente ya estaba preparada para hacer frente a las palabras arrogantes que solían salir de la boca de aquella dama, quién siempre estuvo en desacuerdo con la relación de Beatrice y Ricardo, porque según ella, el era todo lo contrario a lo que Lorena imaginó para su hija, no era rico de cuna, y además, el nunca accedió a los caprichos de aquella vieja malhumorada, que siempre quiso manejar la relación de Ricardo y Beatrice a su antojo, Beatrice como amaba a Ricardo, decidió alejarse de su madre para construir su vida al lado del hombre que ella decía amar, por un lado, hizo su fortuna con trabajo duro, y en menos de lo que se imaginó, se convirtió en un magnate de la industria Hotelera, en el más respetado de toda ItaliaCuand
Después de unas horas de viaje y un gran susto que se había pegado Ricardo, llegó a su mansión, lo primero que hizo fue pegarle un fuerte abrazo a su hija Carmina que lo recibió en la sala —papà, está todo bien –le pregunto ella al ver su reacción—si, pequeña, está todo perfecto, es que fueron muchos días sin verte, y ya te extrañaba –añadió.La madre de Ricardo, también salió a recibirlo—hijo, te noto un poco pálido, ¿estás bien? –le preguntó–si mamá, necesito que hablemos –contestó el, invitándola a subir a su habitación para hablar en privadoRicardo abrió la puerta de su cuarto, y notó, que todas las pertenencias de su difunta esposa, seguián repartidas en cada rincón, se quedó parado, mirando fijo por unos segundos, mientras por su mente, se cruzaban las imágenes de Beatrice y Bianca, y no aguantó quedarse en esa habitación, cerró la puerta y dió la espalda, su madre que estaba detrás de el, preocupada preguntó–hijo, me tienes muy nerviosa, ¿que pasa? –le cuestionó su madr
La mañana del domingo del diez de abril estaba soleada, cálida, llena de una energía que irradiaba a través de la ventana de la habitación de Bianca, eran las 11 de la mañana, en plena primavera, y Bianca ya se estaba alistando para visitar a los Ferraris en Florencia, asi como estaba el sol radiante, estaba ella, se había vestido con los colores de la estación, llevaba puesto un hermoso vestido amarillo, estampado con unas vistosas flores, blancas y verdes, y una sandalias blancas con tacones, que le hacian destacar sus agraciadas piernas.Despues de vestirse, se ató su pelo, se vio al espejo, ese peinado que se habia hecho parecia refinar mas su bello rostro aterciopelado, se pintó los labios de un rosa tenue, se delinió los ojos con rimel negro, empolvó su rostro para sacar el esceso de brillo de el, buscó en su gabetero su perfume, ese que usaba hace mucho tiempo, un dolce, el “Ligh Blue” suspiró el aroma en el ambiente, parecía disfrutarlo cada vez que llevaba puesta esa fraganc
Ricardo y Bianca se quedaron unos minutos a solas, lo suficiente como para que Ricardo se diera cuenta de la fascinación que tenía Bianca con Carmina, y él, por momentos, veía en Bianca, la imagen de Beatrice, pero, aunque se parecían mucho, sin duda, también se diferenciaban también en algunos aspectos, Bianca, era más delgada, su tés de piel un poco más oscura, la contextura de su cuerpo, sin duda, delataba que era una mujer latina, con unas curvas, bien definidas, y su pelo, una mezcla de textura, pero Beatrice, era totalmente Europea, mientras Ricardo observaba a Bianca, se cuestionaba, ¿De dónde venía la conexión de Bianca con Beatrice? No lo sabía, pero si de algo estaba seguro, era que no se iba a quedar con las dudas —tienes hijos—le preguntó Ricardo a Bianca, ella se mantuvo callada, mientras en su cabeza pensaba qué contestar —pues no —contestó, pasando su mano por la panza, mientras al mismo tiempo desviaba su mirada, con una sonrisa fingida para disimular la angustia que
Era un hecho, Ricardo le había dado la bienvenida a su vida a aquella mujer misteriosa que apareció en el velatorio de su esposa, ya conocía su nombre y apellido, el ya estaba enterado de su origen, pero, ¿Era cierta toda aquella información que Bianca le suministro? En verdad, la madre de Bianca era hermana del padre de Beatrice, pues, Ricardo no estaba del todo seguro, para comprobar, solo tenía la versión de Bianca, pero, el era un hombre de mucho poder, e influencia y tenía la Facultad de investigar lo que quisiese, de hecho, en los días posteriores a la visita de Bianca a su casa, fue lo que hizo, estaba confiando lo más preciado de su vida, que era su hija Carmina, a una mujer que decía ser la primera hermana de su ex mujer, aunque el en el fondo creí esa versión, había algo que le daba esa seguridad, pero era mejor despejar todas las dudas.Bianca, había vuelto a incorporarse a su trabajo de Recepcionista en el hospital en Venecia, y paralelamente, llevaba una semana planean
Faltaban dos semanas para el gran festejo de Carmina, Ricardo, descansó plenamente en el trabajo de Bianca, y es que, no era para menos, ella había organizado con lujos y detalles la fiesta de su pequeña niña, y según lo que prometía, era un agasajo que daría de qué hablar, pero para bien, aunque, Bianca tenía todo bien organizado, aún no sabía de qué manera, se presentaría ante Lorena para no armar un escándalo, no, eso no estaba en sus planes, pero además, Carmina no se merecía que su fiesta se fuese abajo, solo porque ella tenía algunas cuentas que saldar con su perversa abuela. Mientras Bianca buscaba la manera de como hacer para que el encuentro entre ella y Lorena fuera en silencio, recibió la propuesta menos pensada de parte de Ricardo Una mañana, Bianca estaba en la casa de Ricardo, ahí se haría el festejo, aún cuando Ricardo tenía otros lugares para ofrecer para celebrar la fiesta cómo sus magníficos hoteles, aceptó la propuesta de Bianca de festejarlo en su casa, y más si