Capítulo 31
Las cinco amigas cabalgaban bajo la luz de la luna, sus risas resonando en el aire, animadas por la audaz travesura de Marie.

—¿Cómo se te ocurre besarlo frente a sus hombres? Te admiro, amiga —comentó Sira, entre carcajadas.

—Me lo debía ese sinvergüenza. Siempre alardeando de su hombría frente a todos —respondió Marie con una sonrisa satisfecha—. Se quedó pálido.

—¡Se merece eso y más por corresponder a los coqueteos de tu hermana frente a ti! —Añadió Emma entre risas—. Pero todavía no entiendo cómo no se dio cuenta de que eras su mate.

—Él lo supo desde el primer momento en que me vio. Lo vi en su arrogante mirada —dijo Marie encogiéndose de hombros—. Pero al verme como una chiquilla mal vestida, decidió que no valía la pena y me dejó en claro que no iba a abandonar su vida de libertinaje. Por suerte, logré escapar de mi familia abusiva; de lo contrario, estaría llorando en un rincón ahora mismo.

—Te comprendo. Yo quería matar a ese desgraciado de Gedeón y dejarlo desangrando allí m
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo