EPÍLOGO.

[Dos años después...]

Me despierta una cálida boca que succiona mi pezón. Espero no estar soñando.

Si lo estoy, pretendo disfrutar de este sueño hasta dónde pueda. Arqueo mi espalda cuando unas enormes manos aprietan mis senos y el placer desenfrenado da un latigazo desde mi pecho hasta mi coño.

El gemido que estaba conteniendo se escapa de mí boca.

De nuevo aquellos labios se pegan en mi pecho, pero esta vez van directo hacía el otro pezón, mientras sus manos juguetean en mi abdomen bajando hasta mí centro.

Después siento algo duro en mi muslo y un par de dedos jugueteando con mi clítoris.

Definitivamente para nada estoy soñando. «Es mí bizcocho delicioso» y tiene un don especial bajo las sábanas que me vuelve loca.

Besa mi vientre con parsimonia hasta que baja más para colocarse entre mis piernas.

Utiliza sus dedos y su lengua para jugar con mi clítoris sin piedad, trato de no gritar muy fuerte su nombre pero me es imposible y cuando pienso que ya no aguanto más, sube y restriega
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo