POV : LYON.

Doy toquecitos impacientes en la mesa, mientras espero a que la trabajadora social ingresé a la sala con mi pequeña Gwen.

Hoy se cumple un mes desde que la alejaron de mí lado, lo primero que hicimos fue regresar con nuestra familia al día siguiente después de aquella bien merecida reconciliación, mi corazón daba saltos mortales en mi pecho en el momento en que me reencontré con los chicos, especialmente con Ginebra.

Había creado un vínculo especial con cada uno y me arrepentí de haberme separado de ellos en la forma que lo hice, ya les bastaba con la inestabilidad del idiota de su padre como para que yo también sea un inconsciente y al primer desacuerdo salga corriendo de su lado.

También nos ocupamos de explicar a Ginebra, los límites que conllevan la separación definitiva entre Uriel y Arianna, ahora que está adaptándose a una vida sin poder caminar no podíamos separarla del imbécil ni de su familia, pero si mantener su acercamiento bajo supervisión solo para evitar cu