Inicio / Romántica / Estaciones en un Bosque Remoto. / Diente de león: Segunda parte.
Diente de león: Segunda parte.

El pequeño Ferus había crecido rápido y ahora tenía 3 años. Era un niño muy alegre y entusiasta, con una energía que parecía no tener fin. Corría y saltaba por la casa, sus pequeños pies haciendo eco en el suelo de madera mientras su risa inocente llenaba el aire. Aquella risa, tan pura y brillante, era un rayo de luz en medio de la penumbra que parecía envolver el hogar. Ferus no conocía otro sentimiento más que el amor, y lo demostraba cada vez que veía a Fausto. Con ojos llenos de admiración, lo seguía a todas partes, llamándolo "papá" con una devoción que Fausto encontraba difícil de aceptar.

Para Fausto, la casa que una vez fue su refugio de tranquilidad se había transformado en un espacio de tensión constante. Cada risa de Ferus, cada pequeño paso que el niño daba hacia él, era un recordatorio de la vida que ahora llevaba, una vida que no había planeado ni deseado. Aunque con el tiempo había aprendido a tolerar la presencia del niño, en su interior se agolpaban sentimientos enco
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo