Renacer.

Narra Adriana:

La gente siempre habla de lo placentero que es llegar a casa luego de un día agotador en el trabajo, o tras un viaje de varias semanas fuera, y hasta luego de una tarde de afanes en el centro. Siempre que llegamos a casa nos sentimos en paz, seguros de que nada mala podrá pasarnos dentro de nuestras cuatro paredes. Sin embargo, a pesar del alivio que podría sentir hoy, una sensación de desasosiego todavía sigue aquí, a pesar de que sé que nadie podrá lastimarme ahora.

—¿Te gustaría algo de comer? —pregunta Jeremiah, ahora que me ha dejado en uno de los taburetes de la barra del desayuno.

Conociéndolo, seguro que tendrá la despensa vacía, así que inevitablemente sonrío y lo miro con cariño.

—¿Hay algo en la alacena?

Me mira avergonzado y se encoge de hombros.

—Puede que aparezca algo —promete y se pone a trastear entre los gabinetes hasta encontrar una sopa de sobre —Bingo.

Lee las instrucciones en el dorso del envase y en menos de cinco minutos ya está lista. La sirve
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo