Rose, jamás imaginó que su vida se vería afectada por la traición de James y su doble vida, pero lo que más la afectó fue la aparición de una nueva vida dentro de su vientre.
Leer másMAXWELLMe derrumbé sobre su cuerpo. Mi corazón está agitado y me sorprende el glorioso momento que acabo de compartir con ella. Juana nunca me hizo sentir así y ser consciente de ello despierta todas las alarmas dentro de mí.Incluso contra mis propias convicciones, la beso en el hombro, pero necesito tomarme un momento a solas para recuperar el control de mis emociones.Me levanto de la cama y voy al baño. Ninguno de nosotros ha dicho ni una sola palabra después del majestuoso orgasmo que hemos disfrutado... mejor entonces, no quiero decir nada fuera de lugar que complique aún más esta extraña e inquietante situación.Una vez dentro, cierro la puerta. Camino hasta el fregadero y sostengo las manos hasta el borde con todas mis fuerzas.¡Maldita sea! ¿Qué coño me está pasando? No puedo permitir que un buen momento de sexo nuble mi comprensión y me anime a dar un paso equivocado. Especialmente después de lo que acabo de sufrir con Juana.Tengo que meterme en la cabeza que esto es solo
Se instala entre mis piernas y sube a una de ellas sobre sus caderas, mientras me besa de nuevo con tanto deseo que todos los pelos de mi cuerpo inevitablemente se levantan. Le devuelvo el beso con la misma pasión con la que lo está haciendo. Sus besos son cálidos y profundos. Alterna besos con chupar la lengua y termina mordiéndome suavemente el labio inferior.—Déjame quitarme la ropa e ir a buscar un condón nuevo.Me lo dice con una voz profundamente ronca. Y me da un beso antes de levantarme de la cama.Lo veo alejarse para recoger algo del suelo. Puedo ver lo que cayó al suelo mientras me empujaba contra la pared. Era su cartera, en la que guarda los preservativos que lleva consigo.—Solo me quedan un par más—, me dice mientras los levanta en la mano y vuelve a mí, —y planeo hacer muy buen uso de ellos.Pronuncia con confianza en si mismo.Empieza a desnudarse lentamente sin apartar la mirada de la mía. Doy pequeños soplos de aire, cuando poco a poco se descubre tu piel y puedo v
—Por favor, entra.Da un soplo de sorpresa y se aleja apresuradamente de mí.—Gracias.Apenas puede hablar. Puedo notar la emoción en el tono de su voz. No sé por qué, pero algo me dice que esta experiencia es tan nueva para ella como para mí. ¿Es posible que ambos nos atreviéramos a dar un paso como este la misma noche y esa oportunidad nos haya hecho encontrarnos de esta manera? Sonrío ante ese pensamiento loco. ¿Cómo se me ocurre una idea así?Entro y voy tras ella. Sin apartar los ojos de su trasero redondo y boca arriba.—¿Quieres algo de beber?Me atengo a su espalda y le susurro muy cerca de su oreja.—Sí, por favor.Le beso el cuello, porque quiero sentir cómo le afecta mi tacto y, como lo asumí, la hago temblar.Me alejo de ella y camino al bar para ir a tomar unas copas. No me gusta lo que me está haciendo sentir, así que estoy buscando distancia, para calmar esta extraña ola de sensaciones que me está poniendo bastante nervioso.—¿Qué quieres beber?— Hay whisky, cerveza, vi
MaxwellYa he dado el primer paso para sacar a Juana de mi cabeza. Enganchar a una chica esta noche ha sido muy fácil. Nunca pensé que después de haber perdido la práctica, una vez que decidí hacerlo, no tuviera problemas para conseguirlo. Y juro por Dios que me he llevado a la mujer más hermosa del lugar.Hay algo en ello que me resulta familiar. Aun así, no puedo entender por qué siento que la conozco en algún lugar. Aunque lo pienso muy bien, ¿cómo podría olvidar un monumento así si lo hubiera conocido antes?Entramos en el aparcamiento del hotel. Puedo sentir su temblor mientras está pegada a mi espalda. Apago la motocicleta y antes de poder ayudarla a bajar, lo hace sola, con un poco de inestabilidad.Me quito el casco y lo guardo en el compartimento. Voy a ella para quitarle el suyo y luego lo guardo al lado del mío. No puedo evitar mirarla una y otra vez, es una mujer extraordinariamente hermosa. Sus ojos contrastan con su pelo y las pequeñas pecas regadas por su cara. Sus lab
ROSESalimos y con su mano incluso en la parte inferior de mi espalda, fuimos al aparcamiento. Me sorprende cuando nos detenemos frente a una motocicleta increíble y no puedo evitar dejar de sorprenderme imaginando cómo me subiré a ella con mi vestido corto, mis enormes tacones altos y rematar sin usar ropa interior. Me siento abandonada cuando me quita la mano de la cintura y el intenso frío golpea la zona donde hasta hace unos segundos sentía un calor intenso.—¿Es ahí donde iremos?Pregunto asombrada mientras señalo con el dedo a su motocicleta. Nunca imaginé que mi primer enganche sería con un vehículo motorizado. ¡Maldita sea! Qué sorpresa.—Obviamente, hermoso.Responde con un tono burlón, mientras lucho entre la idea de rechazar la propuesta y volver al club de nuevo.—¿Te has dado cuenta de la forma en que estoy vestida?Le pregunto con indignación y completamente molesta con su actitud despreocupada.—Por supuesto que lo he notado—, me desnuda con su mirada sin ninguna vergüe
UNOS MESES DESPUESAbro uno de los cajones de mi ropero y me alegra encontrar uno de los porta retratos donde Salimos Juana y yo, abrazándonos. Había olvidado que lo había dejado escondido allí. Recuerdo a la perfección que dos semanas más tarde y obligado por mis responsabilidades, tuve que volver a la oficina para finalizar los planes de un nuevo centro comercial que nuestra empresa estaba a punto de empezar a construir en el corazón de la ciudad.Mi sufrimiento en ese momento era evidente. Las terribles ojeras alrededor de mis ojos, la barba descuidada y mi mal genio, fueron una prueba más que evidente del terrible momento por el que estaba pasando. Aun así, estaba llena de coraje, uno que realmente no tenía y me obligué a continuar con mi vida normalmente... si esta forma de vida se puede llamar normal.Cuando llegué a la oficina, lo primero que vi fue la maldita foto en mi escritorio. En un impulso de furia, aniqué todo lo que había allí. Afortunadamente, soy el socio mayoritario
Enseguida estoy tentada a voltear y ver a quien le pertenece esa hermosa voz que hizo que mis pelos se erizaran como hace mucho no lo hacía. Sin embargo, mantengo mí porte, pero atenta a cada palabra que el desconocido chico pronuncia mientras se encuentra detrás de mí. —Como usted desee, Jack. Por cierto que bueno verlo de nuevo por acá. Bienvenido.—Gracias, Jared. Te aseguro que de ahora en adelante me vas a ver con más frecuencia por este lugar. Sigo escuchando su voz y no me lo creo, me tomo el trago de una sola vez y así tener la excusa para voltear y terminar con la inmensa intriga que me produce el querer saber a quién le pertenece esa excitante voz.—Jared, Sírveme otro trago por favor— pronunció con mi voz un poco temblorosa al igual que mi cuerpo mientras espero, puedo sentir la mirada de ese chico sobre mí. Me olvido de mi tonta timidez y al igual que lo hizo mi amiga, saco mis armas de seducción y saco toda la artillería pesada posible. —¿Perdiste a alguien igual que
Grethel, es la primera que decide entrar al baño, la sigo, pero con pasos lentos e inseguros. Toma las pruebas, antes de qué pueda darle alcance y confirme los resultados. Al final, es ella la que se atreve mientras yo sólo llevo mis manos a la boca. Empiezo escuchar gritos por todo el apartamento de mi amiga, mientras la observo estoy totalmente paralizada por el susto, cuando mi amiga corre con las pruebas en la mano como si se tratara de una bomba a punto de explotar.—¡Las tres han salido negativas!Creo que a lo largo de la vida que he llevado es la única palabra mágica y tan reconfortante que he podido escuchar. —Si quieres puedes comprobarlo tú misma, hay una sola raya en cada uno de las tres. Esto sin duda hay que celebrarlo. Al parecer no van haber engendros del mal en tu vientre. Es hora de vestirnos e irnos de rumba. Con toda curiosidad observo los tres palitos en cada una de las pruebas, reacciono emocionada por el resultado. Mi amiga tira las pruebas al aire y me da u
MES Y MEDIO DESPUÉS Observa el calendario y veo que es la última fecha en la cual vino mi menstruación fue hace mes y medio. ¡No puede ser posible!— inmediatamente mi corazón empieza palpitar rápidamente con aquella intensidad la cual podía sentir mi pecho oprimido— tengo demasiado tiempo de retraso, esto no me puede estar pasando a mí y menos en estos momentos.Empiezo a dar vueltas dentro de mi habitación, preocupada por el simple hecho que puede estar embarazada de James. Me niego rotundamente a creer que después de todo el engaño que me ha causado en mi vida, ahora estoy pasando por esta situación tan desesperada. Llevo mis manos a la cabeza tomando de mis cabellos, tengo tantos nervios que empiezo a comerme las uñas. Estoy tratando de pensar en las diversas soluciones a este problema, pero estoy tan confundida que mi cerebro se niega a recibir órdenes bastante lógicas.Cierro la puerta de mi apartamento y me dirijo al apartamento de Grethel. Últimamente no soy el ser más intelig