Valentina petrova Me sentía tan nerviosa. Hoy sería el día que compraría mi vestido de novia y después de mucho tiempo habíamos venido a la ciudad. Por más que hubiese crecido en este lugar no podía evitar sentirme diferente como si este no fuera mi mundo y quizás era así, quizás este no era mi mundo ahora pero no me molestaba venir de vez en cuando solo de visita. Ver que todo estuviera igual que antes que los humanos no supieran de nuestra existencia.— ¿ya tienes pensado lo que vas a comprar o cómo quieres verte?— preguntó Sara quién le había pedido que me acompañara, en estos meses nuestra relación se había hecho mucho más fuerte de lo que era antes.Y es que pasábamos bastante tiempo juntas viendo cómo hacer que la paz perdure lo más posible además era algo bueno para nuestros mundos el hecho de que la reina de los vampiros y la luna de los lobos pues sean amigas claro que ellos no sabían que éramos familia y habíamos decidido que lo mejor era guardar ese secreto entre nosotr
Valentina petrovaMe sentía tan nerviosa, no podía creer que al fin el día había llegado, sentía como cada parte de mi cuerpo temblaba, no dejaba de pensar en los peores escenarios aunque todo parecía ir perfectamente bien. Algo en mí me decía que te voy a cancelar la boda pero sabía que solamente eran mis nervios hablando, no quería cancelar esta boda quería casarme con él quería ser su esposa ante la ley humana.— Estás lista?— preguntó Sara mientras se traba la habitación en la que yo estaba. Respira profundo una vez más mientras me sentaba en una de las sillas que estaba en el lugar, ella frunció el ceño al verme de esa manera.— ¿Que sucede Vale?— Preguntó. Sara se acercó más a mí colocándose frente a mí tomó una de las sillas la trajo hasta ella y luego tomó asiento frente a mí— me digas que quieres cancelar la boda Negué rápidamente Claro que eso no era lo que yo quería, lo podría hacerle eso a él.— No, no, no podría— ¿Entonces que ocurre?— Preguntó Suspiré una vez más.—
Samuel Romanon 18 años Me acerqué hasta donde estaba Rubén.— Por favor déjame ayudarte — Le dije a Rubén quien cargaba una enorme caja, parecía pasarle mucho— No muchacho te aseguro que no hace falta — Me dijo a duras penas Cómo pude, le quité la caja, si bien pesaba no lo hacía tanto al menos para mí, pude ver como Rubén soltó un suspiro.— No tienes que pagarle nada Rubén si es eso lo que te preocupa— Le hice saber, sabía que Rubén trabajaba para lo gobernantes del pueblo pero estos le pagan muy poco, en mi opinión solo lo estaban usando pero Rubén estaba renuente a realizar algo más.Ambos comenzamos a caminar dirigiéndonos así hacia donde tenía que entrar esto.— Siempre me estás ayudando ¿No te gustaría trabajar conmigo?— Preguntó Trabaja con él?Eso significaría venir al castillo muchas veces.— No lo sé — Le dije.El castillo estaba algo retirado del pueblo y caminar diariamente para acá no parecía ser agradable.— vamos muchacho, serías de gran ayuda y hablaría con los r
Valentina Petrova — ¿Está todo listo?— escuché a mi madre preguntar con vo fuerte.Decidí no responder y simplemente quedarme entre el personal con la cara hacia abajo, no quería tener problemas hoy."Por favor Dios que no me vea" Rogaba en mi mente una y otra vez, para mi mala fortuna mi madre se acercó a mí y colocó sus manos en mi brazo moviéndome de forma brusca de dónde estaba.— Madre — Susurré con algo de miedo.— ¡¿Acaso nadie oye?!— Preguntó entre gritos muy cerca de mí — ¿Está todo listo?!— Volvió a preguntar mirándome fijamente, mi cuerpo se estremeció pero trata de mantenerme tranquilaSi no lo hacía me iría pero.— Si madre— Susurré sin mirarla— está todo listo como usted lo ordenó Ella me soltó y se alejó un poco de mí.— Súbete y vístete, cambia esa cara — La oí decir subí lo más rápido que pude las escaleras sin correr no quería escuchar más gritos viniendo hacia mí.— Largo ustedes también — Le dijo al personal.Entré al pequeño ático en el que estaban mis pertenenci
Valentina Petrova Abrí los ojos y lo primero que vi fue un techo color blanco me senté y detalle aquel lugar parecía ser una recámara una antigua.¿En dónde estaba?!Me levanté y me acerqué a la ventana, había un enorme bosque, pero también habían casas más pequeñas y personas caminando por el lugar¿Cómo había llegado aquí?parecía ser medio día ¿había dormido toda la noche y parte del día? pero como... y ahi recordé lo último que viví antes de desmayarme.Los lobos peleando.La sangre.Nicolás.Otro hombre El pinchazo en el brazo.Ellos me habían traído hasta aquí!!¿Que eran ellos?Mire mi brazo solo para asegurarme si lo que había visto era real, ahí tenía la herida que me lo confirmaba, mi brazo estaba vendado, no pude evitar quitar la venda había tres enormes marcas.El lobo que me quería hacer daño.Oh Dios ¿A dónde me habían traído?Mire mis manos estaban rasposas y tenían algunas heridas pequeñas.Comencé a caminar de un lado para otro asustada, pensando en las razón por la
Valentina Petrova Abrí las ventanasRespiré profundo.No puedo creer que fuera hacer esta locura, me daban miedo las alturas, pero no iba a quedarme aquí, en un pueblo lleno de Lycan y con un hombre que dice que yo soy su destinada y todo eso.Me rehúso.Yo me iré a la cuidad, viviré una vida sumamente feliz sola sin que nadie me diga que hacer.Mire hacia abajo y sentí que vomitaria en cualquier momento, esto estaba muy alto."Vamos Valentina tu puedes" me di ánimo a mi misma.Pasé la ventana pisando así el techo de abajo, el espacio era bastante reducido, si pisaba mal podria caer, caminé con cuidado y por la orilla tratando de tomarme de los muros para evitar caerme, miraba solo hacia el frente, mis manos comenzaban a doler al igual que me brazo herido"Yo puedo, no me voy a caer" Esto había sido una muy mala idea.Me detuve un segundo para ver por dónde bajaría, a unos metros había una enredadera y lo que podría usar como una escalera.Solo eran unos metros más adelante, sentía
Nicolás Harrison ¿Cómo era posible?¿Una humana?!¿Eso es lo que la Diosa Luna había enviando para mí y para mí especie?¿Cómo haría que ellos aceptarán ser dirigidos por ella?!Intentar salir por la ventana ¿A quien se le ocurriría eso?! Es una maldita humana débil, si hubiese caído de ahí hubiese muerto y yo me quedaría solo, nadie mas que ella va a poder llenar ese vacío.Una carcajada me saco de mis pensamientos.Vi a mi beta en mi sofá riendo.Lo miré mal lo que hizo que volviera a ponerse serio y se acomodara un poco incómodo.— ¿Que diablos te parece gracias Enrique?! — grité furioso.— Vamos, es ingeniosa, primero escapa de sus padres para no saber de ti y después intenta escapar de aquí ¡Por la ventana!— no estaba tan seguro de lo primero. Algo me decía que ella tenía planificado eso hace rato, tenía un bolso con ropa y aquella ropa no parecía ser de una niña de sociedad como ella tampoco la cantidad de dinero que tenía metida en ese bolso. Solo quería escapar habían sido
Valentina Petrova.Me había tomado el tiempo de elegir lo que me podría y como me vería, habían traído el almuerzo para mí mientras me arreglaba supongo que Nicolás no quería que bajara.Al inicio pensé en colocarme el vestido más feo pero luego me di cuenta que no tenía porque seguir vistiendo así, yo ya no vivía con ellos, no tenía por qué pensar así, ellos no podían pegarme más ¿O si? No, claro que no.Escuché la puerta abrirse y ahí estaba Nicolás, vestía un traje negro sin corbata viéndose algo casual pero a la vez formal, yo por otro lado había tomado un vestido rojo que acentuará mi figura.Sus ojos recorrieron mi cuerpo y luego se volvió a soltar y mis ojos azules.— ¿estás lista? — Pregunto serio, asentí.— Vamos que el camino es largo.Ninguno de los dos dijo nada mientras bajábamos a las escaleras y al salir de casa y subirnos a la camioneta color negro él iba de chofer y yo de copiloto. Mientras salíamos del pueblo no pude evitar divisarlo un poco, se veía colorido a pesar