Esta… era una oportunidad una en un millón. Y Alicia sabía que debía aprovecharla, sobre todo cuando Cristian siempre se había mostrado abierto a ella con sus intenciones, y la forma en que la miraba ahora era similar a cuando la comía con sus ojos en la universidad.

Inclinó su cabeza ligeramente mientras los dedos de él recorrieron la vena del costado. Contuvo un estremecimiento, no se sentía para nada igual a los toques que le daba Vincet.

-Vincet no me ha dejado hablar mucho con mi madre, siempre está vigilante, incluso le dijo que le daría dinero, unos cuantos millones.

-Lo sé. Me enteré justo después de su llamada. Pero no te preocupes, pronto todo se solucionará- la mano de él se desplazó hacia la nuca de ella y la apretó tirando de ella hacia adelante haciendo que quedara contra su cuerpo- Sabes lo que siempre me ha gustado de ti… lo inocente que eres-

Cristian se inclinó y le dejó en beso en la mejilla, Alicia cerró los ojos y apretó sus puños a cada lado de su cuerpo. Debía s