Alicia realmente se avergonzaba de tener una madre como la suya. Antes no le había importado mucho. Cuando vives constantemente en un mismo ambiente y es lo que ves todos los días pues… no te afecta, pero ella había tenido la oportunidad de ver más allá de ese escaso horizonte para saber que su realidad no era normal. Su madre… no era normal.Y de algo podía decir que estaba segura.Ella no haría pasar por todo ese sufrimiento a los hijos que tuviese. No sabía qué futuro le esperara. No sabía si viviría toda su vida junto a Vincet, que le encantaría, pero el destino siempre era impredecible, aun así, el día que tuviese hijos lo haría en un ambiente saludable y feliz para ellos. Los hijos no debían pagar la culpa de los padres.Con esos pensamientos en la cabeza sonrió levemente, conteniendo la marea de emociones en su interior.-Hablaré con Vincet para que te haga una transferencia. No creo que se niegue, porque sabes que a él no le gustan mucho las visitas en su casa, y menos sino so
Lo próximo que supo Alicia fue que su cuerpo fue alzado por los brazos de Cristian y llevada hacia el interior de una camioneta, o eso fue lo que pudo definir abriendo ligeramente el ojo antes de que la puerta se cerrara. La habían dejado en la parte de atrás y tanto Cristian como su madre se habían sentado delante y encendieron el vehículo.Ahora es que comenzaba todo. Volvió a cerrar los ojos pretendiendo estar aún drogada en caso que ellos miraran hacia atrás y notaran que no su plan no se había cumplido del todo. No deseaba que la atraparan y todo lo que habían hecho hasta el momento se echara a perder, eso sin contar que la pondría en mucho peligro.Respiró profundo e intentó calmar las aceleradas pulsaciones de su corazón, así como el temblor en ella. Debía confiar en que estaría bien y a salvo, que Vincet no le fallaría. Y que él estaba en esos momentos sumamente preocupado por ella.Y así era. Vincet casi se estaba comiendo las uñas en lo que venía la pantalla del auto donde e
Juliana no sabía cuánto tiempo había estado en aquella habitación con solo una simple y pequeña ventaba tan alta que no podía alcanzar ni siquiera subiéndose en la única cama rústica de la zona. Tampoco creía que esta soportara su peso.Decir que no tenía miedo era mentirse. Sus manos no habían parado de temblar en todo ese tiempo. Estaba realmente aterrada porque no sabía qué pasaría con ella o donde estaba, o a dónde sería llevada. Al menos de algo estaba segura, no le harían daño, después de todo Cristian era de esos hombres que le gustaba las cosas perfectas, sin golpes, ni cicatrices, y prueba de ello era como la habían dejado en aquella habitación sin amarrar, algo que sería lógico siendo un rehén.Pero Cristian detestaba las marcas de correas. Y a ella se le hacían muy fácil. Las pocas veces que habían usado correas durante el sexo él se había puesto como fiera después tras notar las marcas y ni la había tocado por asco.Ah, ya no sabía porque vez se preguntaba por qué había est
Vincet apretó el celular en su mano y tuvo que respirar para no romperlo en el proceso. Aun cuando había pensado que estaba preparado para aquello, se equivocaba completamente. Necesitaba que Alicia ya estuviese con él, sana y salva.Descolgó el celular sabiendo que cada segundo era crucial, y lo puso en altavoz para que Lukas escuchara la conversación, y a eso había que añadirle que el grabador de conversación estaba activado. Podían tener a un policía de contrincante, pero tenían a favor que seguro no sabían que estaban al tanto de todo y que Alicia, más que una rehén, era el cebo.-Hola, quién es- comenzaba el teatro.-No necesitas saber mi identidad- del otro lado se escuchó la voz distorsionada de forma digital. Un truco viejo de los secuestradores. Solo que ya se sabía quiénes eran así que el factor sorpresa estaba descartado. Aun así le siguieron el juego- Revisa el correo que te llegó.Al momento le entró en la bandeja precisamente un correo y en este aparecían dos fotos. Amba
Detrás de Maryo entró Cristian jadeando y sudando.-Esto no estaba en el plan- le gritó al otro hombre debido a todos los movimientos que estaban ocurriendo afuera.Alicia pudo ver como su padrastro fulminaba con la mirada a Cristian antes de enfocarse en ella otra vez. Su mano apretaba su brazo, tanto, que seguramente le dejaría marcas.-No es momento de discutir ahora, agarra a esa mujer. Debemos salir de aquí- le lanzó unas esposas para que sujetaras las muñecas de Juliana- Tú ni te atrevas a chistar y sígueme, metió la mano en el bolsillo de su cacheta y sacó una pistola apuntando a su hijastra- Sabes de lo que soy capaz.Alicia podía decirle muchas cosas en ese momento, mas no abrió la boca. Primero porque tenía miedo, y era normal si una pistola cargada te amenazaba, y en segundo lugar porque alterarlo podía hacer que estuviesen en mucho más peligro. Ella tenía el GPS, así que no importaba a donde fueran serían encontradas. Solo esperaba que completas y vivas.En eso los ojos de
Dolía… dolía mucho.Solo podía pensar en eso y nada más. El dolor se extendía desde su hombro y se extendía por el resto de su cuerpo dejándolo sin aliento. No podía moverse, se sentía tan débil. Solo quería cerrar los ojos y…-Resiste Vincet. No me dejes- una voz familiar.En medio de su nebulosa, había una chica junto a él, lloraba, lloraba mucho. Tenía manchas de sangre en sus mejillas, sus manos también estaban llenas de sangre, y su mirada… estaba enfocada en él.-Ali… cia- el nombre de ella salió casi en un gemido lastimero que lo hizo agonizar de olor.-Estoy aquí Vincet- la chica, que tenía la cabeza del Ceo sobre sus muslos, mientras se movían rápidamente en dirección al hospital, temblaba sin consuelo.Juliana miraba desde el asiento delantero preocupada por el estado del hombre, mientras Lukas se enfocaba en no chocar. La vida de Vincet estaba en peligro. El disparo había sorprendido a todos y la bala había atravesado el hombro de Vincet rompiendo vasos importantes. No pare
Sus ojos se fueron abriendo poco a poco. Había dolor, por suerte, no tan fuerte como antes. El techo sobre él no lo reconoció al inicio, era incómodamente blanco. ¿Dónde estaba?Sus recuerdos estaban desordenados y confundidos.Vincet hizo un gruñido de incomodidad e intentó levantarse para darse cuenta que apenas podía, el dolor en su brazo lo hizo gemir. Miró a un lado y encontró donde estaban los sueros que alimentaban su cuerpo con las agujas en su brazo. La sábana de color azul particular, y aunque aquella fuera una habitación VIP no había dudas que aquello era un hospital.Ah, ya recordaba. Lo habían baleado. Maldición, cuántos días habían pasado.En eso escuchó un sonido del otro lado y miró girando su cabeza haciendo crujir sus vértebras, pero en vez de prestarle atención a esa incomodidad, ver el rostro de Alicia que se iba despertando fue un alivio enorme para él.La chica estaba sentada en una silla a su lado y había recostado sus brazos y cabeza en el borde, se notaba incó
Alicia ayudó a Vincet a caminar hacia el baño él pasando su brazo por sobre los hombros de ella. Aunque la herida de bala no era tan severa y en el brazo había perdido bastante sangre y sentía algunos mareos. Aun así él intentaba no recostar todo su peso sobre ella, después de todo Alicia era mucho más pequeña y delgada que él.Tras llegar allí lo ayudó a sentarse en el murito de la ducha y lo sintió soltar un largo suspiro.-¿Te duele?- Alicia preguntó preocupada pues el rostro de él estaba un poco pálida.Vincet estiró la mano y le acarició la cadera tirando de ella hacia él y recostó su cabeza contra el vientre plano de ella.-Te lo dije, estoy bien. Soy mucho más resistente de lo que parece- le dio un beso sobre la zona y alzó la cabeza enlazando la mirada con la de ella.La vio asentir, pero la preocupación aún estaba en su rostro, unido con un sonrojo marcado y tierno que a él le encantaba.-¿Te bañaras conmigo?- le preguntó pero en su tono le decía que quería que lo hiciera.-V