Como que Lukas había entendido muy bien que Juliana se había tomado en serio castigarlo, porque estar moviéndose encima de él de forma tan suave, después de haberse corrido y no dejado recuperar era una total tortura. La cadera de ella sobre él, su sexo húmedo y descubierto se movía de adelante hacia atrás sobre su pene, pero sin meterlo, aunque lo tentaba introduciendo su glande ligeramente en su interior para después sacarlo con un sonido húmedo.-Cachorrita- la voz de él salió quebrada.Las venas de sus brazos estaban marcadas intentando tirar de las esposas que impedían que sus manos fueran hacia adelante, atrapadas en su espalda. Se sentía frustrado. Quería agarrar la cadera de ella y meterse en su interior hasta tocar fondo. Seguramente se correría de nuevo por lo placentero que sería, pero Juliana pensaba diferente.Las manos de ella se pasaban sobre su vientre duro y su pecho arañando la piel sensible y húmeda que se estaba tornando rosada con el paso de los minutos.-Si hubie
Había que ser realmente valiente para llamar desde la entrada a las 12 de la noche cuando él había tenido uno de los días más agitados de su vida. Vincet Regal chasqueó la lengua y restregó su rostro en la almohada. El sonido del teléfono de la entrada al edificio no paraba de insistir y eso era solo señal que quien fuera que estuviera abajo no se iría.-Maldición- murmuró aún sin abrir los ojos y agarró su celular que lo tenía anclado al teléfono.Lentamente alzó sus párpados mirando el número para confirmar que fuera ese y descolgó en altavoz.-Más vale que sea algo urgente porque no estoy de humor- después de casi 72 horas sin dormir debido a un viaje de trabajo y más de tres contratos cerrados lo menos que deseaba era que alguien perturbara su tranquilidad.-Perdón señor Regal, pero dos mujeres lo están buscando aquí abajo. Una de ellas insiste en que es una buena amiga de usted, pero su nombre no está dentro de los contactos que usted ha dejado aquí abajo- respondió el custodio d
Vincet se apretaba el entrecejo buscando la mayor paciencia que pudiera haber en su ser. Su cabeza martilleaba poniéndolo de más mal humor del que estaba antes y para colmo tenía que soportar toda aquella situación.-En serio Liliana, tiene mucho descaro que después de 20 años vengas a pedirme en la cara que cuide a tu hija así sin más. Acaso ella no es mayor de edad- el hombre no podía creer lo que ella le había pedido antes.La chica sentada al lado de su madre aún tenía la cabeza gacha y en ningún momento había dejado ver claramente su rostro, su cuerpo se notaba tenso y nervioso. Vincet chasqueó la lengua ante la reacción de ella totalmente diferente a la que estaba acostumbrado y más por la forma en que estaba vestido. Normalmente las mujeres solían comérselo con los ojos como por ejemplo ahora mismo la madre de ella.-Por favor Vincet no seas tan trágico. Solo son 20 años- Liliana le quitaba interés al asunto como si aquello fuera lo más natural.-¿Trágico?- él soltó un bufido d
Definitivamente el hombre era mucho más intimidante en la vida real que en la foto. Los ojos de él parecían que podrían atravesarla por la intensidad que la mirada y ella solo podría apretar las manos en su regazo.¿Qué madre loca dejaba a una joven en casa de un tipo que no había visto en 20 años por muy ex que fuera?Pues la suya.Muchas veces había pensado que su madre tenía más de un tornillo suelo, no ella como todo el tiempo Liliana le decía. Sin embargo, con el paso de los años se había dado cuenta que no había una sola cosa que hiciera su madre en vano. Quitando todo aquello, Alicia prefirió estar en aquel penhouse con un total desconocido que en su casa con su madre y su padrastro.Vincet al ver que ella no respondía frunció el ceño y la soltó. Se dejó caer de nuevo en el butacón y recostó su rostro en su mano, sin dejarla de enfocar. Tenía un sueño brutal, pero era lo suficientemente adulto para saber que no podía dejarla dormir sin decirle al menos algunas cosas.La recorri
Vincet se encontró en medio de una encrucijada. Desayunar de aquella forma, con la comida caliente, casera y con un olor delicioso, hacía mucho tiempo que no lo hacía. Estaba más habituado a los desayunos de hotel o solo de café en la mañana por lo que la sensación fue gratificante. No era un hombre tan fácil de sorprender, pero en este momento…Como cuando la frase un hombre se conquista por el estómago se hacía válida.Razón por la que se enfocó más en comer que hablar con la chica, hasta que notó que ella…-¿Por qué no comes?- le pregunté él tomando un sorbo de café.-¿Puedo?- la pregunta de ella lo desconcertó.-¿Por qué no podrías?- frunció el entrecejo- Si está servido es por una razón.-Gracias- el agradecimiento por parte de ella lo alteró aún más.-¿Qué? Acaso tu casa era como el servicio militar en donde tienes que pedir permiso hasta para ir al baño- se burló él con el comentario que no tenía ningún trasfondo. No se esperó que ella no respondiera, más bien, los hombros de e
Vincet alzó la mirada de los documentos que estaba revisando y casi quiso patear al hombre que estaba manejando en el asiento de adelante.-Realmente te estás buscando que te despida. Acaba de desaparecer esa sonrisa de burla que tienes en tu rostro- le gruñó.Lukas por su parte solo pudo reírse más. Lo había hecho desde esa mañana y solo se había contenido cuando alguna otra persona estaba presente. Pero por el contrario había disfrutado mucho hacerlo.-Es que realmente tienes que ver tu cara Vincet, lo que te hicieron realmente parece sacado de una novela barata de romance- el secretario giró el timón tomando una curva- y no puedes despedirme, soy tu mejor amigo y ambos nos sabemos hasta lo más oscuro de nuestras almas.El hombre de atrás chasqueó la lengua.-Es que en serio, como permites que te manipule así una ex que apenas estuvo pocos meses contigo en una media relación, y que venga ahora a engancharte para que cuides a su hija. Mínimo te follaste a la chica ayer, porque me ima
Vincet se sintió realmente estúpido o ese fue el sentimiento que tuvo al ser visto tanto por su secretario como por el custodio al simplemente haber olvidado que la chica vivía ahora con él. Tampoco era que fuera fácil acostumbrarse, incluso el mismo Lukas estaba sorprendido que su amigo dejara a una mujer vivir con él cuando apenas las dejaba quedarse cuando tenían sexo y a la mañana siguiente ya las estaba botando de su propiedad.El Ceo terminó los trámites, le pidió el celular a Alicia y después de verificar que ella pudiera acceder desde el lobby del hotel, que su huella estuviera registrada en la cerradura del apartamento y que tuviera su número para localizarlo y viceversa, se sintió un poco… menos imbécil.Había dejado a la chica todas esas horas, literal, botada en la calle. No sabía por qué, pero tenía su pecho apretado, lo peor es que no había recibido algún reclamo como tal, que él usaría de excusa replicarle, pero no, ella estaba simplemente parada en la sala como si no s
-¿Y bien? ¿Qué opinión tienes?- Vincet dejó que la brisa de la noche echara su cabello hacia atrás. Ambos se habían desplazado al balcón mientras Alicia cocinaba la cena. El ceo recostaba su cuerpo contra el barandal de espaldas mientras Lukas se había parado a su lado, al contrario. -Cuando mencioné que esa chica era interesante no fue en vano- este sonrió- Le hice muchas preguntas para intentar analizarla, mis estudios en psicología la menos me sirven para esto. -¿Y a qué conclusión llegaste? ¿Es una amenaza? ¿Tengo que sacarla de la casa? El rostro de Lukas era todo un dilema. -La verdad es que… lo primero que me dijiste de ella es que tenía retraso mental, pero me gustaría saber un poco más de ello, porque no encontré ningún síntoma de ello- vio como el ceño de Vincet se frunció. -¿A qué te refieres? Lukas apretó la boca y bajó el tono de voz. -Creo que ella es muy introvertida, pero por la forma en que reaccionaba a ciertas preguntas, es como si… algo dentro de su cabeza l