48| A tu lado.

Adrián llegó a casa gracias a alguien del esquema de seguridad de Vital. Le pareció curioso que Francisco se hubiese marchado con Ismael. No había notado ninguna interacción importante entre los dos prácticamente desde el primer momento. Así que cuando llegó a casa, se encontró con su sobrino. El niño estaba esperando con el balón al policía.

— ¿Dónde está Francisco? — preguntó el niño.

Adrián le despeinó el cabello con ternura.

— Recuerda que no debes esforzarte, la cirugía aún sigue reciente.

El niño se encogió de hombros. Todas las tardes jugaba con el policía. Básicamente el hombre le tiraba la pelota y él la devolvía, tratando de que el niño hiciera el menor esfuerzo posible, pero debía moverse. Eso había dicho Francisco: si no se movía, la recuperación sería más lenta.

— Si quieres, puedes jugar conmigo.

La sonrisa del niño se iluminó.

— ¿Harías eso por mí?

— Claro que sí.

Adrián pasó el resto de la tarde hasta que cayó la noche en el patio con el niño. Aún no podía correr
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo