Amelia.
Me siento un poco ofendida por las palabras de Fenrick pero tampoco puedo decirle nada al respecto ya que podría tomarlo a mal. -la verdad le agradezco que haga esto por mi, cuando estoy cerca de ti el dolor disminuye pero al tocar tu mando desaparece durante algunas horas y hoy el dolor era insoportable. Me sorprende que Fenrick tenga que soportar esto todos los días y me ase feliz saber que puedo ayudar a una persona tan importante para el imperio, Fenrick me regresa con Isabela que esta furiosa por haberme llevado de su lado después de calmarla proseguimos en calma y solas con nuestra tarde, al llegar a mi casa me voy a mi habitación donde me pregunto si no habla alguna manera de aumentan el efecto calmante, me mira la mano y tal ves si usamos algún otro tipo de contacto pueda servir pero no quiero experimentar con el contacto físico, me doy la vuelta en la cama y espanto esos pensamientos de mi mente por que si aun lo pudiera lograr no deseo acerco, tomo de nuevo la barita mágica y la admiro durante unos minutos, ya han pasado dos semanas desde que lo ayudo con las migrañas no hemos tenido ningún progreso y a pesar de hemos pasado mucho tiempo solos Fenrick se sigue portando de la misma manera y me alegra tener la varita como muestra de nuestro trato, las puertas de mi habitación son abiertas por Luis tomándome por sorpresa. -¿ que esta asiendo Amelia ? -¿ que ocurre Luis ? Me siento en la cama con sorpresa y escondo la barita detrás de mi espalda, Luis me mira con una sonrisa malvada. -¿ que ocultas hermana ? -no es nada. -no recuerdo que mi madre halla traído nada como eso ¿ de donde lo sacaste ? Intento pensar en una mentira rápida pero Luis es más veloz que yo y sale de mi habitación para regresar con mi madrastra que se acerca a mi y mira la barita con asombro, miro como su rostro se convierte en uno de indignación. -no puedo creer que mi propia hija me oculte cosas. -no se moleste madre solo quería mantenerlo en secreto. Mi madrastra me mira desconcertada por mi respuesta se muy bien que ella piensa que una hija no debe de ocultarle cosas a su madre que le dio un buen hogar, mi madrastra se molesta y me señala con el dedo. -como puedes ser tan degradadecida, siempre te esta negando a presentarnos a la familia Wide. Guardo silencio ya que en este estado esta mujer no me escuchar aunque le diga los mejores argumentos no es algo nuevo de ella y lo único que quiere escuchar son disculpas de mi parte así que lo hago. -lo siento mucho madre pero la familia ducal pero te aseguramos que la próxima ves que los vea les preguntaré. Mi madre suspira y se sujeta la frente con una mano con preocupación. -veo que eres una niña sensata y espero qué para la próxima nos podamos reunió con la familia Wide. Mi madrastra se da la media vuelta y sale de mi habitación desconcertando a Luis que pensaba que me iban a castigar por mantener la vara en secreto, al quedarme sola en la habitación doy un suspiro de alivió, se sienta tan mal tener que callarme lo que verdaderamente pienso pero si se los dijo solo empeorará las cosas, dejos mis pensamientos de lado y me acerco a él nuevo objeto que me dio Fenrick y que doy gracias qué nade lo noto que es una bola de cristal de esas que usan los magos para comunicarse entre ello y los aristocratas de más alto nivel, es de color azul muy claro pero no se como usarla coloco la mano sobre ella. -duque Fenrick. Me sorprendo mucho al escuchar su voz salir de esfera. -Amelia esta sola o esta Isabela contigo. -no estoy en mi casa. Presiento que por estado de su voz no esta bien pero me da miedo encontrarme con él en ese estado no se que locuras lo haga cometer las migrañas. -señorita Amelia ¿ quiere ir a comer conmigo a un restaurante ? Me sorprende la propuesta del duque y desearía decirle que no pero si lo hago qué seriedad tengo de que no me oblige o me haga aparecer allí, a los pocos minutos mi carruaje llega a la residencia de la familia Wide y en la puerta me encuentro a Isabela que me mira sorprendida ya que no le dije que vendría. -lo siento Isabela por venir sin avisar ni sita previa solo que me sito aquí el duque Fenrick. -no te preocupes ya se como es mi primo y si te molesta con algo dime y lo convertiré en sapo. Le doy una sonrisa a Isabel por su tentadora oferta pero no deseo que le haga ningún daño, entro a la habitación donde me espera Fenrick que al verme me extiende la mano. -esta mañana he tenido una de las pesadillas más molesta que he tenido en mi vida. No puedo creer que me allá llamado por una pesadilla pero a quién quiero engañar no tenia deseos de estar en mi casa, le tomo la mano y el preciosa la mía con fuerza.Fenrick.Me recuesto en el sillón mirando el techo disfrutando de la calma que me trae la presencia de Amelia que esta leyendo un libro a mi lado en completó silencio, tal ves tome su mando de nuevo antes de irme pero me da vergüenza que Isabela me mire fijamente cuando lo hago como si no tuviera nada que hacer en otro lado de la casa, escucho su conversación sin decirle nada y solo veo de reojo a Amelia como le sonríe a Isabela, todavía no comprendo como logra curar mis migrañas, me pregunto que pasara por su mente cuando me toma de la mano ya que puedo ver en sus ojos un poco de miedo pero no retrocede ante mi.Amelia.Al atardecer me dirijo a mi casa pero al llegar me encuentro a mis padres adoptivos esperándome en el recibidor, mi madre se ve molesta cruzada de brazos detrás de mi padrastro que se ve molesto.-hija me han dicho que el mago de la torre te a dado un presente y deseo verlo.Veo que mi madrastra me a delatado pero no tengo de otra más que obedecer, voy a mi habitación
Amelia. Esta mañana al abrir uno de mis cajones me doy cuenta que mi varita no se encuentra en el lugar donde la deje el día anterior, me dirijo a las sirvientas que se encargan de la limpieza para saber que alguna la movió de lugar pero todas niegan y dicen que no la han visto, doy un suspiro cansada ydejo que se retiran, una de ella se me acerca con un poco de preocupación en la mirada. -disculpe señorita pero mire cuando su madre la tomo y se la llevo de la habitación. Me apresuró y voy asía el comedor donde abro las puerta de par en par, miro a mis padrastro muy tranquilos desayunando, mi madrastra me voltea a ver con seriedad y frialdad. -¿ que ocurre Amelia ? ¿ por que el escándalo ? Mi madrastra me habla con calma y totao frialdad, intento calmarme para poder hablar con claridad y calma y no perder la compostura frente a mis padrastros. -¿ madre donde esta mi varita ?Mi madrastra ve a mi padrastro para después verme con una sonrisa calmada-la tome anoche y la vendimos.
Amelia. No se que este planeando Fenrick o que le pase por la mete pero sus palabras asen que la actitud de mis padrastros cambie totalmente a una más amable y cordial. -hay Amelia disculpanos por no avernos dado cuenta antes. -te pedimos las más sinceras disculpas. Al verlos no veo ni un solo rastro de sinceridad en sus ojos y ya estoy harta de esto. -si vendieran sus cosas no podrían no podrían pagar el valor de esta varita y por eso su acto se podría considerar un robo y lo sé lo informaré a las autoridades. El rostro de mis padrastros esta lleno de asombro, gracias al duque por fin pude hacerles frente a mis padrastros que se indignan. -pero Amelia como nos puedes hacer esto a tus padres que te cuidamos durante tanto tiempo con cariño. Sigue diciendo esa mentira a pesar de que ellos saben como me trataron, doy un suspiro y les doy una sonrisa fingida. -que esperaban de un extraño. Las autoridades correspondientes llegan muy rápido supongo por que fue Fenrick quien los l
Amelia. Me pregunto de donde se conocerán y pensándolo bien el príncipe ya esta en edad de buscar una novia y Mónica al igual que Isabela son unas muy buenas candidatas. -¿ Amelia como me miro esta noche ? La vos de Isabela me saca de mis pensamientos y la veo con una dulce sonrisa. -te ves realmente hermosa. -¿ estas segura ? -claro que si. -en ese caso por que nadie me se acerca y solo hablar con mi hermano. Antes de que responda se nos acerca la señorita Mónica con una dulce sonrisa junto con su madre que ase las presentaciones debidas, hago un leve reverencia por que ellas son condesas. -es un placer conocerla condesa Mónica. -me siento avergonzada con usted ya que noto mi mirada asía su acompañante. -no le tiene miedo al duque Fenrick condesa. -en verdad es un hombre muy guapo y no me era posible quitarle la mirada de encima aunque aquí en el baile hay muchos hombres de igual belleza. -debes de tener cuidado con ese ladrones ya que todos son monstruos por dentro y m
Fenrick. Esta mañana Isabela entro muy temprano a mi habitación a estar berreando.-eres una desgracia para la familia.-no entiendo por que estas tan molesta conmigo.-debes de estar jugando.-no y no entiendo por que me gritas.-eres un mentiroso de primera Fenrick.No se por que diablos tiene que estar tan temprano gritando es mi habitación que no podía espera a la hora del desayuno, Amelia se asoma por la puerta de segura atraída por los gritos de Isabela, no soy estúpido y recuerdo claramente lo que paso la noche anterior y la vergüenza que me da por haberle dicho esas palabras y más por que todos me escucharon, me levanto de mi asiento.-Isabela por favor ya detente como ya te dije no recuerdo nada de anoche.Me acerco a Amelia para disculparme pero las palabras no me salen de la boca mi dignidad me ase callar pero por que mi corazón late con tanta fuerza al verla.-buenos días duque Fenrick.No le puedo responder y solo paso a un lado de ella sin decirle nada, será mejor que n
Amelia. Doy gracias por ya no estar en ese salón, el príncipe es guapo pero me siento un poco incomoda al estar a su lado por que no lo conozco bien y debo de tener la mejor etiqueta frente a él en cambio con Fenrick me puede relajar un poco por el tiempo que hemos pasado juntos, al pasear por los jardines del palacio en la compañía de Fenrick me duele admitir que extrañaba su compañía sería y reservada. -¿ disculpé duque Fenrick ya no tiene migrañas ? -como dije antes estado muy ocupado. -cuando entre al salón el dolor se calmo un poco. -ya veo, recuerde que puede ir a la mansión de la familia Wide cuando guste y le puedo ayudar con eso y si gusta solo podemos tomarnos la mano como si nos saludaremos. Le extiendo la mano a Fenrick y él la toma simulando un saludo de mano formal. -señorita Amelia si gusta puede ir a mi torre a visitarme cuando lo deseé, estoy llevando un experimento interesante y si gusta puedes ver. El rostro de Fenrick se vuelve en una mueca de felic
Amelia. Me siento tan frustrada por la actitud de Fenrick y me molesta más que a él no le importa en lo más mínimo, al llegar a la mansión de la familia Wide me encuentro a Isabela en el jardín trasero donde le dejo el pastel en el mesa. -¿ por que regresaste tan temprano ya que ibas a comprar una casa y por que regresaste con mi primo ? -nos encontramos por casualidad. -Isabela, la señorita Amelia se encontró con un agente inmobiliaria y me encargo de que no fuera engañada por ningún hombre aprovechado. Si claro maldito egocéntrico me arruinaste el trató si no fuer por tu culpa estaría mirando mi futuro hogar. -además la iba adquirir sin tu conocimiento. -ya lo sabía. -entonces soy en único que no tenia conocimiento de este hecho. -al parecer primo. Siento sobre mi la mirada molesta de Fenrick que me ase ver asía otro lado. -pensé que eramos amigos. -lo somos, disculpame por no decírtelo antes. Me molesta que este maldito siga fingiendo que no hizo nada malo y tiene el
Amelia. Estoy recostada en mi cama mirando el techo de mi habitación y me pregunto como Fenrick se dio cuenta de que intento mantener mis sentimientos bajo control todo el tiempo aunque con el no los puedo mantener cubiertos tal ves sea parte de sus investigaciones o algo así, es la hora del desayuno y la duquesa me mira con una sonrisa dulce.-señorita Amelia quisiera hacer una recepción en tu honor.-a mi me gustaría mucho la idea madre, haré la lista de invitados y organizare todo, lo haré tan magnífica que todos tendran envidia si me lo permites.-claro.Después del desayuno vamos Isabela y yo a uno de los salones que tiene vista a los jardines para comenzar la lista de invitados.-no sé quien pueda venir así que invitare a todos, no deseo que el lugar está vacío.-si abra demasiadas personas quisiera escoger solo a las que estas interesadas en verme.-tal ves rechacen la invitación. Isabela frunce el ceño y me sorprende su falta de seguridad de que los invitados acepten la invi