Marcos, un millonario decepcionado del Amor del círculo de sus amistades, de su familia, decide alejarse por un tiempo de todos aquellos que lo rodean, incluso de su hija de ocho años, donde no lo conozcan, ni sepan quien es, antes de alejarse deja toda su empresa en orden, en manos de su mejor amigo, Santiago un contador muy brillante. Cambia su identidad, el color de pelo, su forma de vestir, toma una vieja moto, sale a la ruta y se pierde en la inmensidad del paisaje sin saber que, al detenerse, va a tener q enfrentar un destino diferente. Encontrará el amor por el cual va a tener que enfrentar su verdad, y esa verdad puede significar la pérdida de la mujer que ama. Al enfrentar su realidad, su vida y su verdad, posiblemente pierda el amor de la mujer que ama (Lisa), a la que va a tener que volver a reconquistar, además de rescatarla de las intrigas de su familia que intentaran quitarla del medio usando todos los medios, incluso la muerte. Una novela donde los atrapara el romance, las intrigas, la lucha moral de los personajes y el poder.
Leer másAntonella bajo con rapidez las escaleras del dormitorio y espero a Marcos abajo mientras tomaba una bebida fuerte, para poder enfrentar el momento. Aquello no iba a estar muy bien que se dijera, sabía que su esposo se iba a negar y la que tendría que pagar el pacto seria ella.Vuelo 627 desde Nueva York está por aterrizar” anunció la joven por el alto parlante, además de que Amelia ya se habían fijado en las pantallas, estaba nerviosa. Se acerco al lugar por donde llegan los pasajeros. A la media hora vio salir a Delfina y a todo su grupo por el corredor y corrieron hacía ella. Delfina vio de lejos a su madre y corrió, necesitaba de su madre, necesitaba abrazarla, besarla, apretarla. Necesitaba de su madre como nunca lo había hecho en su vida, se encontraron y se abrazaron y se fundieron en un abrazo.- ¡Mama! -- ¡Delfina! -El grupo las observaba sorprendido el amor que había entre madre e hija. Delfina lloraba, su mama pensaba que su llanto era por la emoción del momento.
Antonella debía de solucionar su situación con su padre lo más rápido posible antes que su padre o su hermano enviaran aquel video que la comprometía a Marcos. Maldición se dijo, tengo qe hablar con Marcos lo más pronto posible e ir a la casa de mis padres para que estos puedan hablar de sus las fechorías que quieren hacer. Hablaría con él esa misma noche aprontaría una cena romántica ara hacerlo olvidar un poco el alejamiento de Delfina y lo convencería para r a almorzar los dos a lo de su padre. A su suegra no le convenía llevarla debido a que le podía abrir los ojos a Marcos por lo menos le pondría en alerta. Pensando en eso tomó su auto y se fue a recorrer escuelas privadas que enseñaran diseño. Delfina despertó y cuando lo hizo eran las siete de la mañana el desayuno se serviría a partir de las ocho de la mañana y a las diez iban a ir a probar los instrumentos al lugar donde ban a tocar. Seguía con el estómago revuelto, volvió a tomar el medicamento y se sintió mejor.
Lisa sabía que eso era un sueño lejano, muy lejano, salir de allí, sólo lo haría cuando no sirviera más para el trabajo si no moría antes. Las noches, el trato con los hombres, el cansancio haría estragos en su cuerpo y envejecería antes de tiempo. Todavía era joven, pero eso no duraría para siempre, y cada día venían chicas más jóvenes y ellas tenían que estar a punto, pero era difícil competir con la juventud. Lanzo lo lo que quedaba del cigarro y se fue adentro, Montserrat seguia en silencio, ella la miro y dijo-Vamos – la chica se levantó y fueron adentro. Antonella hizo caso omiso al pedido de su padre ni siquiera mostró interés, ese día a la noche habló con Marcos.- ¿Mañana se va tu hermana? --Así es – respondió Marcos sin mirarla, acto seguido preguntó- ¿Irás acompañarla? --No quiere – hubo un silencio y añadió – pero de cualquier forma iré a despedirme de ella en el aeropuerto - Antonella se puso molesta y alude- ¿Porque te rebajas? -Marcos la miró perplejo y ex
Delfina se movió inquieta, camino despacio hasta la puerta y se detuvo frente a ella con su mano derecha acarició la madera de esta como si fuera tuviera tocando el cuerpo de su hermano; que esperaba ansioso la respuesta de la chica desde el otro lado. Marcos la presentía a través de la puerta de roble era como que estuvieran conectados, volvió a llamar- ¡Delfina soy yo, Marcos! ¡Debemos hablar hermanita antes de que te vayas! - ella se deslizó por la puerta y lloró suavemente con el rostro entre las manos, Marcos la escuchó y lo invadió un gran sentimiento de tristeza al saber que su hermana estaba sufriendo por su culpa. Se preguntó como dejó que sucediera eso. El amor nos torna egoístas y no sabemos separar la línea entre el amor de filial y el de otras relaciones. No insistió, Delfina secó sus lágrimas para que no quedaran rastros de que estuvo llorando, Marcos decidió retirarse de allí, no era bienvenido; cuando iba a bajar las escaleras Delfina se abrió y ella apareció det
Delfina soñaba con Nueva York, con la filarmónica internacional, se sentía cansada y con mucho sueño, pero como el médico ya le había dicho que tenía que recuperarse, dormir y comer bien; se lo adjudicaba todo a esa situación. Ese día mientras arreglaba sus maletas para su viaje, Antonella almorzaba con una amiga en uno de los restaurantes más caros de la ciudad, en ese momento le decía a Thiesa, su amiga.-Marcos se encuentra enojado por lo de la noche del show de esfumados – señaló mientras miraba con la vista perdida en el ambiente repleto de personas cuyas voces se confundían, luego añade – pero se le va a pasar -- ¿Y su hermana? - Antonella volteó rápido la vista hacía su amiga y un dejo de desprecio se apoderó del rostro de la joven quien exclama- ¡Está preparando su viaje a New York! -- ¿A New York? - preguntó asombrada Thiesa y al instante - ¿Y a qué va a New York? - Antonella tardó en responder, después de dar un sorbo a su vino y saborearlo, mira a su amiga-Se va co
Luego de terminar de hacerlo, le pide al chico que la deje en el mismo lugar que la levantó, el joven sonriente sólo expresó- ¡Será un placer! - y se puso en marcha, estaba ebria, y se durmió en el trayecto; sus amigas, que eran amigas de verdad todavía andaban revoleteando por allá.- ¿Qué hacemos? -preguntó Brigitte- ¡La esperamos, o su esposo la mata! -- ¡Bien como tú digas! ¡Cabeza hueca! - dijo la otra con rabia. Un auto seguía de cerca al joven hasta que lo interceptó, el chico asustado se detuvo n, Antonella ni se enteró, dormía.- ¡Baja! - ordenaron los enmascarados, el chico bajó asustado.- ¡No hice nada, ella está bien! - uno de ellos se acercó y le sacó una foto con su celular y luego habló- ¡Nadie debe saber que tuviste sexo con esta chica, si sabemos que dijiste lo mínimo, iremos por tí y no tendremos piedad! ¿Me entendiste? -- ¡Sí, sí! - decía el chico a borde de colapsar- ¡Vete y déjala en el lugar de donde salieron! -El joven asintió, encendió el m
Esfumados llegaría pronto a la ciudad, faltaban dos días, los chicos y los no tan chicos estaban eufóricos con la llegada del grupo.Marcos pregunta a su madre- ¿Delfina va a ir a ver Esfumados? -- ¡No tiene ánimos! -- ¿Cuándo viene el médico? -- ¡Hoy por la tarde! -- ¡Bien mantenme al tanto! - su madre le dio que sí y se despidieron, Marcos estaba preocupado por la salud Delfina, sí le quedaba tiempo iría a ver a ese chico Santino. Justo sonó su teléfono, era Paul- ¡Señor Mendieta! -- ¿Cómo está Paul? --Bien ¿puedo pasar por la tarde por su oficina? -- ¡Por supuesto! -- ¡Bien, estaré a las tres por su oficina, buenos días! -Marcos quedó pensativo, que tendría que decirle Marcos que le pedía para verlo, alguna información tendría, bueno luego lo sabre se dijo. ¡Está un poco baja de peso! - y dirigiéndose a Delfina - ¡Has rebajado cinco kilos Delfina, demasiado para tu edad y estatura, es por eso que te sientes agotada, además trabajas mucho, ú cerebro gasta una gra
- ¿Has intentado hablar con Santino? -- ¡No, desde ese día no lo he visto más! -- ¿Y tú hermano qué dice? -- ¡Tampoco he hablado con él? - Camila la observó, Delfina era su mejor amiga, se conocían desde pequeñas. Por eso deseaba lo mejor para ella, sabía que estaba sufriendo, se había enamorado de Santino y Santino de ella. Santino era un mujeriego, era cierto, pero también era verdad que desde que salía con Delfina nunca lo vieron con otra chica.- ¡Deberías hablar con ellos, si no hablas jamás sabrás su posición, a estas aturas quizás vean las cosas de otra manera! - decía Camila mientras bebía su café. Para ese entonces Delfina había comenzado a llorar silenciosamente, como lloran los fuertes de corazón, como esas lluvias de primavera que comienzan a caer lentamente hasta convertirse en un chaparón.¡Es que ya no puedo con este dolor! ¿me entiendes Camila? - dijo entre estertores de llanto en su garganta.- ¡Lo sé, amiga, lo sé, puedo entender lo qué estás sufriendo? - dijo
En la habitación Delfina, sentía que la cabeza le estallaba y se lo hace saber a su madre - ¡Me duele la cabeza madre! - - ¡Te traeré un analgésico! - Delfina sabía que no había analgésicos para el alma, pero nada dijo, su madre volvió al rato, estaba muy deprimida, y su madre muy preocupada. - ¡Trata de descansar! - y la tapo, se quedó con ella tomándole la mano mientras Delfina sucumbió al sueño. Amelia bajo y fue directo adonde se encontraba Marcos, entró he hizo la pregunta - ¿Qué fue eso Marcos, ¿cómo fue eso de que fuiste a ver a ese chico para decirle que se aleje de tu hermana? - Marcos sabía que había actuado mal, así que no le quedó de otra que reconocer su falta frente a su madre. - ¡Lo siento madre, es verdad fui a ver al chico Santino para que dejara a Delfina en paz! - meditó un minuto - ¡Pero has visto como se puso, estaba fuera de sí, parecía una loca! - dio una vuelta por la habitación y prosiguió - ¡no es un comportamiento adecuado para una joven a la que hemos