Capítulo 35- Felicidades, Alfa

El Alfa lleva un rato recostado en la misma cama que yo, abrazándome por la espalda con fuerza negándose a soltarme. Acaricia mis brazos que ya no tienen más señales de mis uñas.

— ¿Qué fue lo que soñaste? —Pregunta apoyando su barbilla por detrás de mi cuello, su voz suena calmada casi como un susurro.

—No lo recuerdo.

Él me abraza con más fuerza y me hunde su cabeza como si solo así pudiera sentirse más tranquilo.

—Si vuelves a arañarte así no usaré mi lengua para curarte y los fluidos serán de otra parte de mi cuerpo.

¿Qué parte?

—Si no quieres que lo haga no te hagas más daño.

¿Quedó claro?

—Sí, Alfa.

El alba comienza a asomarse mientras hablamos como si fuéramos cercanos. Yo tampoco quisiera que me deje sola, aún no puedo quitarme la impresión de mi cuerpo arañado. Además, tengo la sensación de que hay algo más allá de ese sueño, como si fuera una clave importante.

—Bien, hoy tengo asuntos pendientes que hacer. Quédate en casa de la manada y no hagas nada que pueda ponerte en peligro.

—Sí, Alfa.

—Ery.

— ¿Eh?

—Llámame por mi nombre, somos esposos.

—...Intentaré hacerlo.

—Bien, hoy no podré verte pero le avisé a Hershey que te haga compañía hoy— Me mira como si no quisiera irse—No olvides comer adecuadamente, si te saltas una comida te alimentaré de boca a boca como los pájaros de los nidos.

¡Qué grotesco suena eso!

—De acuerdo, prometo que voy a alimentar mi cuerpo sanamente… Ery.

El Alfa suelta el pomo de la puerta y regresa hacia donde estoy sentada, me abraza con fuerza, luego pega su frente con la mía.

—Repítelo otra vez.

Su voz suena agitada y su corazón late con la misma intensidad que el mío.

——Voy a alimentarme...

—Lo que sigue después —Trago saliva y mi respiración también se agita.

—Ery.

—Otra vez.

—Ery.

—Otra vez...

Su respiración se calienta y su forma de susurrar en mi oído es bestial y primitiva.

Su mano recorre mi muslo y me besa el cuello pidiendo constantemente que le llame de nuevo por su nombre. Hasta que está encima de mi sosteniendo mis manos de lado a lado entrelazando cada dedo mío con los suyos.

—Otra vez, Cady.

—Ery…

Creo que va a besarme sin embargo no lo hace y solo besa mi cuello, respira en mi oído de una manera sensual y ardiente.

CLANK

La puerta se abre de par en par.

—Oh, mi Alfa... Perdone, como me dijo que no iba a estar hoy...

Ery gruñe bajo como si estuviera molesto por la interrupción y me libera las manos.

—Te voy a enseñar a tocar la puerta un día de estos.

Dice a regañadientes pasando de largo a Hershey. Antes de salir se para un momento y voltea a verme con los ojos negros como canicas.

—No olvides lo que te advertí, Luna.

Y sale como si nada.

— ¿Qué te advirtió el Alfa, Cady?—Pregunta Hershey con una sonrisa picarona.

—Dijo que... Si no me alimento bien el me hará comer de boca a boca como hacen los pajaritos.

—Tienes bien hechizado a nuestro Alfa.

— ¿No te suena asqueroso eso?

—Si vieras todo lo que hago con mi esposo te me desmayas, Cady Cad.

— ¿Entonces es normal regurgitar para alimentar al otro? —Digo arqueando la ceja.

—No, nos comemos el vómito del otro si eso querías entender... De boca a boca significa pasarlo así entero mientras te pega unos besos de esos que te acabas empapando ahí abajo.

'¡Quiero uno de esos, Diosa!'

—¡Cady, te has puesto de un tono rojizo! No me digas que lo estás imaginando ¿Mm?

— ¡Claro que no!

—No tienes que sentirte avergonzada, son pareja y son esposos. Además, escuché que la noche que se entrelazaron sus vínculos rompió la cama con gran pasión.

Me pregunto quién inició ese rumor tan vergonzoso...

—La verdad es que... —Le susurro en el oído y Hershey arquea la ceja.

— ¡¿Qué?! ¡¿Sigues siendo virgen?!

Me cubro la cara y asiento en silencio.

— ¿Tú, en manos de un Alfa activo como él y sigues siendo...?

—Por favor no lo repitas, Sherezarah—Digo sin levantar la cara de mi mano.

— ¿Qué sarna ha hecho ese Alfa tonto que aún no le muestra a mi mejor amiga los grandes placeres de la vida?

—Soy yo quien le pidió que espere a que me sienta preparada.

— ¿Prepararte para qué?

—Es de 22cm y me va a doler—Contesto hundiéndome más entre mis manos.

—Es del mismo tamaño que mi esposo, no te preocupes—Dice golpeando mi hombro como si fuera una conversación de lo más casual— Si entra. Soy la prueba de que puede caber más de 20cm y sigo viva.

—Sherezarah... Ya basta... —Digo cada vez con la cara más caliente deseando poder hundirme más entre mis manos y desaparecer.

—Además creo que no estás consciente de que entre más lo haces esperar, más deseo acumulará hasta que no pueda hacer uso de su autocontrol y ahí sí va a doler, Cady. Un Alfa como él no es tan paciente.

Eso ya lo sé... Pensé que sería como mi protagonista original reservado y con poco deseo sexual hasta la mitad del libro, cada que puede me abraza y me restriega su miembro duro y largo.

Desde hace una semana que hicimos una promesa de dejar malos hábitos, él de fumar y yo de estar a la defensiva e insultarlo. Dormimos en la misma habitación y él eligió quedarse en el sofá para dejarme libre la cama. En ese tiempo ha cumplido con no fumar, sin embargo, como le he quitado su mayor placer en la vida, a veces le da por quererse quitar las ganas pegado a mí de formas nada respetuosas aunque se porta delicado y se detiene cuando le pido que lo haga.

También, ha estado de mejor humor últimamente así que no abusa de su autoridad ni se desquita con sus guerreros durante los entrenamientos.

—Bien, mientras esté de buen humor todos en la manada estaremos tranquilos sin demasiado trabajo arriba de nosotros.

<< ¡DING, DING!  ¡NUEVO EVENTO DESBLOQUEADO!>>

<<Misión especial: Celebra el cumpleaños del Alfa.  Recompensa: Pista de un Precepto>>

Unas letras, como en una computadora, aparecen en el aire. Hershey no puede verlas.

También desde que hicimos aquella promesa mutua, la voz de las misiones ha estado molestando todos los días con misiones, no le bastó con desbloquearme el filtro de maldiciones en eventos sexuales sino que me ha estado poniendo misiones extrañas. De todas formas no me sirve de mucho las pistas sin el libro.

<<DING, DING! Al celebrar el cumpleaños del Alfa también recibirás un mapa de área>>

Eso sí me sirve...

Veo el calendario y descubro que es 12 de Mayo. El mismo día del cumpleaños de mi ex jefe, también al ser vaga y basarme en él para él protagonista le di la misma fecha de nacimiento.

—Hershey ¿aquí como celebran los cumpleaños?

—Con un pastel y lo partimos como cualquier otra manada.

—Bien. Entonces vamos a preparar un pastel.

—Espera... ¿Qué piensas hacer?

—Vamos a celebrar el cumpleaños del Alfa, ¿Qué más?

—Espera ¿Hoy es 12 de Mayo...?

—Si, por qué lo...

— ¡Mierda!

— ¿A dónde vas, Hershey?

—Hagas lo que hagas no salgas ni busques al Alfa. No lo mires a los ojos, no le hables, nada, hoy no existe.

— ¿Por qué no exist--?

¡BAM! Hershey se ha ido y no entiendo por qué reacciona así.

Abro la ventana del balcón y veo correr a todos. Qué extraños son.

Bien, entonces iré a preparar el pastel.

—Señora Bertha ¿En dónde guardan el azúcar?

—Mi Luna ¿qué hace en la cocina? Si necesita que prepare algo puede pedirlo.

—En realidad no es para mí, es un pastel para el Alfa---

¡CLANK!

Se le cae la bandeja de las manos.

— ¡¿Hoy es 12 de Mayo?!

Observa el calendario en la cocina y alerta a todos de salir cuánto antes.

— ¡Luna, no puede quedarse aquí! ¡Venga con nosotros, lo mejor es quedarse fuera del camino del Alfa hoy!

¿Por qué todos actúan así en su cumpleaños?

Ah... Ahora que lo recuerdo, mi jefe me hizo celebrar su cumpleaños la vez pasada, aunque la vela tenía forma de pregunta supe que cumplía 30 años...

Ese día me hizo ser su asistente otra vez, la razón, me vomité sobre su automóvil llamado Ben. Se supone que trabajaría tres meses, sin embargo solo me hizo acompañarlo un día entero siguiendo la agenda y me llevó al cementerio...

No me digas que...

— ¿Qué hace, Luna?

—Voy a preparar un pastel de cumpleaños--

— ¡NO!

— ¿Por qué no? ¿Acaso les desagrada tanto el Alfa como para evitar hacerle una fiesta de cumpleaños?

—Luna, haga lo que haga no lo felicite, no se cruce en el camino del Alfa, no lo mire a los ojos y sobre todo no se acerque. Hoy no existe.

Es casi lo mismo que dijo Hershey.

—Luna, el 12 de mayo y el día de las madres son un día demasiado delicado para él Alfa.

—El Alfa fue un cachorro demasiado poderoso desde el vientre de su madre y... Consumió a su madre por completo. Así que el día de su nacimiento es el mismo día en que nuestra anterior Luna falleció.

No hemos tenido una Luna desde entonces hasta que llegó la pareja destinada del Alfa.

M****a, sistema troll, sabe que es imposible celebrar un cumpleaños con esas condiciones, sin embargo no dejaré que me derrote.

— ¿Qué hace?

—Voy a preparar un pastel.

—Luna ¿No escuchó lo que dije? El Alfa ve este día como un día maldito y todos tenemos prohibido---

—Sí, lo escuché.

Ahora con más razón estoy segura de lo que tengo que hacer.

La señora Bertha se negó a participar en mi plan así como todos alrededor, incluso se fueron a hacerse locos afuera de la casa de la manada para no hacer enfadar al Alfa. Es como esa historia de la bestia verde que detestaba la navidad solo que odiando su propio cumpleaños.

Ya que nadie me va ayudar tendré que improvisar algo.

***

Si Ery es como mi ex jefe entonces solo hay un lugar donde tiene que estar en este momento.

'—Hershey.'

'—Sí, Luna Cady Cad?'

'— ¿En dónde está el cementerio?'

'—Luna, incluso si el Alfa te estima y eres la única a la que no trata el día de hoy como si fuera una piedra en el camino, hay límites para su paciencia '

'—Solo dime en dónde está’

Justo entrando por un pasadizo de laberinto, en el jardín de la casa de la manada y cerca del invernadero hay una pequeña tumba.

[Gudrun Shätzchen]

Ery se encuentra dejando flores de Dalias sobre esta. Se le ve más serio que nunca.

"Una hermosa flor que al dar su fruto se marchitó"

— ¿Qué haces aquí?

— ¿Quieres saber lo que dice en el epitafio de la mía?

—Dudo mucho que pueda ser peor que este

—"Camelia Dawson: Fuerte ante los golpes de la vida más no a los que le dio su esposo"

— ¿En serio dice eso?

—Parece que al que trabaja ahí le mola hacer esa clase de mensajes. Aunque dudo que fuera por Schadenfreude.

— ¿Schadenfreude?

—Significa alegría por la desgracia ajena.

—Oh, entiendo. Nunca había escuchado esa palabra antes.

Acomodo un ramo de flores que improvisé y lo dejo sobre la tumba de Gudrun/Galia

—Gudrun Shätzchen, es un gusto conocerte— Tomo la mano de Ery quien aprieta fuertemente—Soy la esposa de Ery.

— ¿No te han dicho los demás que me pongo de mal humor si se acercan a mí este día?

—Hmmm si, lo dijeron. Pero me da igual. Si quieres pegarme te advierto que puedo pegar fuerte en defensa.

Antes de que me gruña o se ponga de mal humor me lanzo hacia su pecho y acurruco mi cabeza debajo de su barbilla.

—No sé lo que es nacer el mismo día que muere tu madre, sin embargo sé lo que es perder una.

El Alfa no dice nada, dejo que tenga un momento tranquilo sin soltar su mano.

Después de un rato, en cuanto veo que el sol comienza a ocultarse, me dirijo a la madre de Ery.

—Prometo que la visitaremos más seguido. Tomaré prestado a su hijo el resto del día, Luna.

Ery me mira incrédulo, tendremos nuestras diferencias y si, es un cretino. Sin embargo soy delicada con el tema de las madres y me gana la empatía cuando veo a alguien pasarlo mal.

Es como un niño pequeño, hace berrinches y explota contra otros para aliviar su dolor. Lo supe cuando vi el epitafio de Galia y de Gudrun. Su madre fue muy amada, demasiado. Su pérdida fue demasiado dolorosa para todos y él lo ha estado resintiendo toda su vida.

Lo llevo hasta la casa de la manada y nuevamente lo hago sentarse en la cocina.

Esta vez he preparado algo especial.

No sé preparar pasteles pero si puedo hacer panqueques los cuales tuve que endulzar con miel al no haber azúcar, así que quedaron húmedos, al menos logré que parezca uno con los pocos ingredientes que encontré.

Su sorpresa al ver el “pastel” no tiene precio.

—Felicidades por nacer, Alfa.

— ¿Qué has dicho? —Aprieta el puño evitando verme—Cady, no quiero molestarme contigo así que será mejor si---

—Dije felicidades por nacer. Incluso si no quieres agradecer los 21 años que has vivido, yo le agradeceré a tu madre por darte vida.

—Eso no es lo que dice su epitafio—Dice a regañadientes cerrando el puño.

— ¡Al demonio lo que diga un epitafio, esas no son las palabras de tu madre!

Finalmente me ha volteado a ver.

No hay cerillos pero Chiara me ha dicho que haremos algo especial.

Mi dedo enciende un pequeño fuego y este queda encima de unas ramas improvisadas. No son velas pero el poder de lobo de fuego lo mantiene sin consumir la madera. Es fuego mágico.

—El Alfa es una mala semilla solo cuando es un cretino, abusivo con su manada y que hace a todos huir un día entero porque no quieren encontrarse al Alfa y que este los estampe contra una pared. Eso es la mala semilla que puede probar ser, Pero el Alfa no es una mala semilla.

Sus ojos se abren de par en par. Debe estar sorprendido porque he estado practicando usar mis poderes en secreto.

—Además, la vida es algo muy precioso. Incluso si fue bajo una tragedia. Vivir es algo maravilloso, tu madre te entregó el regalo más grande de todos cuando naciste. Eso es la vida, Alfa.

Ery no dice nada, solo observa atentamente al fuego y el pastel tan bonito que he hecho. Porque no estoy segura si su sabor será agradable, al menos visualmente sé que me he lucido.

—Es un regalo temporal y no puede ser eterno así que un día habrá que devolvero, pero, solo está en quien lo recibe usar esa preciosa bendición y hacer germinar el fruto en algo asombroso antes de que eso suceda.

Alfa, Ery, en lugar de despreciar el regalo de tu madre deberías tomarlo y abrazarlo. Es lo que ella seguro desea para ti.

Le digo por enlace mental.

—Cady...

Aplaudo 21 veces, por cada pausa digo “bienvenido a la vida Ery Avery de un año, bienvenido Ery de 2 años… bienvenido hasta los 21 años”

—Mi madre murió y fue de una manera injusta. Yo también, más de una vez. Y la segunda desperdicié mi vida viviendo de una manera que me arrepentí cuando caí hasta el fondo de la miseria.

Sarah dijo que en el hospital me declararon muerta esa vez. Sin embargo tuve la oportunidad de vivir, sin embargo no lo supe aprovechar y viví como un muerto en vida. Sin poder ser del todo feliz.

—Ery, no desprecies una vida. Un año más en que puedes ser mejor persona y dejar tu propia semilla para que te recuerden por todo lo bueno que hayas hecho.

— ¿Y puedo sembrar esa semilla contigo?

Me es imposible responder, no solo estoy aquí de forma temporal. Pero es imposible explicarle algo así al protagonista de mi historia…

—No, claro que no puedes…

Sus ojos se vuelven rojos como rubíes.

— Ya sé que te irás un día, Cadence.

Esta vez la sorprendida soy yo. Creo haberle escuchado mal…

—No escuchaste mal, Cadence.

‘Parece que el Alfa tonto es más listo de lo que creíste’

Ery saca de su pecho un libro con una portada de flores que pone en la mesa y me mira firmemente.

—Desde que te vi en el festival de la cosecha supe que Candace Var Sansa había cambiado por completo de personalidad. Pero no fue hasta que vi tus ojos color ámbar que comencé a sospechar que no eras quien todos parecen creer— Se acerca a pasos firmes a mí con un semblante decidido y serio— Eso es porque eres otra persona.

Sus pasos se sincronizan con los latidos de mi corazón.

— ¿No es así, Cad Ence?

Maika Maese

¡Ya salió el gato de la bolsa! El Alfa tonto resultó ser más astuto ¿Qué mas secretos oculta? Al abrir de nuevo el telón del escenario, la luz del reflector está en Ery Avery quien ya no puede esperar más para revelar su secreto.

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