"Lo único que este hombre quiere es sentir que tiene poder y control total sobre mí" Pensó Tatianna con cautela. "Ese tipo de retorcido control… Tal como lo hacía Alexei"Tras ese último pensamiento, una sonrisita curvó los labios de esa hermosa mujer rusa. —¡Haz un contrato conmigo! —sugirió Tatianna clavando con seguridad su mirada azul claro en él. —¿Contrato?, pff~ —hizo Vladimir un sonido de burla—, no tienes NADA que necesite. —¿Seguro? —preguntó ella con total tranquilidad que lo hizo dudar—. Puedes tomar TODO de mí, seré tu posesión, tu juguete, tu prisionera, yo hablaré todo lo que sé actualmente de la organización y te ayudaré en tus planes~ será como los viejos tiempos, cuando eras mi protector y yo tu fiel aprendis~ —¿Me crees estúpido?, eso es demasiado bueno para ser verdad y tú no eres una perra nada dócil. —Por eso es un trato. Eso tendrás tú de mí, a cambio me ayudarás a destruir a Alexei Kéldysh, él es mi objetivo. Si lo logramos con éxito puedes quedarte la o
Minutos más tarde. ¡Tatianna Lavrov no podía creer lo que estaba sucediendo! Ella se encontraba en el jardín trasero de la mansión junto a Vladimir, ambos uno al lado del otro, posando de mala gana para ese fotógrafo que ese hombre rubio llevó. —¡No, no está bien, no está nada bien! — decía el fotógrafo molesto—. Se ven incómodos, tensos, lucen distantes y se ve muy forzado, ¡quiero chispa, química, amor!, que parezca que son lo más importante para el otro.Explicaba el hombre seriamente acercándose a ellos y pidiéndoles que se peguen más al lado del otro. De modo que Tatianna y Vladimir quedaron en un abrazo bastante íntimo. —¡Vamos bien!, ¡ahora quiero que se vean a los ojos con amor! —pidió el fotógrafo.—Hazlo bien, no quiero seguir aquí contigo, desgraciada —dijo Vladimir con un tono frío de voz. —¿Y crees que yo sí contigo?, tampoco lo hacías bien antes, imbécil. Vladimir en ese momento, movió sus manos a la cintura de Tatianna y acercó su rostro a centímetros del de ella
—¡¡HIJA DE PERRA!! —gritó Mikhail furioso e intentó romper la revista en sus manos. "¡Lo sabía!""¡Realmente me has traicionado con Vladimir aún sabiendo que es mi enemigo!" "¿Lo hiciste por ese hecho en particular?, ¡parece que quieres ser destruida junto a ese desgraciado!" Pensó el hombre de cabello oscuro perfectamente peinado hacia atrás, furioso. Solo segundos después el poderoso hombre líder de esa peligrosa organización hizo lanzada la revista sobre su escritorio. —¡Tendré que hacer una reunión! —exclamó Mikhail de mala gana volviendo a ver a su subordinado—. Avisa a los altos cargos, dentro de dos días a más tardar los quiero a todos reunidos. —¿Reunión con los altos cargos? ¿Se va a presentar en persona, jefe? —preguntó el hombre curioso, ya que hasta ahora, Mikhail había estado en las sombras de la organización digiriendo con ayuda de Tatianna que era su cara pública. Sin embargo, nadie sabía que ese hombre era el anterior miembro apodado A.K. Un peligroso ex milita
—No sabía que Vladimir ya tenía mujer e hijo. Si ese es el caso, ¿por qué me obligó a casarme con él? —preguntó Tatianna a la mucama, quien simplemente la ignoró al recibir una llamada telefónica. La mujer seguidamente pidió a Tatianna Lavrov ir a la planta baja, a la sala principal. Tatianna aún lastimada de su tobillo izquierdo se dirigió allá cojeando y apoyándose en las paredes. ……Una vez que Tatianna llegó a la sala principal de esa mansión. —Escuché que te has herido un tobillo al intentar huir —comentó Vladimir que dirigió su mirada afilada a esa mujer de cabello castaño ondulado. —¡Lo hice intentando irme de esta prisión! ¡Porque necesito volver a la capital! —exclamó ella viendo retadora a ese hombre rubio que vestía de tonalidades negras. Él, que estaba sentado sobre un sofá individual se levantó y se acercó hacia esa audaz mujer de su pasado. Vladimir agarró a Tatianna del brazo con fuerza acercándola hacia él con gran rapidez. —¡Ay, desgraciado! ¡Ten más cuidado qu
—¡JA! ¡Ahora tiene sentido por que muchos de nuestros negocios fracasaban!, ¿tuviste algo que ver? —preguntó Tatianna sin obtener respuestas—. Hay un rumor de que había un nuevo grupo criminal apoyado por un poderoso CEO de una empresa… No me digas que ese maldito, ¿eres tú?—Te llevaré a la capital —comentó él haciendo caso omiso a lo que esa belleza de mujer castaña le decía o preguntaba. —¿Me dejarás ver a mi informante? —preguntó Tatianna expectante. —Tienes que darme información de la organización y su manejo actual. Quiero todos los detalles sin excepciones. —¡Lo haré con una justa condición! —dijo ella exigente. —¿Cuál? —preguntó él expectante. —¡¡¡No puedes volverme a encerrar en una maldita mansión, en medio de la nada, como una rata enjaulada!!!Vladimir dejó escapar una sonrisa que curvó atractivamente sus labios mostrando sus hoyuelos. —Es cierto que el término "rata" encaja contigo~ —se burló él de Tatianna. La mujer alzó una ceja viendo a ese hombre que fumaba tra
••••••••••Esa misma noche: —Pensé que ibas a traer a tu novia la enfermera con nosotros —comentó casualmente Tatianna, que iba en el asiento copiloto del automóvil de Vladimir. Los hermosos ojos azules claros de esa mujer se posaron en el hombre que iba conduciendo. Simplemente no podía asimilar la idea de que estaba casada con ese peligroso rubio. Veía el perfil altivo y serio de su ahora esposo, ese mismo que la ignoraba y apenas respondía algo de lo que ella preguntara. Tatianna exhaló, dándose por vencida a entablar una conversación. Sus ojos se posaron ahora en el anillo que llevaba puesto en su dedo anular izquierdo. "Se siente incómodo…" "Todo esto es demasiado molesto… Lo odio"Pensó ella para seguidamente ver de reojo hacia el sillón trasero del vehículo, donde iban dos guardaespaldas, unos que estaban ahí para vigilar a Tatianna. Al mínimo movimiento e intento de escape, ella sabía que partiría rumbo al más allá. Sin embargo, su cuerpo no se sentía en óptimas cond
…….Tres días más tarde. 2: 00 am. Un automóvil oscuro se detuvo frente a esa vieja fábrica abandonada, del vehículo un hombre de cabello rubio en corte militar, cuyos tatuajes sobresalían en su cuello, él bajó acomodándose su gabardina, esa fría madrugada. El hombre de veintinueve años comenzó a dirigirse al interior de esa fábrica mientras el viento fuerte y helado de esa noche otoñal se hacía presente. Él caminaba, los hombres armados que lo acompañaban seguían sus pasos, expectantes de los alrededores… Una vieja carretera cerca, en un sector distante a un pueblo rural, sin viviendas en los alrededores donde pudieran haber testigos molestando, nada más que árboles y las bodegas externas de esa vieja fábrica. Comenzó a escucharse el sonido de los otros automóviles, en el que viajaban las personas que acudirían a tal encuentro acordado. El hombre que llegó primero sacó uno de sus cigarrillos comenzando a fumar tranquilamente en el interior de esa fábrica abandonada. Sus ojos d
Una vez Tatianna tenía esa llave en su poder, corrió hacia donde estaba el vehículo oscuro. El sonido de unos motorizados se escuchó, unos que ingresaron al centro de ese piso bajo, en la fábrica abandonada. El humo ya se estaban disipando y uno de los motorizados dio un casco y sus llaves a Vladimir quien dejó tirada su gabardina y bufanda para seguidamente subir a la motocicleta. Tatianna que disparaba a algunos de los hombres que salieron ocultos por ese primer piso, corrió hasta Vladimir y subió con él. —¡¡Me dió una USB!! ¡¡Vámonos de aquí de inmediato!! —informó la mujer castaña que se aferró con su brazo izquierdo al dorso de su peligroso aliado, mientras que con su mano derecha seguía dando disparos hacia los enemigos que le iban saliendo. Ambos se alejaban de esa fábrica y varios kilómetros por la carretera observaron que venía un automóvil en sentido contrario. Vladimir detuvo la motocicleta así como el chófer del vehículo que bajó y caminó a pasos rápidos hacia ese h