[Rowan] Entro a ver a la abuela, está acostada me mira y sonríe, me siento en la silla de a su lado, tomando su mano. —¿Cómo estás? Disfrutas mucho siendo el centro de atención ¿no es así? —Sí, siempre lo he sido. —Lamentó decirte esto abuela, pero alguien más ya te ha robado la atención. Tengo que decirle, no quiero que pase lo peor y que no sepa, tiene que saberlo. —¿Quién se atrevió? —Es como de este tamaño —Le muestro con los dedos. —Apenas, escuchamos su corazón, no lo hemos visto aún, no sabemos si tendrá mis ojos, los tuyos o los de Romina, pero sin duda, te ha quitado el puesto. —No me digas que…¡Oh, Rowan! Esto es lo mejor que he escuchado en años. —Mira —Le sostengo la ecografía. —Te dije que era muy pequeño, ¿no te parece extraño? Serás bisabuela. —¿Estás feliz? —Sí, apenas ayer nos enteramos de su existencia y sin embargo ya es lo que más amo en el mundo. —Ojalá tenga tus ojos o los de tu abuelo, me alegra mucho por ti, mi vida, serás un e
La noticia que nos despierta es la peor de todas. Susan falleció durante la madrugada, Rowan abraza a su madre que no deja de llorar, Alex y Amanda se abrazan, Bea y Kyle se encargan de arreglar todo. El ambiente en triste, incluso el cielo está gris y sin sol, camino hasta Rown y Joanna, esta última me abraza con fuerza, me da dos besos en las mejillas. Mis padres y hermano también llegan, mi padre abraza a Rowan dándole palmadas en la espalda. —Lo siento mucho. —Mi madre dice dándole un beso y abrazo. —Muchas gracias por venir. —Joanna dice abrazando a mi padre. —En las malas y en las peores, ya lo sabes —Ahora es mi madre la que la abraza. Bea se nos acerca, saluda a todos con la mano, se lleva a Rowan a otro lado, me ofrecen café pero niego. —¿Ya no bebes café? —Mi padre me dice. —Eso es un insulto para nuestra familia. —Sí, aún bebo café solo que no se me antoja ahora. Aún no quiero que mis padres sepan que estoy embarazada y menos que se enteren así, pensa
Las semanas pasan, mi vientre a empezado a notarse, Rowan y yo estamos bien, no somos los mismo de antes, pero nuestra relación a empezado a establecerse, dormimos juntos y me acompaña a desayunar, quizá es por nuestro bebé, pero el volver a estar bien me hace demasiado feliz. —¿Te tomaste tus vitaminas? —Sí, no tienes que recordármelo cada hora. —Si tengo que hacerlo. —Tengo antojo de pizza, ¿tú no? —No —Mueve los dedos sobre la pantalla de su celular quedándose en silencio. —Ya la ordené, tu favorita. Sonrío. —Gracias, este bebé da muchos problemas —Doy suaves palmadas sobre mi vientre algo abultado. —Igual de molesto que su padre, pero no te preocupes mi cielo, yo te malcriaré. —Aún no nace y ya lo estás malcriando, pero el que sufre soy yo, esta es la cuarta vez que pinto esta pared. —No me gustaba el color de las otras veces, en cambio este azul es perfecto. —Lo que no sé es porque lo tengo que hacer yo mientras tú estás ahí sentada dándome órdenes. —Porque tú me e
Me termino de ponerme un vestido rojo intenso ceñido al cuerpo y con escote en V, el color del vestido resalta sobre mi piel morena clara, causando un contraste que me encanta, salgo de mi recámara y se los modelo a mis amigas, que están en el sofá, bebiendo y charlando. —¿Y qué opinan de este? —Me doy una vuelta. —Llévate ese, seguro que paras el tráfico. —Emily dice. —Sii, es perfecto —Hannah la apoya. —Pues yo creo que te queda mejor el negro, es más elegante y discreto, este es demasiado vulgar —Danna dice y mis demás amigas la ven mal. —No lo digo de mala manera, es solo que no creo que sea la ocasión de usarlo. Me miró en el espejo de cuerpo completo que tengo en la habitación, Danna tiene razón, es un vestido demasiado provocador y no es para nada el estilo de Aaron, vuelvo a ponerme el vestido negro y Emily tuerce los ojos. —Anda te ayudo a peinarte. —Hannah me dice, llevándome a la habitación. —Yo te pintaré las uñas, tú siéntate ahí y quédate quieta. —Emily s
Rowan Wayne, uno de los hombres más importantes del país, mi mejor amigo de la infancia, su familia y la mía tienen una relación de amistad de hace años, pero a pesar de eso, es la primera vez que lo veo en años. Sus ojos se clavan en los míos, me mira con fastidio, me doy cuenta de las palabras que acabo de pronunciar y de su peso, pero aún así no las retiro y le sostengo la mirada —¿Estás ebria o loca? – se burla. —¿Por qué me casaría contigo? —Porque tú necesitas una esposa, ¿o me vas a negar que estás en una competencia con Gabe por la herencia de tu abuela? —digo y me mira curioso. —Que ya no me lleve contigo no quiere decir que de vez en cuando no acompañe a nuestras madres a beber café o a desayunar, esa es solo una razón y tengo una buena lista de razones si esa no te parece suficiente. —No estoy interesado en casarme contigo, hasta donde sé eres la novia de Smith, ¿qué diría si supiera que estás aquí, haciéndome esa clase de propuesta? —Ya no estoy con él. Mi voz
Él y yo solíamos ser mejores amigos, fue mi único acompañante hasta que Danna llegó a mi vida, pero había algo en la manera en que Rowan actuaba, que me hacía sentir curiosidad hacia él, seguramente y conociéndolo él me veía como la molesta chiquilla que lo seguía a todas partes, durante la adolescencia nos distanciamos un poco, pero seguíamos juntándonos de vez en cuando o pasábamos las vacaciones juntos, él se ponía más guapo con los años, si la mitad del colegio estaban locas por Aaron, la ciudad entera estaban detrás de Rowan y él no se hacía el difícil, siempre ha tenido esa fama de mujeriego, nunca le di demasiada importancia, hasta aquel verano en Bali. —Te quiero a ti — dice suave, sus palabras me llevan a todos esos momentos juntos. No se bien que cara pongo, pero al verla empieza a reírse burlescamente. —Estoy jugando Lizzy, no te haré nada. —Bueno, si no es eso ¿qué quieres entonces? —Nada, ya te dije no estoy interesado en casarme, ni siquiera en broma, me gus
Nos traen el desayuno, Hannah se emocionó y ordenó de más, observó la variedad de frutas, pasteles, crepas, waffles, ordenó huevos, salchichas, tocino y una gran jarra de jugo de naranja. Rowan sale de la habitación observa todo esto y nos mira mal, lleva puesto un traje negro hecho a la medida y una camisa gris, sin corbata. —Piensan darle de comer a todo el hotel ¿o qué? —Exageras, esto es para nosotras, el desayuno es lo más importante, pero decidimos desayunar ligero, ahora si te parece mucho, no hay problema, yo invito. —Hannah le sonríe. —Guárdate tu dinero, con lo mucho que comes, seguro que lo vas a necesitar. —¡Oye! —Hannah protesta cuando le roba un pedazo de pan tostado de su plato. Se sienta a mi lado y bebe una taza de café, huelo su colonia, es un olor que le queda de maravilla, Hannah no disimula en nada al verlo, pero Rowan no le importa o no da a notar incomodidad. —Hannah, ¿crees que pueda quedarme unos días contigo? Será solo en lo que encuentro un n
Del closet tomó un vestido azul corto, tiene la espalda descubierta, es perfecto para una noche de fiesta y discoteca, vamos a casa de Hannah para arreglarnos allá, no sin antes pasar a recoger los autos de mis amigas, por el mío iré mañana, decidimos movernos en taxi, para no tener que designar a alguna como conductor, llegamos a una zona donde hay muchos bares de todo tipo. —¡Vamos a bailar! —Emily dice tomando a cada una por el brazo y metiéndose al primer lugar que Bebemos varias copas y bailamos las tres, solíamos hacer esto durante la universidad, salimos de ese lugar y vamos a otro, el ambiente es diferente, bebo una tras otra, un hombre me invita a bailar y acepto, muevo las caderas al ritmo de la música, él me da una vuelta y me rio, el hombre tiene los ojos café claro, igual que Aaron, incluso tienen el mismo corte de cabello, todos los momentos con él vienen a mi mente. —Lo siento, tengo que irme. — Lo dejo en la pista de baile y voy a la mesa con mis amigas. —¿Qué