Capítulo 2

Mientras Scott tomó nota incluso en su teléfono las cantidades necesarias para preparar una jarra de café revisaba también el video de la chica en el noticiero que para ese entonces se había vuelto viral en las redes sociales, pero también en su cabeza, justo en ese momento Juan entraba a su oficina.

—¡Hermano espero que tengas un buen plan para esto! —fue lo primero que dijo al verlo.

—¡Buenos días, Hermano! ¿Cómo estás? ¿Qué tal va tu día? —respondió con tono de sarcasmo al verlo entrar así de decidido a su oficina mientras se sentaba llevando una taza de café que había preparado con las instrucciones de Nancy.

—Vamos toma conmigo un café para que conversemos —sugirió con una sonrisa.

Juan se acercó a la cafetera y se sirvió el café y justo cuando estaba a punto de tomar el primer sorbo escuchó la frase que lo dejaría frio.  

—¿Qué tal? yo lo preparé —dijo con orgullo Scott.

Juan lo miró y en vez de probarlo dijo —¿Estás seguro de lo que estás diciendo? mira que soy muy joven y guapo para morir aún tengo algunos corazones por ahí en la vida que conocer.

Scott lo miró muy seriamente y respondió—gracias por el apoyo hermano… si, yo lo preparé, pero con la ayuda de Nancy si eso te hace sentir mejor.

—¡Ha bueno!, si Nancy te ayudó entonces si me lo tomo sin pensarlo.

—¿De verdad eres mi amigo? —respondió con un tono de regaño.

—Claro, pero no tengo instinto suicida además aún no he podido encontrar a la dueña de mis quincenas y mira que he buscado.

—¿Qué pasó con la de la semana pasada? ¿Betty creo se llamaba?

—Nada… sólo me quería para satisfacer sus deseos más perversos —dijo mientras miraba al techo.

—¡No salgas con eso! —dijo Scott mientras reía.

—¡De verdad! toda una dama, pero cuando estuvimos solos hasta con látigo me salió.

—Estas bromeando.

—Es verdad, incluso me quería amarrar y no hay nada malo con eso, pero quería hasta que yo le pagara y yo quiero una chica con iniciativa, pero no de esas, con esas cosas yo paso soy de mente abierta, pero tengo mis limites en lo personal.

Scott sólo se rio y probó su café ya que debía hacerlo primero porque veía a su amigo aun con la taza en la mano sin atreverse, debió ser honesto, no era el mismo sabor del café de Nancy, pero no estaba tan mal, Juan lo miraba con un poco de reticencia, pero su amistad fue más fuerte y dio un pequeño sorbo.

—Está bien, no esta tan mal creo que puedo sobrevivir, aunque te aconsejo no busques trabajo preparando café.

—Gracias amigo, pero no estás aquí para hablar de mi especialidad en el café necesito ver la manera de solucionar lo que está sucediendo con las tiendas, por lo que he estado viendo no es la primera vez que en esa sucursal hay problemas.

—De seguro es por eso por lo que al final Johnson decidió venderte esas acciones, sabía que ese 10% en tus manos podría hacer más que seguirle el juego a Aaron, según tengo entendido incluso tuvieron una discusión.

—Debe ser por eso es por lo que decidió ofrecerme esas acciones de forma tan repentina, aunque ahora estoy en este lio como si los problemas de esos trabajadores los haya tenido yo mucho tiempo, siendo que más de una vez tuve discusiones en las reuniones de accionistas y nadie me apoyó.

—Si tienes razón, lo que no entiendo es porque nunca sucede nada, ha habido varias quejas en especial con uno de los lideres del lugar, yo creo que lo mejor que podemos hacer es ir a Manhattan sin aviso, ver con nuestros propios ojos que está pasando.

—Tal vez incluso ser un cliente más del lugar —respondió Scott levantando la ceja izquierda.

—Esa no sería una mala idea sólo que para eso te aconsejo un estilo tal vez no tan formal.

—¿Qué tiene de malo mi estilo?

—Vestido así no iras de compras a una tienda.

—Tienes razón… sabes una cosa los chicos quieren viajar a la ciudad creo que es una buena excusa.

—Bueno me avisas como va todo —respondió Juan mientras se levantaba.

—¡Nada de me avisas, tú también vienes! Eres mi asesor así que  tienes que estar ahí —dijo Scott con mucha seriedad.

—Oye primero el café y después el viaje ya estoy exponiendo mi integridad física.

—Sino te moriste con el café no lo harás con un viaje de un par de horas así que prepárate.

—Está bien amigo, pero si me muero será tu culpa quedará en tu conciencia que una chica por ahí no tuvo la oportunidad de disfrutar de este bombón caribeño.

—Pero si tu lista es dos veces la mía.

—Ya no te hagas, que no te quedas atrás, el hecho que no las lleves a casa no quiere decir nada.

Scott sólo sonrió y presionó el citófono para decir—Nancy por favor reserve 3 habitaciones en el mismo hotel de siempre en New York para mañana — después de pensarlo un segundo —mejor que sea desde esta misma noche.

Cuando Juan iba camino a la puerta solo dijo —¡Así que quieres una habitación aparte! ¿tú no pierdes el tiempo verdad?

—Ya no molestes y mejor ve a prepárate, llamaré a los abogados para que se presenten en el lugar y me digan que esta pasando lo antes posible.  

Durante esa mañana, aunque lo hubiese querido Scott no dejaba de pensar en las palabras de esa chica en el noticiero, si bien es cierto tenía algo de razón, eso no le daba el derecho de hablar de alguien sin conocerlo «¿Qué tal si alguien si está abusando de ella?» pensó en un momento.

No le gustaba la idea que en su compañía estuviera involucrada en ese tipo de situaciones, recordaba que su padre siempre protegió a sus trabajadores y por eso ellos aun han sido leales a su compañía, además si lo veía en el plano comercial eso podría hacerlo perder mucho dinero si bajaban el valor de las acciones, algo tenía que hacer, debía solucionar ese problema de una vez, llamó a Sarita y le pidió que por favor preparara los niños con lo necesario para salir a la ciudad en un par de horas.

Después de despedirse de Nancy mucho más temprano de lo habitual se fue a su departamento para preparar la maleta y cambiarse de ropa por algo más casual cosa que pocas veces sucedía en sus viajes de negocios.

***

Mientras tanto a las afuera de la tienda ese día un buen grupo de empleados se paseaba con carteles y entregando volantes a todo aquel que los recibía pidiéndoles que no compraran ahí hasta que sus derechos fueran respetados.

La chica que había dado la entrevista al noticiero decía por un megáfono —¡Es hora de que nos valoren ya no queremos más faltas de respeto, necesitamos que nos paguen lo justo y también que no nos pongan a trabajar en nuestros momentos libres!

—¡Dale, amiga así se habla! ¡Esa es mi amiga Mariela! ¡Tú puedes, yo voto por ti!

—Cállate loca que estas no son votaciones —le respondió la muchacha con una sonrisa y un ligero empujón.  

—Mira muñeca vas a quedar sin empleo, mejor conversemos a solas y diles a tus amigos que terminen este show —le dijo Jack mientras la agarraba fuerte del brazo.

—Ni que tuviera tanta suerte —respondió la chica soltándose de golpe —¡ni usted ni nadie va a abusar de mi ni de mis compañeros, ya basta de todo esto!

—Como que a ti no te han enseñado modales.

—Claro que sí, pero la misma persona que me enseñó modales también me enseñó a defenderme —respondió mientras se sobaba el brazo ya que él le había hasta dejado los dedos marcados en la piel.

—¡Pues te hubiese enseñado a no ser madre soltera! —le dijo con una sonrisa maliciosa mientras la miraba de manera casi lujuriosa.

—¡Con eso no se meta que no tiene derecho! ¡Ni tampoco sabe nada de mi vida como para tomarse las atribuciones de hablar de mí! —dijo la chica mientras simplemente se alejaba.

—Amiga lo escuché todo, este maldito nunca se va a cansar de perseguirte, si supiera que ese niño es tu sobrino ¿Por qué no dices la verdad? así las personas no te juzgan sin motivos —dijo Laura mientras se acercaba después de haber entregado varios volantes a los transeúntes que pasaban por el lugar.  

—Por mí que piense lo que quiera, Miguelito es mi hijo, él sabe que soy su tía y quien fue su mamá y que por amor a mi hermana nunca lo hubiese dejado solo después de su muerte.

—Aunque sólo tenías 19 años y que por ese motivo todos los galanes salen espantados o se te acercan creyendo que porque eres madre soltera eres fácil.

—Me vale lo que piense la gente y muy pronto voy a poder graduarme y buscar un mejor trabajo por ahora sigo aquí porque es la mejor opción que tengo para trabajar en horarios donde mi niño está en clases además estoy sólo a unas cuadras de su colegio.

—Vivir aquí en la ciudad no es fácil, no lo sabré yo que rento el estudio junto al tuyo, porque eso para departamento no llega, hasta lavo los platos en el baño, algún día tendré una casa linda que compartiré con un hombre fuerte sexy que me apapache y haga volar mi imaginación —respondió la chica con un suspiro.

—Pero si tu imaginación pasa volando, incluso Miguelito dice “La tía Laura tiene mucha imaginación según ella Michael B. Jordan es su novio”

—Eso es verdad, él es mi novio… sólo que él aún no lo sabe, pero yo le dije que si —dijo Laura con un suspiro mientras sacaba su celular donde tenía una foto del actor en la pantalla.

—En tus sueños —le respondió Mariela mientras reía y con esa conversación olvidaba por unos momentos el mal rato que había pasado con ese supervisor.  

—Ahora entiendo porque en la mañana necesito agua fría —respondió Laura mientras se alejaba unos metros para seguir entregando volantes.

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