Capítulo 37

La sirvienta subió con pasos ligeros y tocó suavemente la puerta de la habitación de Camila antes de entrar.

—Señora Ferrer, su madre y su hermanita ya han llegado. Me han pedido que le avise —dijo María con cortesía.

Camila asintió, dejando a un lado el libro que estaba leyendo para relajarse después del largo día.

—Gracias, María. Por favor, ¿puedes preparar algo para cenar? Algo sencillo, no quiero que sea una molestia.

—Por supuesto, señora Ferrer. Me pondré en ello de inmediato —respondió la sirvienta con una sonrisa y se retiró.

Camila respiró hondo antes de salir de la habitación. A pesar de su esfuerzo por mantenerse tranquila, sabía que su madre tendría preguntas sobre todo lo que estaba ocurriendo. Al bajar las escaleras, vio a su madre y su hermanita esperándola en la sala.

—¡Mamá! —dijo Camila con una sonrisa mientras se apresuraba hacia ella.

—¡Hija! —respondió la señora Morales, levantándose del sofá para abrazarla con fuerza.

La pequeña hermanita de Camila también corri
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP