♡ ♡ ♡ Querido lector: Quería agradecerte por llegar al final de esta primera parte de la historia, porque, ¿qué crees? Sin duda, ¡Wolfsong tendrá una segunda parte gracias a todo el apoyo que le has dado! ♡ ♡ ♡ Esta segunda parte de la historia se llamará: “Wolfsong2: Vientos del caos” En esta nueva parte la historia, veremos a Anna y a Dante enfrentarse a nuevos y peligrosos retos ante la inminente partida de Alastor, cuyo viaje, estará lleno de descubrimientos que podrían cambiar la vida de todos. Se viene mucho drama y mucha tensión, vuelven viejos personajes y aparecerán algunos nuevos que tendrán gran impacto en la vida de nuestra protagonista. Pero, sobre todo, Wolfsong2, estará llena del amor de nuestra querida pareja, por lo que, probablemente, ese libro será +18, espero no sea un inconveniente para ti. No sé muy bien cuando vaya a salir este nuevo libro, pero yo calculo, que estaría pasando a principios o, tal vez, a mediados de mayo, pues primero, quiero ter
Era una mañana fría en la ciudad de Wolfsong, una pequeña ciudad ubicada en el país de Idania, país que era conocido por sus crudos inviernos, y esto, se podía sentir, sobre todo, en el famoso bosque Flor de Luna, un bosque ubicado en la zona oeste de la ciudad.Por fin, el invierno había dejado paso a la primavera, lo que indicaba, que marzo estaba por terminar, por lo que no era raro de ver que algunos árboles comenzaran a florecer. Si bien, las frías temperaturas que acompañaban al invierno aún estaban presentes, el amanecer en ese bosque era un espectáculo digno de ver, así que no era de extrañar ver muchos corredores hacer sus carreras diarias antes de ir al trabajo.El corredor que más destacaba ese día era un enorme lobo de oscuro pelaje, el cual, corría entre la espesura del bosque con agilidad, camuflándose entre las sombras para no asustar a los humanos. El hermoso cielo cobrizo y el suave trinar de las aves que comenzaban a despertar, eran sus cómplices mientras que sorteab
–Excelente manera de terminar la semana –refunfuñaba una joven Esta era la tercera vez que Anna Rizzo se quedaba dormida, por ende, era la tercera vez en la semana que llegaba tarde al instituto. –¿Cómo diablos pasó esto? –se preguntó al mismo tiempo que tomaba la calle principal Estaba completamente convencida de que había puesto dos alarmas en su celular, la primera, la despertaría veinte minutos antes de las siete, pues ella necesitaba sus buenos minutos antes de empezar a funcionar por las mañanas. La segunda, se suponía que tendría que haber sonado a las siete veinte, la hora perfecta para bajar a desayunar con su familia y no hacer esperar a Gino, el mejor amigo de su hermano, pues ese día, ambos presentarían su examen final en el instituto y quería desearles suerte y, bueno, para qué mentir, quería aprovechar el viaje en auto. Pero, para su mala suerte, ninguna de sus dos alarmas había sonado, lo que le costó su desayuno, el viaje en auto y, seguramente, un buen castigo por
Sentado en la parte trasera de su camioneta, Dante mantenía fija su mirada en su mano derecha, la sensación de hormigueo que había sentido al tocar a aquella humana, aún prevalecía en su piel, y si bien la había sujetado por encima del cárdigan que llevaba, recordar esa dulce sensación, lo hizo estremecer. –“¿Será posible…?”– se preguntó –“El vínculo con los humanos es diferente, con ellos no importa la edad, si fuera nuestra, lo sabríamos” –gruñó su lobo, quien, de hecho, parecía igual de confundido que él. –¿Cómo sabes eso? –preguntó Dante en voz baja, sin embargo, como respuesta, su lobo sólo gruñó –¿Me vas a decir que sucede? –preguntó Lysander desde el asiento del conductor –¿Ya te respondió el alfa? –preguntó Dante echando su cabeza hacia atrás –Aún no – –Sigue intentando …–gruñó Dante –¿Puedo comprar algo para desayunar? –preguntó Lysander –Acabas de desayunar – –¿Almorzar? –Bien…–dijo Dante cerrando los ojos –Sólo déjame pensar… – –¿En la niña bonita? –preguntó Lys
Conforme avanzaba, Marcia agradecía que los pasillos estuvieran vacíos, si bien su olfato le indicaba que un par de rebeldes se escondían en los baños, por esa ocasión, decidió pasarlo por alto, pues tenía entre manos problemas más importantes. El primero y el único que ella podía solucionar, era el aroma de Anna, pues desde que ella había cumplido doce años, este había comenzado a cambiar, era una mezcla muy extraña entre humano y algo más dulce, por lo que se había llegado a la decisión de mantenerlo oculto, para mantener a salvo su identidad debido a los cuatro jóvenes lobos que asistían a su instituto. Dos de ellos, no representaban graves problemas, pues eran los hijos mellizos del alfa Basil Benedetti, que, hasta la fecha, no habían dado señales de reconocer algo en Anna. Por otro lado, estaba Arthur Ziegler, hijo del alfa Caden Ziegler, quien tenía una pésima reputación por cómo había obtenido su título, sí bien el joven era tranquilo e incluso se podía decir que era un poco
Congelada en la puerta, Anna observó a la mujer frente a ella, era nada más y nada menos, que la directora del instituto Montanari, mejor conocida como su abuela. –B-Buenos días…–balbuceó Anna –Kaliméra Anna –la interrumpió –Este bimestre vuelves a llevar gretz, así que, por favor, ponlo en práctica apenas entres a esta aula – Anna asintió y se aclaró la garganta antes de corregir su saludo –Kaliméra diefthyntí – Al escucharla, su abuela le hizo un gesto con la mano para indicarle que pasara, por lo que, obediente, Anna corrió a su lugar al fondo del aula. –Abu… directora –se corrigió Anna de inmediato, pues tenía prohibido llamarla abuela en la escuela, sobre todo, en las aulas –¿La profesora Raptis no vendrá hoy? – –No, está de licencia por su embarazo, daré su clase hasta que consiga un sustituto –le explicó su abuela mientras conectaba su portátil a un proyector –Anna ¿Acabas de llegar? –preguntó levantando su mirada en su dirección –No señora, llegué diez minutos tarde, pe
Boquiabiertos, todos observaron el brazo de Anna, su cárdigan estaba rasgado por encima del codo, lo que les permitió ver una herida superficial que apenas y sangraba. –Pero ¿Esa está loca o qué? –preguntó Elizabeth visiblemente indignada –¿Con qué hizo eso? –preguntó Connor frunciendo el ceño –Parece el corte de un cúter…–susurró Adeline –Es un corte limpio – Ante la herida de Anna, Egan arrugó el ceño, se dio la media vuelta y comenzó a buscar al grupo de brujas con la mirada, sin embargo, ellas ya habían desaparecido entre la multitud de estudiantes. –No, Egan –dijo Anna tomándolo del brazo cuando este, intentó ir a buscarlas –No le des importancia – –¿Que no le dé importancia? –preguntó Egan molesto –Anna, eso no es una simple broma – –Tiene razón Anna, hasta donde sabemos, la pelirroja jamás había herido a nadie –dijo Connor, quien también arrugaba el ceño –Lo sé, chicos, pero, si alguno de ustedes puede probar que fue alguna de ellas, estaré encantada de ir y decírselo a
Cuando su hermana se levantó, Egan se llevó la palma de su mano a la cara y su profesor, la miró con gesto confundido debido a su arrebato. –Oh… Disculpe profesor Cooper –se disculpó la joven torpemente al ver que todos la observaban –Es sólo que me he frustrado, ¿Podría explicar nuevamente la fórmula? –El profesor Cooper la observó por unos instantes antes de acceder, no sin antes advertirle que debía controlar su frustración.“¿Qué diablos te pasa?” –preguntó Egan cuando su hermana volvió a sentarse y el profesor Cooper comenzó a repetir su explicación“Te lo explicaré en casa”“Me lo explicas ahora, después de semejante ridículo no me vas a dejar así” “Bien, te lo contaré después de la clase” –accedió Elizabeth“No, no voy a dejar a Anna sola con la psicópata esa acosándola”“No la vamos a dejar sola, Adeline y Connor estarán con ella, además, creo que ya va siendo hora de que le digas lo que sientes, no pierdes nada con hacerlo” –lo aconsejó su hermana“Sabes que no puedo Eliza