Cuando ambas mujeres se quedaron atónitas por ese golpe de suerte que tuvo Violeta, ambas se miraron y gritaron de asombro, para decir al mismo tiempo
— ¡Pero que guapo es!— dejando salir un suspiro.
Después se rieron mucho, continuaron hablando de increíble que es encontrarse a gente así de maravillosa en lugares tan comunes como una cafetería,
—Pero eso debió ser porque era un lugar cerca del río Han, sino creo que no hubiera coincidido con él, además se ve que va seguido, parece ser muy sencillo pese a todo el éxito y fortuna que tiene— dijo la joven, tocándose la barbilla a modo de concentración.
La señora Choi apenas podía contener su emoción como si estuviera viendo un drama surcoreano, que apenas empezaba.
— ¡Pues qué esperas para ir de nuevo a ese lugar!, ¡es más! ve mañana mismo, sería maravilloso una historia de amor así de afortunada— juntó sus manos y suspiró.
Un silencio breve inundó el lugar, para que después Violeta con una postura de reflexión y seriedad que adopto en ese momento.
—Halmoni, en realidad no me interesa nadie por su posición económica, y menos espero atenerme a su ayuda, sabes que no me gusta depender de nadie, además no creo que pueda aguantar mi estilo de vida con todos los demás—sollozo y agacho su cabeza, mostrando una leve decepción.
Cómo violeta era una mujer muy libre, independiente; siempre le costó tener una relación seria o duradera, pero nunca se desanimó, simplemente entiendo que la oferta que ella daba a los demás como pareja era poco demandada, así que solo podía lidiar con su aceptación y lo complejo que sería encontrar un compañero ideal.
—Mi niña en serio debes dejar de pensar así, todos merecemos amor, no te prives de nada solo por creer que no hay nadie que te entienda, cuando menos esperes llegará algo que abrace tu corazón y vuele contigo también, ya verás— le palmeo la cabeza dulcemente y le sirvió más comida.
—Señora Choi ¿por qué es así de linda y amable conmigo?, nunca le pude preguntar, sabe después de todo lo que pasó cometí el error de no seguir en contacto con usted— Violeta agradeció y la miró con gran curiosidad.
Mientras esperaba paciente pero curiosa por su respuesta, Violeta centro su atención en la tierna mujer.
—Mi niña, sabes hace más de 10 años tenía una hermosa y joven hija que estaba embarazada, pero era madre soltera, siempre la apoye y cuide, pero aquí en Corea ser madre soltera es terrible, por lo que ella entro en una gran depresión y bueno... decidió suicidarse, poco después de que supo que había perdido a mi nieto justo antes de los 3 meses, toda esa presión, todo ese odio fue espantoso para ella y ni que decir para mí fue muy triste, ahora puedo hablar de ello, recibí ayuda psicológica por parte del gobierno, que me ayudo mucho, desafortunadamente mi hija nunca quiso ir y bueno término de la peor manera posible— respiro profundamente y trago saliva.
—Lo lamento mucho halmoni, no debí preguntar. — la joven respondió y sus ojos se humedecieron levemente
Tomo las manos de la dulce mujer, tratando de darle consuelo a su perdida y profundo dolor.
—No te preocupes, creo que de cierta forma veo a mi preciosa hija en todas las jóvenes que veo, pero especialmente en ti, así que déjame ayudarte cuando necesites, me hace bien cuando vengas aquí está tu casa y tendrás comida, sé que dirás qué son pocas veces las que vienes pero aun así ven cuando quieras— presionó sus manos contra las de la joven y sonrió ampliamente y asintió.
Después de comer, la señora Choi le ofrecio quedarse a dormir en su morada y la joven acepto la invitación por ese día ya que era bastante tarde para salir a buscar hospedaje, tomo sus pertenencias y se puso sus pijamas para dormir en una colchoneta en el cuarto de invitados de la casa de la señora Choi.
Al día siguiente despertó muy temprano y cuando vio le dejo de na cantidad generosa de comida casera con una nota pequeña que decía:
« Violeta gracias por hacerle compañía a esta vieja solitaria, sé que tal vez no puedas quedarte todos los días por la naturaleza de tu trabajo, pero ven a comer de vez en cuando.»
La chica se alegró y comió con mucho entusiasmo la deliciosa comida, saboreando cada bocado.
Cuando salió de ahí comenzó a caminar rumbo a tomar el tren subterráneo hacia la compañía de turismo, que le había dado el contrato para esa temporada, llegó justo a tiempo dejo su gran mochila en unos casilleros especiales para los viajeros que trabajan con la compañía; subió hasta el piso donde estaba la sala de juntas ese día iba vestida con un atuendo formal y muy adecuado para la ocasión, un traje color verde menta, con una camisa holgada blanca, zapatillas de plataforma color beige.
Al llegar a la sala de reuniones se sentó en el lugar que le fue dispuesto, saco su tableta y preparó sus presentaciones sobre los trabajos de turismo que realiza, entre numerosos y diversos proyectos a los que también se dedicaba, pero su especialidad es dar críticas en columnas de importantes revistas y periódicos sobre lugares al rededor del mundo.
Dieron las 8 AM en punto comenzaron a llegar los altos mandos y supervisores a la junta, unos 3 minutos después llegó el CEO de la empresa, quien para su sorpresa era Shin Park Smith, el famoso y exitoso CEO y dueño de múltiples empresas en Corea del Sur, se sentó y miro a su alrededor para posar sus ojos en la joven que no había parado de tener en mente desde ayer, intento actuar desentendido sobre lo que sentía en ese preciso momento.
— Comencemos, ¿es usted la famosa escritora de columnas turísticas Violeta Schulz Blancas verdad?, un gusto soy Shin Park Smith CEO y dueño de la empresa turística Love Around Korea, entre otras— dijo y miro su reloj.
La joven abrió enormemente sus ojos y después respiro profundamente para intentar guardar la compostura, aguantando la mirada de aquel varonil y atractivo hombre
—Buenos días Señor Park, y buenos días a ustedes ejecutivos de Love Around Korea, así es me llamaron para un proyecto sobre promoción de Seúl, para incrementar el turismo en temporada de invierno— expreso y sonrió elegantemente.
— Claro señorita Schulz estamos al tanto de su destacable experiencia como columnista en los mejores medios de comunicación del mundo y sus trabajos literarios, así que en realidad no necesitamos que muestre su materia de trabajo, solo queremos que muestre Seúl en todas las mejores facetas de turismo cotidiano, hasta la más fina de sus caras, le entregaremos los viáticos necesarios, con todo incluido y más su salario— informó el secretario del CEO con bastante apremio.
Pero de forma precisa, seguido un supervisor le entrego los materiales necesarios que eran: una tarjeta de crédito de la empresa, un mapa trazado con las rutas, las llaves de un auto último modelo, un celular con los contactos del staff, una laptop, para después escuchar atentamente las indicaciones del CEO.
—Bueno habiendo dicho esto señorita Schulz, esperamos resultados maravillosos como los de sus anteriores trabajos, nos importa mucho renovar el turismo en invierno, es un proyecto conjunto con el gobierno y diversas empresas grandes y pequeñas, que se beneficiarán del turismo, bien cualquier asunto mi número y el de este equipo está disponible en el móvil que le fue entregado, ahora debo retirarme— se paró y acerco para estrechar la mano de la joven.
Pero en ese momento, ella percibió un cálido sentimiento de emoción y tan acogedor que se casi fue como si no hubiera nadie a su alrededor, por su parte Shin sintiendo las heladas manos de esa hermosa chica pensó descuidadamente.
Al encontrarse con ese hermoso pensamiento, le sacudió el cerebro y entró en estado de alerta para evitar sentir de más.
Cuando ambos se vieron estrechando su mano, como colegas de trabajo, una pequeña fracción de emoción parecía descongelar aquello que ambos habían intentado mantener helado; como es que el toque de un simple extraño pudiera ser algo más que un coqueteo fugaz en un día de invierno, a vísperas de navidad, la verdad es que ninguno de ellos sabía o sospechaba lo que pudiere ser.Poco después en el salón de juntas se retiró Shin con su séquito de ayudantes, para continuar su arduo día de chequeo de empresas en las que &eacu
Poco después de tomar el descanso que tomó Shin, abrió sus ojos lentamente, mientras que sentía que su estómago estaba con el pleno gruñido, se levantó para así dirigirse a su nevera, tenía muchos alimentos pero en realidad ninguno le apetecía, por lo que se dispuso a pedir algo para comer pensó.«Creo que unos fideos jajangmyeon estaría bien, los pediré para que cuando regrese ya estén listos, pero para ser sincero creo que no sería suficiente, tendré que ir también a la tienda de conveniencia.»Pero sin antes verificar que seguía en su atiborrada agenda, que extrañamente tenía unas tres horas libres, por lo que con cierto alivio y alegría, mando su orden al restaurante de su elección y la pago se cambió de ropa a una más cómoda, aunque sea provisionalmente ya que debía cambiarse de nuevo para retornar a las siguientes actividades, por tanto debería su elegante y fina vestimenta.Tenía mucho tiempo que no me quedaba tiempo libre de esta forma entre horas laborales, considerando que s
— Buenas tardes señor Na-moo, Soy Violeta, ¿está listo para nuestro primer viaje? —, se inclinó levemente hacia el hombre mayor. — Por supuesto señorita Violeta, además estoy ansioso este tipo de trabajo es maravilloso, ¡me permite conocer muchos lugares y aprender! —, exclamó entusiasmado. — ¡Me alegro escuchar eso Señor Na-moo!, ¡así que manos a la obra!, nos espera un poco de nieve así que será un camino bello, ¿No cree? —, dijo la chica mientras se subía al auto. — ¡Claro! Estoy entusiasmado, así que vayamos. — cerró la puerta trasera, y subió al lugar del piloto. Mientras encendía el auto tuvieron una conversación cordial sobre como es Seúl en esa época, poco después quedaron en silencio, así que la chica comenzó a realizar su en vivo para transmitirlo en su página oficial, rápidamente tuvo respuesta de sus fans y seguidores alrededor del mundo. Al momento que ella compartía el precioso trayecto de un paraíso cosmopolita de la tan afamada Seúl, los fans lograban emocionarse a
Cuando hubo terminado la entrevista Violeta quedó inmersa en sus pensamientos debido a que la sensación que le trasmitió esa entrevista, mientras miraba las plantas y flores en su pleno esplendor una sensación de alivio y entusiasmo le invadio, miraba de cerca esos seres vivos que disfrutaban su momento, el presente como expresando su belleza alegraban la vista inclusive el día de las personas que las miraban.— ¿Este mensaje en este preciso momento será lo que en realidad necesitaba?, dejar que todo fluya como la naturaleza hace que nazca un brote de planta apartir de lo que va dando el ambiente y el momento…—, comenzó a preguntarse a sí misma murmurando, cuando una inquietud alegre invadía su cuerpo, cuando se vio interrumpida por la señora Jiyu.—Señorita disculpe que la interrumpa pero quería darle un regalo, me parece que esta flor podría darle ese mensaje que parece estar buscando, a veces a través de la naturaleza podemos entender de mejor manera el curso de la vida, porque sab
— ¿Hola, Señorita Schulz? — una voz masculina con aire curioso salía de la bocina del móvil de Violeta.— ¡CEO Park! Sí… ¡sí! Dígame, ¿en qué puedo servirle?, le informo que justo hace unos minutos he terminado la entrevista con la gerente y dueña del café happy flower, fue todo un éxito…— aun cuando en un inicio de la llamada su rostro señalaba un sonrojo intenso rebosante en sus mejillas, intento controlar su tono de voz, aun cuando era casi imposible que no notara las innecesarias pausas que se tomaba para comunicar su mensaje entre oraciones.—Señorita Schulz... — pronuncio de nuevo con cierto tono aterciopelado de su voz llamando a aquella chica que le causaba un revoltijo de emociones y sensaciones dentro de él.—Escuche, tengo algo que quiero que haga mañana a primera hora, necesito que se presente a mi oficina, tráigame una propuesta de lo que crea que ayudaría nuestra empresa a mejorar este proyecto invernal— después de pronunciar dichas palabras el corazón de Shin comenzó a
Al llegar de regreso a Seúl el señor Na-moo dejo a Violeta en la estación, la chica se bajó, para hacer una leve reverencia en señal de agradecimiento, pero el clima había tomado más fuerza.—Señorita Schulz, ¿segura que no quiere que la lleve a donde se está hospedando?,el clima se ha alocado más, de hecho creo que fuimos suertudos en que no nos tocara en la carretera. — expreso preocupado el chofer, mientras veía asomado de la ventana a la joven.—No se preocupe señor Na-moo, en realidad ayer solo me quede con una amiga provisionalmente, pero que le parece que en cuanto tenga una ubicación estable le diré donde pueda dejarme, para próximas ocasiones ¿le parece? — acompañando su breve frase con un manierismo para dar a entender que todo estaría bien.La verdad que es que aunque Violeta confiaba mucho en el chofer, siempre procuraba no molestar a sus amistades con algo como dar su dirección por parte del trabajo, sobretodo porque no quería causar engorro a futuro, cosa que solo ella
En el momento que el metro se detuvo Violeta tomó sus pertenencias, justo en ese momento miro que aquel encantador joven con quien había tenido un agradable filtreo, se levantó, ágilmente se aproximó a la fémina con elegancia y carisma, pero desafortunadamente, ella estaba tan inmersa en salir que no prestó atención al acto del joven.Súbitamente estaba por caerse Violeta y ese misterioso hombre la tomo en sus varoniles brazos para evitar el accidente, con ese movimiento quedaron ambos con una escena tal de una película de romance, ella recargada en sus brazos, sus rostros contrapuestos sus rostros uno del otro, a escasos centímetros sus labios, , pero justamente casi como si una catapulta la impulsara ella se zafó de los brazos de él oportunamente para salir presurosa y exaltada por la intensidad del momento, dejando que la puerta del vagón se cerrara para que entre aquellos dos quedaran congelados mientras la puerta los separaba, el único gesto que tuvo aquel joven fue sonreír de f
Al día siguiente Violeta despertó con sus cabellos enmarañadas, se paró e inicio su rutina diaria, al escoger el conjunto de ropa indicado para ese día que era un blazer negro, una blusa de cuello de tortuga color blanca y unos pantalones rectos a la altura de la cintura con un cinturón de hebilla dorada, aliso su alocado cabello finalizo con un maquillaje sobrio pero elegante, tomó su bolso debido a que se había levantado relativamente tarde, no pudo tomar el desayuno, al ir saliendo noto que la dulce señora Choi aún se encontraba durmiendo profundamente, en la entrada donde se encontraban los zapatos calzo sus botines blancos para así quedar preparada para ese nuevo día.Saliendo corrió hacia la estación del metro, por pura suerte un pequeño espacio estaba disponible aunque estrujado debido a que la afluencia del transporte público era muy alta por las mañanas, al ir en el apretado espacio solo tomo aliento y trato de no estresarse, justo llego el momento de salir del vagón apresuro