Cap 17 Un amor bonito.Samara miró a su madre y dijo:— ¿Nicolás, es la amiga con quién te verías mamá?Le sonrió con picardía; en los ojos de la muchacha era evidente que había curiosidad, continuó diciendo:— Es un gusto Nicolás tenerte de visita;— se volvió hacia Clara— quiero decirte mamá, que tú eres una mujer adulta, está bien si necesitas salir, tampoco debes preocuparte por la hora, solo decirme la verdad.Nicolás la justificó de inmediato diciendo:— Pido disculpas por eso que hizo, además por imponer mi presencia acá, sin ser invitado, solo le quise dar una sorpresa a Clara, quizás no supo qué decir para salir conmigo.— ¡Oh no Nicolás!— exclamó ella— Discúlpame tú a mí, solo aclaraba las cosas con mamá.Clara quién estuvo callada hasta ahora dijo con timidez:— Nicolás insistió en traerme a casa.—Mamá, eso me parece genial, no tengas pena conmigo—dijo con ternura— no tienes porqué andar dando explicaciones; vamos a sentarnos, quiero saber cómo se conocieron.Nicolás y Cl
Cap 18¡Eres mía, Clara!Nicolás llegó puntual a recoger a Clara, se saludaron con un beso suave, él sintió la necesidad de decir a Samara y a el esposo:— Estaremos todo el día fuera, la traeré muy tarde en la noche, quiero aprovechar de mostrarle algunos lugares, disfrutar al máximo de la compañía de ésta bella mujer.— Vayan con toda confianza, cuidala mucho Nicolás, mamá es un ángel para nuestra familia— dijo la muchacha.Él lo prometió, se dirigieron a su destino, Clara se sentía plena, jamás pensó sentir amor por otra persona que no fuera Álvaro, hasta hace poco, nunca imaginó que su vida estuviera dando un giro de ciento ochenta grados para disfrutar nuevamente de las mieles de ser amada y valorada como mujer, mucho menos por un hombre como Nicolás Jeppsen, hasta hace poco un perfecto desconocido, que llegó para llenar los vacíos de su corazón.Nicolás la miraba de vez en cuando mientras conducía, sonreía mandandole besos al aire, el cual ella recibía haciendo un mohín en form
Cap 1El reto Clara deambulaba por los alrededores de una escuela secundaria, se sentía tentada a iniciar como docente, había pasado tanto tiempo que no tenía un empleo, pero tenía una resolución en mente, necesitaba ingresos con urgencia, su casa se estaba cayendo por no estar recibiendo mantenimiento constantemente.Su vida era un caos, un esposo sumido en la depresión, su vida mustia por falta de atención de su pareja, ¿Qué más podía hacer para revivir un matrimonio marcado por el abuso verbal constante? Sentía frustración a flor de piel, afortunadamente los hijos que habían tenido ya estaban fuera de casa, porque sería un desastre con la economía paupérrima que tenían ahora, además de tener más bocas que alimentar Se mordió los labios, no era tan valiente, solo era una tímida mujer, que ni siquiera hacía feliz a su esposo, mejor era buscar otra cosa que hacer, aquello de ser docente no era lo suyo, era mucho para ella, entonces se dijo:—«¿Prefieres morir de hambre,.mujer?»Sí
Cap 2 Sola y desolada Y así habían pasado los años con Clara; cuando sus hijos eran pequeños, su trabajo pasó a ser de medio tiempo y eso redujo su sueldo, haciendo más tensa la situación en casa, más, pudo tener bajo control su vida personal y laboral.Su vida siempre había pasado entre números, hijos y libros de su esposo, estos siempre estaban esparcidos por toda la sala, se había hecho una costumbre en ella andar recogiendo el desorden que dejaba Álvaro así como también, lo de sus hijos.Ella a veces pensaba: —«¿Era feliz con Álvaro? Si! Se repetía, claro que soy feliz; ¿qué más puedo pedir?»Cuando se casó con él, ella apenas terminaba la preparatoria, solo 16 años, llena de sueños, proyectos e ilusiones, se lanzó a la aventura del matrimonio con los ojos cerrados, a pesar de ser tan jóven.A la par de la vida de casada, culminó sus estudios de Contabilidad; al obtener su título, casi inmediatamente empezó a trabajar en una respetable firma con un sueldo que los ayudaba a v
Cap 3Los amigos Nicolás estuvo muy ocupado en sus reuniones de negocios, por algunos instantes se quedó pensando, alguien venía a su mente, Clara, tenía un nombre que evocaba música, vió su foto de perfil por enésima vez y se preguntaba: —«¿Sería ese su rostro real? ¡Era tan hermosa! ¿Cuántos años tendría, 28 o 30 quizás? ¿Estaría casada? No, si estuviera en una relación, no estaría hablando con él, durante todas estas noches, sacudió la cabeza para centrarse nuevamente en su trabajo.Un rato después dejó de revisar papeles, ella no lo dejaba concentrarse, le agradaba tanto hablar con ella, jamás había conocido una mujer como Clara, tan fresca, podía tocar cualquier tema ella respondía con tanta coherencia, se notaba que era una chica inteligente, nuevamente pensó:—«¿Y sí no es real? Había escuchado de tantos engaños en las redes, ese día no le escribiría, se estaba volviendo un vicio Clara en su vida apenas tenían menos de una semana hablando.Ella no durmió bien esa noche,
Cap 4Aclarando dudas Miguel Russell un tipo un poco menos alto que su amigo Nicolás, divorciado, tenía cuarenta años, cabello oscuro, piel blanca,labios delgados, nariz aguileña, ojos color marrón, mirada profunda; en general, no era mal parecido, tenía un cuerpo atlético, era de muy buen humor. Conocía a Nicolás,desde que eran niños, habían emprendido negocios juntos, ahora eran dueños de muchos negocios, aunque Miguel se ocupaba más de la red hotelera, no les iba nada mal. Susana Morgado, una rubia de 36 años; conocía a Clara desde la preparatoria, a pesar de los años que habían pasado, hablaban con regularidad, era de rostro duro, ojos vivos, muy verdes, con sonrisa maliciosa, labios carnosos, siempre fue llenita de cuerpo, pero de figura proporcionada, no muy alta, divorciada, sin hijos, trabajaba como gerente comercial en la red de hoteles de Nicolás Jeppsen y Miguel Russell. Clara marcó el número de su amiga, esperó unos segundos para escuchar la agradable voz al teléfon
Cap 5Mi historia…—No me estoy burlando, eres aún muy joven, en serio—dijo él—¡Te ves genial! Eres muy bella mujer! Empezaste muy joven a ser madre, imagino.—Gracias de verdad—respondió ella— sí a los 16.—¿Y tu esposo no se molesta por qué estás hablando con un amigo?— dijo —¿por estar a esta hora metida en las redes?—¡Yo estaría celoso!—¿Álvaro?—dijo Clara,—a él no le importa si estoy viva o si muero—dijo con tristeza.—Así se llama tu esposo ¿Cómo es eso?—replicó Nicolás— ¿Están separados? Y disculpas por mí intromisión!—Separados, como tal no—dijo ella—es un poco engorroso hablar de esto.—Entiendo, se que soy un desconocido—dijo él— Voy a entender que no quieras hablar de tu privacidad conmigo.—No, no es nada de eso—dijo Clara—tardaría bastante tiempo contarte; es una larga historia, no deseo aburrirte.— ¿Aburrirme? Tu nunca serás aburrida para mi cariño; empieza querida— dijo él— soy todo oídos, eso sí deseas confiar en mí.Ella suspiró y dijo:—Álvaro no me quiere Nicol
Cap 6Enfrentamiento —¡Tienes razón Sam!—¡Vamos por ese desayuno!Alegremente se sentaron a desayunar, tenía bastante tiempo que no compartía con su hija, así que aprovechando que la pequeña y el esposo de su hija, estaban aún dormidos, lo aprovechó para conversar un ratito con ella. Conversaron amenamente sobre cualquier tema, terminaron de desayunar, cuando Adam irrumpió en la cocina.—¿Quedó algo de comer para mí?—preguntó—¡Claro papá!—dijo Samantha— Ven siéntate a la mesa, ya mamá y yo terminamos—así que tienes la mesa para ti solo.Él las miró, se encogió de hombros y se sentó a la mesa, no sin antes decirle a Clara.—Apenas termine mi desayuno nos vamos a casa, sin esperar respuesta, empezó a comer olvidándose de los demás.— Vamos mamá, te ayudo a recoger tus cosas—dijo Samara— aprovecharé para despertar a mi dormilón allá arriba. Iban de camino a casa, Clara iba pensativa, Álvaro ni siquiera se preocupaba como ella se sentía, sólo conducía el auto sin iniciar ningún tipo