Luis no podía creer lo que había escuchado por cuánto tiempo había tenido aquella situación bajo sus narices sin darse cuenta, ahora todo encajaba el motivo por el cual sus hijos cambiaron tanto y se habían apartado, al menos por los últimos cinco años la situación era tensa y eso hacía sufrir a sus madres.

Ahora viéndolos a los ojos lo podía entender todo era el último secreto, — No se queden en silencio quiero saber ¿qué es lo que está pasando?

— Padre yo puedo explicarlo.

— Harry, a quien quiero escuchar es a Christine, hablaste fuerte y claro sobre tus sentimientos.

— Papa ¿Que puedo decir ante una revelación tan perturbadora?, es mi hermano por Dios.

— ¿Si no fuera así?, ¿Si no fueran hermanos que dirías?, ¿Lo dejarías ir?

Ella lo pensó durante unos minutos y luego respondió, — si no fuéramos familia su confesión me hubiera hecho feliz pues quizá necesite un psicólogo pero también albergo sentimientos por él, las culpa fue lo que me hizo comenzar a beber.

Luis se sintió terri