Al llegar al nivel requerido sus caminos se separaron, Gabriela fue la primera en bajarse del ascensor y Luis solo pudo verla alejarse con pasos llenos de seguridad, él fue el siguiente en bajar y se dirigió al departamento de Recursos Humanos para pedir el expediente de aquella pelirroja de ensueño.
Una vez se hizo del documento pensó que debía hacer a partir de lo que descubriera allí, quizá desenterrar el pasado era un error, pero ¿si tu vida se había detenido en aquella época no desearías resolverlo?
Pasados unos minutos cuando Gabriela se disponía a dar inicio a la reunión con su grupo de trabajo tocaron a la puerta y una vez entró el que había interrumpido, se sorprendió de que se tratara nuevamente de Luis, internamente le dio satisfacción pues parecía estarse volviendo loco en tan poco tiempo, pero también tenía claro que no deseaba que la desviara de su objetivo principal.
—Buenos días, a todos.
—¿Necesita algo?, ¿puedo ayudarle?
—Vengo con la intención de asistir a la reunión, me gustaría participar, aunque no se trate de mi área de especialidad.
Gabriela estuvo a punto de girar sus ojos, ¿es que aquel hombre no le daría un respiro?, definitivamente la capacidad de insistir no la había cambiado en tantos años, pero ella no le daría el gusto de sacarla de sus casillas ni que notara su perturbación.
—Está bien, Doctor, puede tomar asiento donde guste—, todos los asistentes estaban asombrados a la par de maravillados, siendo el director no solía asistir ni siquiera a sus propias reuniones y ahora estaba allí como uno más, entre ellos, además era no solo reconocido por su conocimiento y prestigio sino muy admirado por todos, así que al menos ellos se sentían felices.
—Bien ahora que todos estamos acá, en primer lugar quiero presentarme, yo soy la doctora Gabriela Brennan y estaré a partir del día de hoy liderando el excelente equipo que conforman, no deseo que me vean como una jefa, mi lema es trabajar como un engranaje bien aceitado, un equipo sincronizado que podamos saber y apoyar las actividades de todos, respecto a lo personal suelo fomentar el concepto de familia, por lo cual la confianza será el valor más importante que debemos mantener, seamos honestos…..
Mientras la doctora da su discurso de bienvenida los recuerdos se apoderan de Luis, Once años antes, la otra cara de la moneda…, pequeños flashes de todos estos años.
Todavía podía recordar aquella noche que la habia visto por ultima vez como si fuera ayer, el rostro sonrojado y húmedo de Gabriela mientras lloraba y la lluvia le mojaba, —Pensé que no te volvería a ver, dijeron que te ibas del país y que no volverías nunca, no es cierto, ¿verdad?
—Es la verdad, no nos veremos nunca más—, no le había quedado más que mentir para no arrastrar a aquella chica inocente en su desastrosa vida.
Inocentemente había preguntado ¿Por qué? y el mintió en decirle que no sentía nada por ella, que no era nadie en su vida, ¿Quién le diría que luego se tragaría sus palabras?, pues además de su hija lo único verdadero, puro y hermoso fue esa etapa junto a ella.
A la mañana siguiente de aquel día en que fue cruel con la mujer que tenía enfrente ante el desprecio de su madre e indiferencia de su padre partió rumbo a Escocia, su abuelo paterno un ex militar le estaba esperando para como decía su madre transformarlo de la basura en que se había convertido, en un hombre digno de portar su apellido y heredar su imperio, Luis sabía que aquella decisión era simplemente para cubrir las apariencias ante la sociedad, socios y clientes, para su madre lo más importante era el prestigio y él no lo pondría en peligro.
Los primeros días fueron difíciles, desintoxicarse del alcohol y las drogas a su estilo no convencional era toda una prueba, en un principio lo amarraba cuando tenía las crisis y luego lo obligaba a hacer trabajos forzados, atender la hacienda, los animales y cuanta cosa podía para mantenerlo ocupado.
Su abuelo de manera brusca lo había salvado y a pesar de que en muchas oportunidades lo odio y hasta le paso por la mente dejarlo morir de alguna manera le había abierto los ojos a la realidad, en especial a quien era su madre realmente.
—¡Ejem, ejem! —, la voz de Gabriela lo sacó de su ensoñación.
—Disculpe, ¿me preguntó algo? —, y todos sonrieron con cierta pena.
—¿Está de acuerdo con la decisión que se tomó? —, ella apenas podía contener la risa para no terminar con la broma, pues tenía unos minutos que le había observado distraído y les había comentado a los otros que le preguntaría cualquier cosa para demostrar lo que no se debía hacer en una reunión de tal índole, lo cuál era distraerse.
—Bueno, me gustaría discutirla con usted posteriormente a la reunión si es posible.
De pronto estalló la risa colectiva incluyéndola a ella, —En realidad doctor no he dicho absolutamente nada referido a una pregunta, solo le tomé el pelo para demostrarle a mi personal que aspiro que no se distraiga en el futuro como usted lo estaba haciendo en este momento.
—Me disculpo con todos, en especial con usted, no volverá a pasar.
El resto de la reunión estuvo totalmente concentrado, participó, dio su opinión y hasta sus aportes fueron tomados en cuenta por Gabriela, siempre fue un hombre inteligente y preparado por lo que aquello no le sorprendía en lo más mínimo, una vez terminaron cada uno se fue retirando hasta quedar completamente solos, momento en el que Luis aprovecho para cerrar la puerta e impedir que saliera del lugar.
—Tenemos que hablar y no acepto un no por respuesta.
— Supongo que como se trata de algo laboral nos reuniremos en tu oficina— , lo decía pues era completamente de cristal así que por mucho que deseara tener algún avance con ella no se atrevería a quedar expuesto.
— Pensaba invitarle a almorzar y así tenemos un poco más de privacidad.
— Tal como lo dije antes, hoy es mi primer día de trabajo y deseo concentrarme en las actividades relacionadas con mi personal y pacientes, tengo mucho por hacer, pero si usted desea me puedo reunir en algún espacio que tenga durante la jornada o también puede ser en otro momento.
— De acuerdo, por favor, entonces en mi consultorio hoy a las 6:30 de la tarde—, a esa hora el personal administrativo no estaría y también le daría oportunidad suficiente de leer su expediente e investigarla un poco.
— Está bien, entonces estaré allí a esa hora—, Gabriela no tenía idea del horario administrativo así que no se preocupó, por otra parte, debía mantener la calma, pues tarde o temprano se enfrentaría a él, así que ¿para qué prolongarlo mucho más?
Apenas llegó a la oficina Luis leyó el expediente, solo contenía sus estudios y desarrollos profesionales, pero nada de su vida personal, quería saber si estaba casada, si tenía hijos, que había pasado todos estos años con ella, de hecho, el único dato importante era su número de teléfono pues la dirección, de contratación seguía siendo Irlanda.
Asi que era allí donde se había escondido todo este tiempo pensó, cuando regresó el intento saber sobre su paradero sin obterner resultado, pero esta vez no se quedaría con los brazos cruzados, asi qué contrató un investigador le dio toda la información que pudo, solo quedaba esperar.
Una vez se hizo la hora estimada un poco dudosa fue hasta la oficina de Luis, lo primero que notó es que ni su asistente ni secretaria estaban, de hecho, el piso estaba completamente vacío, lo cual la puso nerviosa, pero cuando entró y observo que tenía entre sus manos una carpeta se tensó aún más.
—Lo sé todo, en mis manos tengo tus secretos…
Luis quería intimidar a Gabriela, pero ella ni era aquella chica a quién despreció aquella noche de lluvia frente a su casa y se lo iba a demostrar, de hecho, no se permitiría a sí misma flaquear.Así que caminó decidida hasta su escritorio y preguntó, — ¿Supongo que puedo sentarme no? — , dijo señalando la silla. — Si claro. — ¿A qué te refieres?, no tengo ningún secreto, así que lo que tengas en esa carpeta no tiene relevancia, si es mi currículum, allí estará lo importante de mis datos laborales pues es mi historial de desempeño y educación — , interiormente estaba preocupada pues sabía que intentaría investigar a más profundidad, por su parte Luis solo lo dijo para ver su reacción y la noto nerviosa, así que logro el efecto deseado, tenía algo que ocultar y el averiguaría que. — ¿Estás aquí para vengarte de mí por lo que te hice? — No sé de qué hablas — , era una verdad a medias pues a pesar que no era su objetivo principal sino su madre esperaba que el también sufriera. — D
Dejo el lugar preocupada pues aquella coincidencia solo significaba que en primer lugar o debía cambiar el niño de colegio estaría en riesgo de que rápidamente se supiera su secreto, además era totalmente inaudito que dos hermanos por parte de padre se conocieran de esa manera, no quería ni imaginarlo.Por el momento solo pensó en el hecho de minimizar las opciones mientras decidía que hacer, así que se detuvo antes de llegar a la clínica y llamo a su madre. — Hola hija, ¿qué ocurre? — Pues mamá, cuando vayas a buscar a Harry deberás hablar con él, intentar que por ahora no comente mi profesión y deberás llevarlo e irlo a buscar no solo mientras este supuestamente viajando. — Y eso, ¿por qué? — No lo vas a creer, pero la hija de Luis estudia en el mismo colegio de Harry, quizá en otra aula, pero ella me conoce y si me ve le podría decir a su padre. — Que enredo, ¿por qué no lo cambias de colegio? — No es tan fácil encontrar cupo en un colegio cuando ya ha empezado el año escolar
Luis no deja de pensar en que estar haciendo aquella noche Gabriela, no puede concentrarse ni en lo que le dice su hija, por ellos cuando esta decide ir a dormir se siente aliviado, no puede evitarlo, quizá traspase los limites, pero no puede contener los sentimientos que ella con su regreso a despertado, no sabía cuánto la ha extrañado hasta ahora que la tiene cerca, se sentía muerto, sin sentimientos, pero ahora todo había cambiado. Insiste una vez más y esta vez la llama, — Hola, Gabriela, siento tener que ser insistente. — Vi tus mensajes y llamadas, pero la verdad no logro comprender porque te sientes en derecho de compartir conmigo tu opinión, creo que con quien yo salga no es tu problema, tienes 10 años que no me ves, ¿a qué viene tu preocupación? — No lo conoces, no quiero que dañe tu imagen en la clínica. — Soy una adulta se que debí hacer o no, además durante años me enfrentado a mucho y tu no has estado allí. — No quiero que siga siendo de esa manera, eres mi emple
Aquella mañana Luis llega muy temprano, cuando se trata de una cirugía o parto en el que debiera participar era excesivamente meticuloso, por ello se preparaba con suficiente antelación.Una vez en la clínica se encontró con Víctor y sintió que algo se removió en su interior, era la primera vez que sentía celos, pero además que quería proteger a una mujer tanto como lo hacía con Christine, sin embargo, sabía que debía ser profesional y separar sus emociones del trabajo.Luego que terminaron una cesárea y que evaluó a la criatura y cuando estuvo conforme que él bebe estaba en óptimas condiciones y que no lo ocuparían por el momento, se acercó al anestesiólogo. — Víctor por favor necesito hablarte en la oficina unos minutos. — De acuerdo jefe.Cuando llegaron al lugar Víctor tomó asiento mientras Luis cerraba la puerta, — Seré breve, creo que ambos estamos ocupados. — Está bien, ¿usted dirá? — Nunca he sido partidario de escuchar comentarios de pasillos ni entrometerme en lo que lo
Mientras Luis lee el informe no lo puede creer, Gabriela aquel día fatídico en que él le dio la espalda debió atravesar un accidente donde su padre, aquel señor que conoció defendiéndola, murió de manera instantánea en un accidente en el cual el conductor del auto que les había arrollado se dio a la fuga y jamás encontraron el culpable..Con razón lo odiaba, seguramente pensaba que de no estar allí en ese momento su padre estaría con vida y de hecho podía que fuera cierto.Es decir que era otra culpa con la cual cargar, vio las fotos y le pareció terrible pero además había artículos de periódico donde explicaban que la chica estaba gravemente herida, contaba con pronóstico reservado, lo cual quería decir que paso por mucho, no podía ni imaginar lo duro que pudo ser para ella perder tantas cosas en un día.Intento recordar los eventos de esa noche, pero no recuerda escuchar las sirenas ni enterarse de nada, sabía que llovía y nada más pues no solo estaba aletargado por el dolor que sin
Después de analizar un poco la situación Luis se da cuenta de que quiere conocer un poco más del niño que presiente su hijo antes de explotar la bomba de dar a conocer que se ha enterado, en primer lugar, quiere tomar una muestra de ADN para estar seguros y no quiere alertar a su abuela quién es su cuidadora por el momento.Así que se le ocurrió pedirles la oportunidad de hacer una breve excursión a la clínica a modo de incentivarlos a estudiar la carrera y luego llevarlos a almorzar a el grupo de niños, su maestra y directora, pero sería al día siguiente para contar con el consentimiento de los padres.Aquel plan sería exitoso si lograba sacar a Gabriela de allí por el transcurso de la mañana para que no se inquietara, lo primero que hizo al llegar fue pedir información a su secretaria de su agenda y tenía justamente exposición de casos desde las 9 a las 11, así que esa era su cortina de tiempo.Ya había resuelto la primera parte del plan así que solo hacía falta la aprobación del co
La mañana comienza con la rutina habitual, afortunadamente hay buen clima en Londres así que el plan va bien, aunque Luis siente la ansiedad a flor de piel pues además de Olivia es el único que sabe que trama con la visita de los niños a la clínica, llega temprano y de inmediato se dirige al área de gestión social. — Buenos días, doctor. — Buen día, ¿todo está preparado para la visita guiada del día de hoy? — , pregunto con seriedad. — Si no se preocupe, ya el transporte esta frente a la institución en este momento, el salón grande de reuniones fue decorado para ellos y el servicio de catering debe estar por llegar con los refrigerios, los obsequios ya se encuentran allí. — Bien, entonces falta aproximadamente una hora, me avisa cuando salgan de la institución y sé que usted es la jefa del área, pero quiero que se encargue personalmente por velar que todo salga bien, no debe existir ningún error, esos niños están bajo mi responsabilidad y la de esta clínica. — Así será señor — ,
El almuerzo transcurrió sin ninguna eventualidad todos disfrutaron y en especial los niños quienes además contaron con un parque donde divertirse un poco más.Luis miraba a sus hijos interactuar y no lo podía creer, era la fuerza del destino quien los juntos y ellos habían tenido una conexión de inmediato.Podía mirar a Harry de cerca sin reservas lo cual le generó gran felicidad, era cierto que no podía irrumpir en la vida del niño ni tampoco pensar en recuperar el tiempo, pero al menos podía tratar de acercarse a él, ser su amigo. — Dime Harry, ¿Te gustan las papas fritas? — Sí, aunque mi forma favorita de comerlas es en puré — , igual que a él, pensó. — Cuéntame y ¿Qué más te gusta comer? — Tarta de Manzana, estofado, hay tantas cosas que me gustan. — ¿Quién te gusta más como cocina, mamá o la abuela? — Ambas cocinan rico, pero mi mama lo hace mejor. — ¿Dijiste que vienes de Irlanda?, ¿verdad? — Si. — ¿Y te gusta más aquí o allá? — , sabía que la ser un niño pequeño no pod