Cristal tenía una vida normal hasta que descubre que los cinco chicos más populares de su escuela son realmente hombres lobo infiltrados con la misión de encontrar el amor en su ciudad. Los cinco venían de un país de licántropos en guerra con otros seres sobrenaturales, y uno de ellos, el líder, era Darien, el actual príncipe de toda la raza de hombres lobo. Darien le pide ayuda a Cristal para ayudar a los otros cuatro a encontrar el amor, pero él no contaba con que esa simple humana podría llegar a enamorar no solo a varios de sus súbditos, sino también a él, que pronto anhelaría con todo su ser convertirla en su reina.
Leer másCon miles de pensamientos tanto de preocupación como alegría y miedo dando vueltas por su mente, cerró los ojos y dejó que el sueño la venciera. Sin embargo, no duró mucho tiempo dormida hasta que el sonido de su ventana abrirse la despertó.Abrió los ojos con pesadez, sin sorprenderse al ver que se trataba de su novio de cabellos blancos irrumpiendo en su habitación a la una de la madrugada como si fuera lo más normal del mundo. Estaba enojada porque interrumpiera su sueño, pero cualquier rastro de furia se desvaneció cuando se sentó a su lado y besó suavemente su frente.—Feliz cumpleaños.— se metió bajo las sábanas y se recostó junto a ella envolviendo su cintura con sus brazos. —¿Sí lo dije bien, verdad? Nunca entendí por qué los cumpleaños aquí son tan importantes —comentó en tono pensativo.Ella soltó una risita y se frotó los ojos para acabar con los restos de sueño. Envolvió sus brazos pasándolos por su nuca para enterrar sus manos en su cabello y darle un pequeño besito que f
Cristal llegó a su casa a tiempo para ayudar a su hermana y a Lucia a preparar la cena ya que Ivan vendría y traería a sus niñas, Jim también vendría pero por desgracia Darien estaba demasiado ocupado como para venir, para decepción de Sara y el viejo. La cena fue tranquila y emotiva, pese a las discusiones de su padre y su hermano y su hermano con Lucia y las niñas con su hermano por meterse con Lucia y… en fin, su hermano era un peleonero, pero aun así fue relativamente pacifico para los estándares de la familia. Sara no dejó de llorar sobre ella y su hermano también le dedicó unas cuantas palabras. Pudo ver un acercamiento más profundo entre Ariana y Giselle con la chica loba, para los celos de su hermano que no había podido evitar que empiecen a verla como una figura materna. Su padre seguía insistiendo en que los dos debían casarse.Jim parecía finalmente haber abierto los ojos y por fin prestarle la atención que merecía su hermana, los dos se veían asquerosamente enamorados, y
—Bien, de acuerdo.— se removió nerviosamente. –Umm… Realmente no los conozco desde hace mucho, y lo primero que quisiera decir es que me gustaría haberlos conocido desde hace más tiempo. Solo han sido tres meses y aún hay muchísimo que quiero averiguar sobre cada uno.— eso incluido su novio excesivamente reservado. —Lo segundo que quiero decir es que… sé que ustedes probablemente han pensado en más de una ocasión que yo no debería haberme involucrado en su causa, pero a pesar de que un vampiro casi me mata como Silver tan amablemente señaló.— todos fulminaron con la mirada al menor, que rodó los ojos. –Y a pesar de que tuve que mentir a mi familia, tener un novio falso y planear tácticas románticas, cosas que nunca pensé que haría, quiero que sepan que no me arrepiento de nada y nunca lo haré.— les dedicó una gran sonrisa.—¡Aw, Cristal!— chilló Joe lanzándose junto con Bryan a abrazarla con Darien aun sujetándola de la cintura, quedando en un incómodo abrazo los cuatro al que Silver
Después de clases, los chicos del aún no disuelto quinteto organizaron una salida para pasar algún tiempo de calidad juntos en el parque, por lo que ella decidió ir con ellos y al poco tiempo Cinthya y su hija se sumaron.—Cielos, no puedo creer que un idiota como Bryan realmente haya podido tener una hija tan adorable.— Joe se rascó la cabeza confundido mientras veía al pelirrojo y a la rubia ayudar a Minnie a columpiarse más alto y más alto mientras ella chillaba de alegría.—No puedo creer que haya sido el primero en completar la misión.— Silver hizo una mueca de desagrado. –Aunque solo un idiota como él podría haber completado su misión en el primer año y ni siquiera saberlo.— rodó los ojos antes de volver a su videojuego.—No lo sé, yo podría tener un par de hijos por ahí, también.— Joe sonrió engreídamente, solo para que Cristal le dé una palmada en la cabeza. —¡Auch, oye! ¡Solo bromeaba!— se frotó la zona afectada con lágrimas en los ojos.—Par de estúpidos, no puedo creer que
En tan solo pocos días su vida cambiaría totalmente, pero no solo su vida, eso Cristal lo sabía muy bien. La vida en su casa acababa de cambiar con la repentina y sorpresiva llegada de la teniente mujer lobo llamada Lucia y pronto cambiaria aún más cuando ella se marchara a otro país abandonándolos para cumplir la misión que ella sentía era su responsabilidad y así ayudar al hombre lobo sobre natural que amaba a pesar de que él no la amaba de igual forma. Su padre se quedaría sin quien lo controle con sus locuras, su hermana gemela sin su otra mitad, su hermano sin quien le diga cuando está siendo un idiota e incluso extrañaría a Joe y Silver, quienes ya no tendrían a quien los forzara para que salieran (o no salieran) con chicas. Lucía estaría para suplantarla en su hogar y como mujer en el equipo que ya no era más un quinteto, pero sabía que la echarían de menos tanto como ella a este montón de idiotas que amaba.Iría a otro país muy distinto para estar con el dueño de su corazón,
—¿Hablaras de una vez, hermano?— finalmente se impacientó, haciéndolo suspirar.—Cristal, ¿por qué no me consultaste respecto a tu viaje? ¡No puedes esperar que acepte que te vayas así como así!— la miró frustrado.—No es tu decisión, hablé con papá y él me lo permitió. Y no soy estúpida, sé cuidarme.— torció los labios. –Además, quise contártelo el mismo día que se lo conté a papá, pero no quisiste escuchar y me cortaste.— lo miró rencorosa, regocijándose por su mirada culpable.—De acuerdo, lo siento por eso. Estaba molesto, aún lo estoy.— se frotó la nuca. –Pero, Cristal… Eres muy joven para alejarte tanto de casa por tanto tiempo.— de repente su expresión cambió a una que dejaba notar su absoluta preocupación. –Y Sara me dijo que ni siquiera serás capaz de llamar todos los días. ¿Cómo esperas que esté bien con eso?— refunfuñó bufando.—Ivan, yo…— debo hacer esto, quiero ayudar a la causa de una especie sobre natural, me voy a otro país y amo a un hombre lobo. —Yo siento que esta
Abrió sus ojos con horror y tomó los hombros de Darien para intentar quitárselo de encima, pero él seguía demasiado absorto en su tarea de chupar su cuello y apretar sus pechos mientras ahora prácticamente se la cogía por encima de la ropa, por lo que tuvo que recurrir a medidas más drásticas.Retirando la mano que había estado cubriendo su boca, tomó impulso y de un brusco movimiento apretó sus dientes fuertemente en la mejilla, mordiéndolo despiadadamente hasta que por fin sintió sus movimientos parar y su cuerpo alejarse del suyo.—¡AUCH! ¡Maldita sea, Cristal!— se quejó y entonces los pasos se apresuraron a llegar hasta su habitación, pero afortunadamente el seguro impidió que los cacharan en su estado actual, con sus cabellos revueltos, las ropas desacomodadas, la respiración totalmente fuera de control y la evidente erección del chico casi haciendo estallar su bragueta.—¡Cristal! ¡¿Todo está bien allí dentro?!— llegó la preocupada voz de su gemela desde el otro lado.—¡Sí, sí,
Al llegar la hora de la salida, Darien insistió en acompañarla a casa, por lo que el quinteto se fue por un camino separado al de su líder. Él la tomó de la mano mientras caminaban un poco por detrás de Sara acompañada de Jim, ellos también tomados de la mano.—Cristal.— el albino repentinamente la llamó, sacándola de sus pensamientos. Ella lo miró inquisitiva. –He logrado obtener un poco de tiempo libre hoy así que me preguntaba sí… umm… ¿estaría bien que me quedé a cenar en tu casa? —Ella de inmediato soltó su mano, mirándolo con sus ojos oscuros muy amplios.Le frunció el ceño, preguntándose si esto tendría algo que ver con que el otro día había mandado al diablo su invitación. Abrió la boca para responderle que podía irse al infierno, pero en ese momento Sara (que obviamente había estado espiando su conversación) se volteó a ellos prácticamente saltando a tomar las manos de Darien y brincando en su lugar.—¡Por supuesto, por supuesto, Darien! ¡Será un honor tenerte en casa para la
Listo, lo soltó. Le preguntó si la amaba. Estaba hecho. Mantuvo la cabeza gacha en espera de una respuesta, animándose a dirigir su mirada hacia el chico cuando esta se demoró demasiado en llegar, tanto que el miedo ahora había aumentado al punto de casi parecer querer tragársela viva. Darien la miraba intensamente, casi como si estuviera tratando de adivinar sus intenciones tras esa pregunta, pero luego su mirada cambió a una más reflexiva, dando a entender que estaba pensando cuidadosamente en qué responder. Sea cual fuera su respuesta, sería pura sinceridad.—Cristal, yo te apreció.— finalmente contestó con la más seria de sus miradas.Cristal sintió su corazón resquebrajarse y caer en el más oscuros de los pozos de la decepción.¿Aprecio? ¿Eso era todo lo que sentía por ella aparte de atracción física? ¡Era menos que un te quiero y apenas poco más que un me gustas! Y se sentía mil veces más doloroso. Pero de alguna forma, sabía que debía haberlo estado esperando. ¿Por qué creyó