No hay batalla ganada si no hay guerrero dispuesto a vencer sus propios miedos.
Suelto una exhalación antes de que las puertas de la mansión Gomert se abran. Hace un buen tiempo que no veía a mis suegros y ahora estamos aquí para anunciarle la llegada de un nuevo integrante a la familia.
Ya era la hora de que lo supiesen no podíamos seguir ocultándolo para siempre. Mat está nervioso, incluso no ha dejado de abrir y cerrar sus manos, sus ojos me han escaneado varias veces preocupado de que yo estuviese incomoda.
—Cielo todo va a salir bien, no te preocupes —murmuro dándole un poco de fuerzas aunque yo no la tenga. Entramos en la enorme casa de dos plantas, la ama de llaves nos guía hasta la sala de estar, nuestros pasos hace eco al chocar contra el piso de mármol. Al cruzar uno de los salones escuchamos algunas voces, y entre ellas una que reconozco a la perfección.
Amar puede doler, perder lo más valioso es como estar en el infierno en la tierra.MATHEW.Estoy aquí como en el principio. No sé qué paso, solo sé que fue en cuestión de segundos en que mi esposa gritaba con gran dolor, su rostro pálido y enfermizo estaba contraído, sus ojos llorosos, sus manos temblaban mientras gemía de sufrimiento.Era la hora… era la hora del final.HORAS ANTES.Con el tiempo aprenderás a valorar lo que tienes, y quizás la llegada de la pequeña princesa Gomert puede ser un gran cambio para todos nosotros. Sé que la mayoría de mi familia no quiere o mejor dicho aceptan a mi esposa. Razones, “no viene de una familia adinerada”. Mi Hermana por otro lado ha estado intentando interactuar y conocerla quizás al fin deje la receptividad y ambas se conviertan en mejores amigas. Esta historia apenas
El mar se ha secado, ya no hay luz, ella se ha apagado.El corazón es tan poco precioso como el alma divagando en el valle de la oscuridad. Lo supe desde el primer momento pero me negué admitirlo ya era hora y me alegraba haber salvado una vida antes que la mía propia.Le mentí… el cambio porque creyó en mi palabra después de todo y yo no quería que volviera a culpar a un inocente, quería que la amara como me ama, lo único que quise fue asegurar su felicidad aunque mi vida llegara a su fin.Era el momento de unirme a los míos.HORAS ANTES.Por primera vez me sentía contenta, satisfecha y no culpable por haberle mentido a mi esposo y obligado a los doctores a mentirle sobre mi proceso durante estos meses. Él lo ha estado aceptando y eso es suficiente para mí. Por lo menos si no llego a sobrevivir me iré en paz sabiendo que mi hija se
“El amor es la paráfrasis más hermosa, el libro más largo, el fenómeno más poderoso sobre la tierra”.Salgo del auto con mi hija en su portador y la correa de Honey en mi mano. Los tres descendemos por los senderos y las lapidas del cementerio, antes de irme decidí venir a despedirme de mi esposa, por eso traje a nuestra hija conmigo junto a su bebé canino que no ha dejado de aullar lastimosamente cada noche. Él lo sabía, sabía que su dueña se había ido y que no volverá de nuevo.Al llegar a donde se encuentra su tumba, me arrodillo, y dejo el porta bebés en la grama junto a Honey que se ha acostado cerca de la sepultura de su dueña. Limpio las hojas y los pequeños copos de nieve que pintan su lapida y coloco en el jarrón otro ramo de girasoles.—Nunca te lo dije Gabrielle pero a pesar de todo esto, y los m
Pic, Pic, Pic… el sonido del pulsioxímetro resonaba por toda la habitación, mis ojos estaban fijos en el frágil y pálido cuerpo que descansaba allí. Una lágrima resbala por mi rostro, mi labio tiembla, mi corazón late con prisa.No quería, no aceptaba que me dejara. Yo la amaba, yo amaba a la mujer que se encontraba allí, y no saben lo difícil que es verla postrada en una cama, sedada casi sin vida. No era fácil verla de esa manera. Su piel está pálida, sus labios sin color, su cabello negro ya no estaba lo había perdido en el transcurso del tiempo, pero aun así seguía siendo la mujer más hermosa del mundo. Para mí lo es. Mi universo había cambiado cuando la vi por primera vez, ella estaba sentada en su escritorio tecleando en su lacto distraídamente.Ausente, sus ojos estaban vacíos cuando levanto su rostro para atenderme. Yo quería sacarla de la oscuridad, yo quería ser su luz, su guía, pero nunca me dio la oportunidad hasta que le propuse aquel trato.Mi ayuda a cambio de que fuera
“El miedo es algo que relativamente no podemos controlar”.TORONTO TRES AÑOS ANTES.Me levanto por la ensordecedora alarma, hoy era nuevamente lunes, y como la buena empleada que soy me paro a la cinco para estar lista a las seis y llegar justo a las ocho en punto a la empresa Gomert. Peino mi largo y oscuro cabello hacia atrás hasta amarrarlo en lo alto de mi cabeza. Hoy sería un buen día, el pronóstico informaba que haría un buen sol espléndido, así que no era necesario que llevara mi estorboso paraguas y los atosigadores abrigos.Unos tacones altos, una falda de tuvo liza, una blusa blanca manga tres cuarto en conjunto con una chaqueta negra del mismo color que mi falda. Ya completamente lista, me preparo un café y unas tostadas para desayunar. Reviso unos que otros documentos mientras mi desayuno está listo. Respondo algunos gmail, y acomodo los archivos. Después de escuchar el clip de la tostadora, lo coloco en un plato y me siento a comer y tomarme mi café, lo hago con rapidez a
En cada libro hay almas, esas que fueron creadas por un humano cuyos sentidos son locos y aficionados.UN MES DESPUES.MATHEWBajo del Jet, la brisa fresca choca en mi rostro, hacia un buen tiempo que no pisaba Toronto, desde que abrí mi empresa Agroindustria en estados unidos me había mantenido bastante ocupado. Estos dos años fueron duros pero pude construir mi propio imperio empresarial sin necesidad de la ayuda de mi padre. Ahora era diferente, él quiere que yo tome su lugar pero no estoy dispuesto aceptar, por lo que hablare con él sobre el tema y le dejare en claro que no estoy disponible para tomar su puesto aun por mucho que me insista. Que coloque a mi hermano Federico en la presidencia es mejor opción, aparte de estudio rubro de administración, le da gran ventaja para ser un buen empresario.Bajo las escaleras del jet antes de caminar hacia Sergio quien me saluda con una inclinación de cabeza —señor, que gusto volver a verlo —le sonrió, le doy un fuerte abrazo.—¡Igual digo
Recuerda que el mundo es una lucha, y que la lucha es una guerra segura. Aprende a pelear si realmente quieres ganar.TRES AÑOS DESPUES.Tomo una bocanada de aire antes de entrar a la oficina, Mathew está sentado tras de su escritorio tecleando en su lacto ni siquiera alza su vista para mirarme y eso es bastante irrespetuoso de su parte.—¿Señorita Davis que tiene para el día de hoy? —pregunta después de un rato, me quedo completamente quieta parada frente a él. Muerdo mi mejilla interna antes de abrir la lista de cosas que tiene por hacer.—Tiene una videoconferencia con el señor Paul dentro de tres horas, a las doce su padre solicito que se reuniera en el restaurante The One Eighty para discutir sobre los nuevos diseños de marketing. Tiene una reunión con la asamblea dentro de media hora y ya le envié las flores a su nueva conquista —murmuro eso ultimo amargamente. No comprendía porque me dolía, si soy una completa tonta pero que va soy una chica fuerte que no le importa nada más qu
Vénceme con tu espada joven guerrero, entiérrala en mi corazón quítame la vida y líbrame de este dolor.He vencido miles de batallas pero no hay nada más difícil que el amor, uno de los mejores guerreros, ese es cautivador, hermoso, uno que sabe jugar y envolver a sus víctimas, nadie puede contra él.—Estoy lista señor Gomert —mi voz sale apenas audible, él se levanta con sus ojos muy fijos en mí, no me muevo de mi lugar solo lo observo con curiosidad. El hombre es hermoso no lo negare, tiene un porte altivo, arrogante, elegante, caballeroso y sobre todo una sensualidad que haría que cualquier chica se rindiera a sus pies.—Te vez hermosa, preferiría que esta vez dejaras las formalidades conmigo y me tutearas —dice con aquella voz sensual que lo caracteriza. Trago grueso y lo miro estoica.—Usted es mi jefe por lo que… seguiré llamando Sr.Gomert —murmuro seria, él sonríe mostrándome sus parejos dientes blanco, haciendo que mi corazón lata con fuerza y piense que se me saldrá en cualqu