Kirill.-Los idiotas del FBI según mi gente ya no están en Moscú, pero tengo que tomar medidas ya lograron infiltrarse una vez hasta llegar a mí, solo que no esperaban ser traicionados. Hope y yo podríamos volver a la mansión, tengo en mi mano el sedante quiero confiar en ella, sin embargo no fiarme del todo, no puedo permitir que sepa la ubicación exacta de este bunker, por lo menos hasta que sea mi esposa por completo, una vez que quede embarazada volverá aquí.Seguramente me va a odiar, pero debo protegerla y ahora comienzo a entender porque mi padre nos envió a mi madre y a mi lejos, solo pensar que a Hope le pudiera pasar algo me pone los pelos de punta y simplemente no puedo permitirlo, aunque ella no es mi madre, es una guerrera si le enseño a defenderse mantendría a salvo a nuestro heredero. (…)Un grito desgarrador me sobresalto despertándome, me había quedado dormido sobre el escritorio, salí corriendo al escuchar otro grito era Hope, entré en la habitación ella se retorcía
Kirill Volkov. –Nunca me había pesado tanto quitarle la vida a una persona como ahora, soy el líder de la Bratva, jamás me ha temblado el pulso por hacerle pagar a alguien con su vida su traición no sin antes hacerlo pasar por infierno. Pero hoy, así como el día, mi vida se muestra gris al tener que sacrificar al amor de mi vida, la única mujer de la que verdaderamente me he enamorado; si algo no perdono en esta vida es la traición y más si es una persona que me ha tenido rendido a sus pies, limpio cada una de las lágrimas que van cayendo lentamente por mis mejillas, no soy un tipo débil nunca lo he sido y no lo seré ahora cuando mi organización pende de un hilo no voy a perder lo que con tanto esfuerzo mis ancestros, mi abuelo y mi padre construyeron, así no sea la vida que yo haya querido simplemente no voy a caer.— Señor, disculpe, ya está lista –Sé que mi mirada en este momento no es solo la de un hombre herido, es sombría llena de oscuridad tanto que ninguno de mis empleados p
Kirill.-— ¡Señor le juro por lo que más quiera! Yo no les dije nada, yo nunca lo traición… –El retumbar del hierro que se encontraba en mi mano hizo resonar las paredes con el ruido del disparo observó al hombre sentado con la cabeza colgando, mi camisa y mi traje manchados con la sangre de esta rata.Si hay algo que más detesto aparte de los traidores son los que me mienten descaradamente en la cara, no sé ¿Con quién piensan que hablan? ¿O son muy estúpidos para arriesgarse? ¿O de verdad desean conseguir la muerte en mis manos?— ¡Saquen a esta basura de aquí, de inmediato! –Ordeno a mis hombres, todos se apresuran en silencio a mover el cuerpo. –Espero un reporte de lo que dijo esta rata en cinco minutos. Salgo de la celda en el camino voy deshaciéndome de todo el traje, me encuentro a otro de mis hombres y se lo tiro en la cara. — Quémalo esto junto a esa basura –Asiente sin mirarme fijamente, como él todos los que están bajo mi mando no se atreven a verme fijo, me han creado l
Hope.-Llevo más de media hora escuchando el mismo discurso de mi prometido Greg estoy viendo un lado de él que no había conocido desde hace tres años y medio que llevamos juntos.— Hope no quiero una esposa trabajando como agente, cuando nos casemos no quiero que trabajes ese no es el matrimonio que espero –Me reprocha mientras se mete un langostino en la boca, como si lo que me estuviera diciendo es su opinión sobre una película.— Cuando me inscribí lo aceptaste ¿Por qué ahora ese cambio Greg? –Observo como se rasca su cabeza, exasperado, cuando arremeto ate su absurda y machista petición. — ¿Tienes idea de las burlas que he tenido con mi familia, mis amigos? –Lo miro confundida y sorprendida.— No entiendo porque, es una carrera como cualquier otra –Me encojo de hombros bebiendo un sorbo de la copa de vino solo para que me fuerzas para seguir escuchándolo, lo amo, pero estás estupideces no sé de donde vienen. — Es una profesión de hombres Hope y si a eso le sumas que me tendré q
Kirill.-Luego de la tediosa conversación con el líder del consejo estuve conduciendo por las calles de Moscú, observaba mujeres y ninguna era lo suficientemente digna para darme un hijo, además del hecho de que no hubiera alguna que me gustara, tengo mis gustos en mujeres bien plantados, cuerpo curvilíneo, pero bien tonificado para que soporte mis embestidas, cabello negro como el ébano, ojos verdes, labios carnosos, no me gusta variar en mis deleites femeninos, las mujeres en mi opinión con esas características son sensuales y exudan misterio, oscuridad, que me enloquecen, aquí en Rusia solo se ve pura rubia, por lo que mi listado de mujeres casi todas extrajeras ha sido algo limitado; estaciono frente a “Black Roses” mi club privado y el más exclusivo de toda la ciudad. Al entrar el estruendo de la música me revientas los tímpanos observo a cada uno de mis hombres colocados en los puntos estratégicos vigilando cada rincón, me detengo en la barra le hago una seña a Luda para que me
Un Mes Después.-Moscú. –Hope.-No puedo negar que me muero de nervios además de ser mi primera misión no es una cualquiera es estar cara a cara con el hombre que le quitó la vida a mi hermano, observo mi reflejo en el espejo comienzo a sentir nauseas. — ¿Nerviosa? –La agente García me pregunta mirándome fijamente. — Un poco, no es por la misión en sí, es porque no sé si sabré disimular mi odio y desprecio –Pasé días preparándome mentalmente a las mujeres en el FBI nos enseñan a seducir, nuestra sensualidad es el arma más letal con eso en mente me enfoqué debía ser provocativa, rebelde, casi inaccesible una femme fatal a la que Kirill Volkov no pueda resistirse. — Si crees que no puedes hacerlo, solo llámame –Asentí. –Estaré en contacto apenas pueda, no confíes en nadie. — Está bien, estaremos en contacto –Salí del baño del aeropuerto acababa de llegar a Moscú y junto a todo un contingente de agentes para esta operación, solo tenía nueve meses para conseguir un punto débil solo u
Kirill.-Estoy sentado en mi oficina recibiendo los reportes de mis operaciones en Europa, bebiendo un vaso de vodka cuando observo por las cámaras a una hermosa mujer cabello negro liso y largo tiene un flequillo que cubre su frente, su rostro es femenino, bajo la mirada para ver el exquisito cuerpo que adorno el sexy vestido negro.— ¡Que piernas! ¡kakaya krasota zhenshchiny! (Que belleza de mujer) –De inmediato me comunico con el escolta y le ordeno que la deje pasar. Por las cámaras voy observando como camina, sensualidad, elegancia, no es una cualquiera tiene clase, va directamente al bar y comienza a observar todo a su alrededor, me levanto de mi silla y salgo porque necesito verla más de cerca. — Kirill, tengo los reportes de las operaciones en Miami ¿Quieres…— Ahora no Timur –Le pasó por un lado y puedo sentir que me sigue, me detengo en el inicio de las escaleras para seguir observándola. — ¿Quién es ella? –Pregunta mi segundo al mando al encontrar lo que captó mi atenci
Hope.-El desprecio y el odio que siento por este hombre es lo que me está dando la fortaleza para seguir teniéndolo cerca y respirar el mismo aire que él, observo su oficina elegante y varonil, una pared llena con pantallas desde aquí se puede ver cada rincón del club, así que obvio que me vio llegar y fue él quien me dio acceso. — ¿Y bien cuál es tu invitación? –Me giro apoyándome en su escritorio trato de ser coqueta aunque no tanto, me mira como si intentara descubrir algo no quiero que piense que quiero meterme en su cama y no sé qué hare para evitar ese momento. — Más que una invitación es una propuesta créeme que puedo recompensarte muy bien –Veo como se quita el saco colocándolo sobre el sofá negro de la esquina los músculos de sus brazos se pegan a su camisa dejándolos bien marcados, trago grueso y desvío la mirada. — Suena interesante, puedo escuchar aunque no significa que aceptaré –Se para frente a mi llevándose la camisa negra hasta los codos, presto atención a sus tat