— Papa, ¿querías hablar con mi hermano y conmigo? — preguntó Kevin, el hijo mayor de Mason Miller, cuando abrió la puerta del despacho de su padre— Sí hijos, pasar los dos y por favor sentaros,--- dijo Mason que estaba sentando en su gran sillón detrás de la mesa de su despacho— ¿De qué quieres hablarnos? tengo una cita con una preciosa mujer y ya llego tarde — dijo Liam el hijo pequeño— De eso mismo Liam de mujeres, voy a delegar la dirección de la empresa a uno de vosotros dos, aunque teneis la mayoria de mis acciones, solo uno de los dos tendrá la dirección — les comentó su padre— Yo creo que deberías delegar por el mayor y el subdirector que soy yo, ¿no te parece padre? — dijo Kevin— No Kevin, no por eso te lo debo dar a ti, ya que hay una condición para que os ceda la presidencia y ninguno de los dos la cumplis, para sustituirme a mí, uno de los dos debe de tener por lo menos un heredero que biológicamente sea suyo, solo asi podreis estar al frente de la empresa y no os qued
EN UN CLUB— Hola chicas ¿estais solas? — dijo un hombre cuando se acercó él y sus amigos a un grupo de tres chicas que estaban sentadas tomándose una bebida y hablando de sus cosas— Hola, si estamos solas, — dijo la chica siendo amables con los desconocidos— ¿Nos podemos sentar con vosotras? Yo me llamo Kevin, y mis amigos Billi y Mario, — dijo Kevin intentando ser simpático con las tres chicas— Solo, si nos invitáis a una ronda,--- dijo una de las chicas— Eso está hecho, ¿que estabais tomando? pero decirnos como os llamais, ya que mi amigo os ha dicho nuestros nombres — dijo Billi— Yo me llamo Lorena, y mis amigas se llaman Melody y Bianca, por cierto estábamos tomando mis amigas y yo unos Cosmopolitan — dijo Lorena, riendo las tres chicas — ¿Qué os parece si en vez de cosmopolitan, pedimos champagne? — dijo Mario— Vale, si pagais vosotros — respondió Bianca.La noche prometía divertida, los seis bebieron no dos sino tres botellas del mejor champagne que había en el club, —
KEVINCuando me desperté al tocar la alarma de mi despertador, acaricie las sabanas donde se quedó dormida Lorena sorprendiéndome al ver que estaba completamente solo en la cama, ya que todas las mujeres que me he llevado a la cama las he tenido que echar de mi casa, pero cortésmente claro, me considero todo un caballero, pero con Lorena me sentía distinto, era la mujer perfecta para que engendrara un hijo mio. Me levanté de la cama, me puse unos pantalones de chándal, y me fui a buscarla creyendo que estaba en la cocina, pero no, yo estaba solo en mi casa, así que me duche, me vesti, me prepare un café y cuando ya me lo tome, cogi las llaves de mi casa y de mi coche marchandome de mi casa hacia mi empresa.— Buenos días señor Miller — me dijo mi secretaria cuando iba a entrar en mi despacho— Buenos días Catalina, dígale a Mario que necesito verlo urgente — le respondíAbri mi ordenador, saque de los cajones los documentos que tenía que revisar, viendo a mi amigo Mario entrar por la
Erik apretó su cuerpo con el mio, empotrando con los azulejos de la ducha mi cuerpo, pero yo no estaba por complacer, pensé que con Kevin fue solo una noche, pero me quede muy marcada con sus apasionados besos y sus suaves caricias y Erik era un poco más brusco en lo referente al hacerme el amor, pero para que mi marido no pensara nada y no se enfadara, deje que sus manos recorrieran mi cuerpo, haciéndome cerrar los ojos y gemir de placer, pero las imágenes que iban y venían en mi mente, era siempre él, era Kevin. Después de cenar, mi esposo se marchó a su despacho a leer unos documentos, mientras yo recogía la mesa y ordenaba la cocina, sentandome después en el sofá del salón para ver un rato la televisión, hasta que la melodía de mi movil empezo a sonar, lo cogi de encima de la mesita viendo que era mi amiga Bianca y contesté enseguida— Hola puton, te he visto hablando en el parking del hospital con Kevin — me dijo haciendo que me riera— La verdad es que me ha sorprendido verlo al
Abri la puerta de mi coche, marchandome de aquel lugar hacia la casa donde vivían mis padres, aparque el coche y bajando de él me pude dar cuenta de que el mercedes de Kevin estaba aparcado enfrente de la casa de mi madre, bajando Kevin de su coche acercándose a mi— Lorena por favor, no quería que te molestaras, ¿podemos ir a mi casa y hablar? — me preguntó— Kevin es que es una locura, no se puede tener un hijo si no se aman los padres para cuidar a ese bebe— le dije— Por favor Lorena, no te molestare mas, por favor vamos a mi casa y hablemos — me dijo, hipnotizandome sus preciosos ojos azulesSubimos a su coche los dos marchandonos de allí, cuando llegamos a su casa, Kevin sacó dos copas y una botella de vino, sirviendo en las dos copas aquel líquido, ofreciendo una a mi, pero nos quedamos mirándonos a los ojos haciendo que mi cuerpo respondiera a la caricia que Kevin me dio en mi mejilla con sus dedos. Nos tumbamos en su gran sofá, besandonos, acariciandonos y comiéndonos nuest
Abri la puerta del dormitorio, quedando inerte al ver a mi marido y una mujer que era desconocida para mí, desnudos y en una postura que claramente se notaba que estaban follando en mi cama, sorprendiendose mi marido al verme inmovil en la misma puerta de mi dormitorio — Hola Lorena cariño, ¿has vuelto pronto, quieres unirte a nosotros cielo? — me dijo mi marido mientras se acercaba desnudo hacia donde yo me encontraba — Fuera de mi casa, cabron como puedes hacerme esto — le grite Erik, me cogió el brazo con su mano, poniéndola en mi espalda con fuerza mientras me empotraba con la puerta del dormitorio — Por que tu en la cama no sabes moverte y me aburres, aparte de que no satisfaces mis deseos y te aclaro que como se lo digas a alguien, te mandó a tres metros bajo tierra y Lorena cariño, sabes que soy capaz de hacerlo, asi que calladita, y ahora ves a la cocina a prepararme la cena, que tengo hambre ¿entendido? — me dijo gritándome — Si te he entendido — le dije tartamudeando, ya
— Lorena, ¿dónde estás? — me pareció escuchar a Bianca una de mis amigas llamándome, pero, aunque quise gritar ya no tenía fuerzas para responder — Está aquí, correr está herida — escuche a Bianca gritar a mi lado, intentando ayudarme — Lorena ¿Qué ha pasado? Soy Kevin, dime algo ¿Quién te ha hecho esto? — preguntó — No lo sé, ayúdame por favor a levantarme— le dije intentando levantarme — Tranquila ya viene una ambulancia — me dijo Una vez que ya estaba en el hospital, me hicieron toda clase de pruebas, poniéndome un gotero con un sedante, entrando Kevin en la habitación con un agente de la policía de Miami cuando el médico se marchó —- ¿Qué te ha pasado?¿te acuerdas de algo? — me pregunto Kevin— Estaba todo oscuro y tenían un pasamontañas en la cabeza — le dije poniéndome a llorar, abrazándome a él.— Está bien Lorena tranquila, pero si te acuerdas de algo más por favor, llamanos — me dijo el policía que se llamaba Gino Me dieron el alta en la clínica y fueron los chicos qui
Después de darme las recetas con varios medicamentos, nos fuimos de la clínica sintiéndome peor de cómo había entrado, preguntándome cómo se lo diría a Erik. — Es de Kevin ¿verdad? — me preguntó mi amiga — No sé qué voy a hacer Bianca, como se lo digo a Erik cuando vuelva de su viaje — le dije llorando — Vamos a tomarnos un zumo y ya encontraremos alguna solución, sabes que a Melodie y a mí nos tienes para lo que necesites — me dijo Seguí ocultando mis vómitos a mis padres, ya que al quedarme sola en casa porque mi marido se marchó de viaje por negocios, decidí marcharme a la casa de mis padres hasta que mi marido volviera de su viaje, porque no quería que se preocupan por mí,pero, mi madre me vio en el baño una mañana, haciéndome después cientos de preguntas . — Mama son los nervios, no te preocupes por mi — le dije — Lorena solo quiero saber una cosa hija, ¿estás embarazada? — preguntó — No mama y por ahora no entra en los planes de Erik y mío, tranquilízate por favor