¿Teorías para esta nueva fase? Ahora si todo lo que se adelantó en la historia de Anthony lo veremos vuelto una realidad. ¿Saben a lo que me refiero? Leo sus comentarios.
KaelMoverme por las calles de Manhattan en medio de una noche con festivales no era lo más fácil que hacía, menos cuando la sangre goteaba desde mi camisa. No era la primera vez que debía estar atento a todo lo que me rodeaba, pero sí era la primera ocasión en la que no solo me buscaban mis objetivos, sino también el mismo FBI.Calderón había muerto, era lo único que mi cabeza repetía y seguía reproduciendo como un acto que me reiteraba que estaba solo.Tenía que salir de las calles, pero no podía hacerlo aún, no cuando no estaba seguro de que podía hacerlo en un sitio donde podían encontrarme.Me detuve unos segundos para recuperar el aliento, atento a cada susurro y palabra salida de quienes me rodeaban. Varios transeúntes se detuvieron cuando el canal de noticias más importante de la nación comenzó con su aviso de noticia de último minuto.Las pantallas de los televisores en una de las tiendas reflejaban el boletín de última hora, donde la noticia de la muerte de Terry se mostrab
Lina. Mi cuerpo jamás había dolido tanto como cuando me quité la ropa frente al espejo. Las magulladuras en mi rostro no eran nada comparadas con lo que vi al retirar mi camisa. Los moretones se extendían por mi torso, formando un mosaico de colores rojo, oscuros y dolorosos. Cada respiración era un recordatorio punzante de los golpes recibidos. Mis costillas protestaban con cada movimiento, y un corte levemente profundo en mi costado aún sangraba lentamente. Me apoyé en el lavabo, dejando que el frío del mármol me diera un poco de alivio. Cerré los ojos por un momento, tratando de bloquear el dolor y la imagen de mi cuerpo maltratado. Pero no podía ignorarlo. Masajeé mi barbilla con cuidado. Temí que me hubiese fracturado la mandíbula cuando el dolor en esa zona lo indicaba, pero luego de una revisión exhaustiva de parte de Gálata, me quitó el peso al decir que no. Aunque de solo recordar que algún idiota se le ocurrió llamar justo cuando tenía el gel anestésico en las
LinaMi madre no se me separó en toda la noche. Todos tenían asuntos para resolver y yo solo debía reponerme cuando acepté el bendito suero.Mi cuñada se sentó con ese hermoso vestido de maternidad que la hacía ver adorable. Debía descansar también, pero no se detenía ni porque tuviera a los doble impacto que estaban a pocas semanas de nacer. Mi abuela nos acercó un vaso de leche a cada una, con un plato con galletas que casi devoré. Había comido un poco cuando el efecto del gel se había pasado, pero se me dificultó y cuando lo estaba logrando…Un inoportuno haciendo de las suyas. El olor a frutas en la crema relajante que Génesis me regaló me encantó, verlas a todas pendientes de mí me hizo sentir fuerte de alguna forma. Avery siendo la encargada de darme un masaje, acabó con el malestar llegada la madrugada. El brazo aún dolía debido a la aguja que tuve que aceptar que me clavaran en ese lugar. El tiempo era contado. No teníamos la facilidad de hacerlo de otra manera, pero el bene
La audiencia preliminar de la fiscalía y la defensa frente al juez se había logrado, luego de tomar medidas y hacer uso de las influencias de la parte defensora, ya que estaba solo a su cargo. Los Crown aceptaron ese designio y no pensaban incumplir con el deseo de Lina por dejarles solo la parte no legal. Uno tenía un extenso historial con casos ganados y el otro, aunque más joven, era conocido por su tenacidad y habilidades investigativas excepcionales. La combinación de ambos en este caso prometía ser una batalla legal intensa. Mientras tanto Lina tomó la decisión de que dormir era la mejor opción. No iba a saber nada hasta que el abogado regresara y no se quedaría a ver la pared o los barrotes todas esa horas. Confiaba en que el sujeto de cabello de póster de shampoo masculino, tenía lo suficiente para lograr sacarla antes de tiempo. —Señor juez, las pruebas en contra de la acusada son contundentes. —remitió la fiscal Montenegro. —Tenemos el arma homicida con sus huellas dact
Lina se debatía entre sus pensamientos y sus emociones. Tenía que tener control en ambos casos, pero era imposible cuando ambos se dirigían al mismo tema. Las molestias físicas estaban aminorando, pero las mentales no parecían estar dispuestas a ceder. Estar encerrada no le ayudaba en nada, pues estaba a solas con su mente que había adoptado el papel de torturador, trayendo consigo recuerdos que no quería necesitar, pero que de algún modo, tenían ese alivio que la anclaban a la realidad. No era la única con ese problema. Aún estando sedado, el Mayor tenía frente a él esa sensación de un vacío enorme y un frío extraño, que le achacó a dolor por las heridas. Un susurro con una risa suave lo hizo abrir los ojos, manteniéndose en la misma posición en la cama, donde la pared fría era un recordatorio de lo que hacía falta en ese lugar. Soltó el aire, pegando la palma a la pared, recibiendo esa ola helada por todo su cuerpo. Lina por su parte alejó la mano de la pared al darse cuenta de
Kael. La idea de llamar de nuevo me rondaba mucho más fuerte cada vez, pero me repetí que se encontraba bien para no joderme la existencia yo solo. Había escuchado su voz. Estaba bien. De seguro en casa de sus padres o con la cabra loca que tenía como prima. No debía importarme tanto.Sacudí el cabello para quitar el exceso, mientras buscaba algo para secar alrededor de la herida antes de cubrirla. De seguro me buscaban por todos lados, por lo que tuve que hacer todo desde casa.Deslicé el paño húmedo por la zona que aún ardía al tocarla. La piel tenía un color rojo que cubrí con las vendas luego de cubrirla con gel. No me quedaría en la cama más tiempo como lo insinuó la mujer que me sacó las balas. Tenía que ponerme al corriente de lo que sucedía, encontrar a Cameron, poner en un lugar seguro a Asli y Moira, buscar a Ferguson, padre e hijos, cortarle la lengua a Warren y arrancar la cabeza de Bora. Pasé la remera oscura por mi cabeza, asegurándome que no quedara a la vista el v
Kael.Toda la noche me la pasé ubicando a los Ferguson para iniciar por ellos. Para la mañana el cansancio me estaba venciendo por lo que tuve que dormir unas cuantas horas, estando de pie a medio día nuevamente para enfocarme en lo mismo. Llamé al número de nuevo, aunque me indicó que estaba apagado. Tenía que dejar de pensar en ella. Aunque me era algo difícil cuando hasta en los sueños se me colaba la infeliz. Necesitaba tocarla. Follarla y quitarme esa idea de arrancarle cada suspiro para tenerlos para mí. No era normal que la pensara tanto. No era algo muy de mi parte que quisiera tenerla sobre mí, peleando por todo y haciéndome esas caras inocentes que solo me hacían sucumbir ante el deseo de comerle la boquita tan deliciosa que tenía. Quité las fotografías que saltaron al abrir uno de mis archivos, verla solo me reiteraba que tenía poder sobre mí. Qué quería más solo besar esa alma libre que me brindaba algo que nada más lo hacía. Lina siempre tuvo algo que me descolocaba.
Kael.—¿Se puede saber qué fue eso? —abrí el acceso de Brease en la agencia, pues si lo hacía con el mío o el de Terry era dar mi ubicación, en cambio a él no lo buscaban.La voz de Darek me dejó de interesar cuando vi su expediente ser uno de los últimos enviados a agentes de campo para averiguar sobre el asesinato de…Una de las amantes de Nixon.¡Que ridiculez! Mi… Brillitos no tenía motivo para matar las mujeres que Nixon se cogía. Con las veces que me la follé, andar de celosa era lo último que podía estar del marido. El marido…Tener tantas fracturas al parecer no le bastaron. Darek seguía peleando solo, maldiciéndome como si me fuera a interesar, mientras tecleaba accediendo al sistema de Warren. Mis dedos volaban sobre el teclado, ejecutando comandos que había memorizado hace años. La amenaza no le bastó al imbécil.—Te lo advertí, Warren, —murmuré en mi idioma, mientras accedía al sistema bancario. La interfaz de seguridad era robusta, pero no lo suficiente para alguien con m