Lloro mientras pego su rostro junto con el mío.
Mis lágrimas caen en su pecho, una de mis manos pasa a su cabello, me aferro con fuerza a él.
Cierro los ojos y profundizo su fragancia.
—¿De verdad piensas cobrarme tanto?—de pronto escucho como Aarón habla con una voz muy baja.
Abro los ojos y me sorprendo, me reincorporo y él aun está con los ojos cerrados.
—Aarón, Aarón—lo veo fijamente.
Ah vaya creo que alucine, me vuelvo a recostar en su pecho mientras tomo nuevamente su mano y la pego a mi rostro.
—Si te vuelves monja te secuestraré hasta hacernos viejitos los dos—escucho nuevamente la voz de Aarón.
Veo su mano y esta inmóvil.
Me levanto y frunzo los labios.
—¿Tan mal estoy que ahora escucho tu voz?—digo preocupada.
Me volteo un poco para tomar un poco de agua, después volteo hacia Aarón y lo veo con los ojos abiertos, me sorprendo tanto que toda el agua que traigo en la boca sale expulsada, me pongo de pie
Aarón me hace cosquillas, me río a carcajadas mientras toco mi estómago.—A... Aarón..— digo mientras sigo riendo a carcajadas.Aarón deja de hacerme cosquillas para luego verme a los ojos, él está agitado por lo cual solo sonríe después se pone a mi lado y ambos miramos al techo.Aarón toma mi mano y la entrelaza con la de él.—Te amo—dice para luego besar mi mano.—Te amo más, Señor misterio—digo para luego besar su mano.Él de pronto se pone encima de mí y me ve fijamente para luego besar mis labios.Cierro mis ojos para luego profundizar ese beso. A lo lejos escucho mi celular sonar así que enseguida me pongo de pie.Aarón cae a un lado de la cama por lo cual yo solo sonrió.Tomo mi celular el cual está en la mesita de noche y contesto.—Hola Noel—digo mientras miro a Aarón.—Hola Maddie, mira lo que pasa es que no te quiero interrumpir pero tienes que venir, la señora Ágata se volvió loca, dice que tú
Hoy estoy en la universidad y sinceramente me resulta lo más aburrido de mi vida, ya que la carrera que quiero mi madre no me deja estudiarla, ella está empeñada en que debo ser abogada.Estoy comiendo una ensalada, estoy sola sentada en las últimas bancas que hay en la universidad, aunque tenga algunas amigas a mí alrededor, a veces necesito estar un poco sola conmigo misma. Mientras mastico un poco la ensalada tomo mi celular y lo primero que veo en mis redes sociales son las fotos que mi madre se ha tomado en Bali, claro para ella estar lo más lejos de mi es lo ideal, aun no entiendo como mis padres se atrevieron a tenerme si al fin de cuentas ellos dos se iban a divorciar, ahora mi madre es la típica mujer soltera codiciada de todo el país, la Reyna de las editoriales y mi padre el hombre más importante del país y eso es por su empresa de aplicaciones.Mientras que yo su hija ante sus ojos, solo soy una chiflada, rebelde y mal portada. De
—Mamá por favor, no es necesario ponerme a un tipo así como ese —volteo a mirar al guardaespaldas y le hago mala cara.—No te estoy preguntando, es una orden, Aarón se quedara como tu guardaespaldas así que conózcanse —me mira con desprecio y se va.—Hola, soy Aarón Braun —me extiende la mano.—No me interesa como te llames porque muy pronto haré que largues—lo miro con desprecio y me largo.Entro a mi recamara, me siento en la cama, a decir verdad debo aceptar que el guardaespaldas es muy guapo, tiene unos ojos muy cools , pelo negro, alto de cuerpo fornido y unos labios deseables nada mal para un pasatiempo pero no, ese no es mi objetivo mi objetivo es sacarlo de mi casa y de mi vida no puedo permitir que nadie me cuide los pasos.Después de algunos horas me levanto de la cama y me dirijo al baño permanezco por unos largos minutos hasta que estoy por salir, sin embargo de pronto se escuchan ruidos, tomo mi bata y me la pongo para
Pero aun así no puedo dejarme doblegarme por él.—Vamos a mi casa, tengo mucho sueño—me pongo de pie.—Deje llamar señorita, espere por favor—me pide que me siente en su estúpida moto.Él habla por celular mientras da unas vueltas y después se devuelve hacia mí.—Lo siento señorita, no podremos regresar hasta más tarde aún hay peligro.—¿Y mi mamá y mi Nana? —pregunto preocupada..—Ellas están en un hotel cerca de su casa, ya fueron evacuadas, con el que me comunique fue con el chófer —me explica—Tendremos que esperar un poco más—me observa fijamente.Ni siquiera le contesto, solo me voy a sentar en una piedra enorme, que está frente a mí, maldita sea esta bata de baño me está matando de frio, así que cruzo los brazos para darme un poco de calor, de pronto Aarón me pone su saco en la espalda, me quedo quieta mientras lo observo a los ojos a lo que él solo responde con una mirada seria.Es como si el tiempo
—¿Qué pasa? ¿Estás bien? — pregunto desconcertada.En cuanto pregunto eso, él solo se pone de pie y se sale de la casa. De verdad estoy tan confundida sin embargo aun así me pongo unas pantuflas que estaban ahí y salgo detrás de él, lo busco hasta que lo encuentro recargado en un árbol, él aún está respirando agitado, no sé por qué rayos hago esto pero le toco la espalda para luego preguntarle si está bien.—¡Aléjese! No es buen momento—me empuja un poco con su brazo.—¿Por qué? —pregunto confundida.Lo vuelvo a tocar pero ahora del brazo—Te he dicho que te alejes—me aparta.Lo miro aún más desconcertada que antes.—¿Qué te pasa? ¿Qué fue eso? ¿Por qué tus manos estaban en mi cuello? ¿Acaso tú? —no me atrevo ni siquiera a mencionarlo.Él solo traga saliva y nuevamente mira hacia abajo aunque poco después levanta la mirada y me ve fijamente, sus ojos están llorosos y su boca está un poco seca.—No digas tonterías, solo quer
Despierto horas más tarde y lo primero que hago es ir a bañarme, después de arreglarme decido bajar y caminar un poco por la casa. Escucho ruido en el gimnasio así que voy a ver qué sucede, me asomo a la puerta y miro como Aarón ésta haciendo ejercicio. Con esa playera de tirantes se le pueden apreciar sus músculos los cuales están bien definidos claro sin exagerar. Él es como un chico delgado pero con cuerpo fornido, estoy como una tonta observándolo. Las gotas de sudor resbalan por su cuello y su frente lo cual hace que él levante su playera para luego secarse con ella.—¿Guapo no? —menciona de pronto mi nana.Enseguida me doy la vuelta para después tragar saliva.—¡Nana! Yo… yo solo estaba dando la vuelta —me doy la vuelta.—A mí me pareció otra cosa niña—me sonríe.—Deja de ver novelas nana—sonrío nerviosa.—En fin tu comida esta lista, ven vamos a comer —me toma del brazo y me lleva hacia la cocina.Cuando t
—¿Tienes que seguirme? —freno mis pasos.Eso hace que Aarón me empuje un poco con su peso, él de inmediato me toma del brazo y evita que caiga al suelo. Me doy la vuelta y solo observo fijamente mientras mi expresión es sumamente seria.—¿Qué? —pregunta desconcertado.—¿Enserio? —frunzo el ceño.—Lo siento son ordenes, tengo que cuidarla en todos lados —dice seriamente.—Pero no has dormido—digo preocupada.—Eso no es problema para mí, no se preocupe— termina de decir para luego obligarme a caminar junto con él hasta llegar a mi aula de clases.Pero ¿Cómo es que él sabe cuál es? Cuando me doy cuenta de eso, me doy la vuelta y lo miro con preocupación y estoy por preguntarle pero en eso timbra la campana, así que debo entrar a clases.Han pasado algunas horas desde que entré a clases y Aarón aún está parado cerca de la puerta de mi salón de clases, sinceramente no puedo creer que él siga como si nada cuando lo único que ha hecho e
Salgo del coche y dejo a Bruno dentro y me dispongo a seguir a esos idiotas. Ellos suben a la habitación mientras yo los sigo caudalosamente, veo como entran y no puedo creer que el siga haciéndome esto soy una tonta.Pero esto no se va quedar así, a lo lejos veo pasar una recamarera, por lo cual finjo perder mi tarjeta y solo pido que me abra la habitación.La señora engañada con la idea de que yo soy la esposa del tipo que está dentro me abre y se va.Entro a la habitación y veo como René y Estefanía están en la cama, ambos están por consumar lo que vinieron hacer pero enseguida los interrumpo con un aplauso.—Claro, siempre vas detrás de mis sobras pero… Estefanía ¿De verdad tienes que caer tan bajo como para acostarte con René? —pregunto.—Pues sobras o no, él ahora está conmigo, así que lárgate —sonríe burlona.—Sabía que eres mujeriego pero pensé que era porque no tomaba la decisión de estar contigo, todo este tiempo pensé