—Mamá por favor, no es necesario ponerme a un tipo así como ese —volteo a mirar al guardaespaldas y le hago mala cara.
—No te estoy preguntando, es una orden, Aarón se quedara como tu guardaespaldas así que conózcanse —me mira con desprecio y se va.
—Hola, soy Aarón Braun —me extiende la mano.
—No me interesa como te llames porque muy pronto haré que largues—lo miro con desprecio y me largo.
Entro a mi recamara, me siento en la cama, a decir verdad debo aceptar que el guardaespaldas es muy guapo, tiene unos ojos muy cools , pelo negro, alto de cuerpo fornido y unos labios deseables nada mal para un pasatiempo pero no, ese no es mi objetivo mi objetivo es sacarlo de mi casa y de mi vida no puedo permitir que nadie me cuide los pasos.
Después de algunos horas me levanto de la cama y me dirijo al baño permanezco por unos largos minutos hasta que estoy por salir, sin embargo de pronto se escuchan ruidos, tomo mi bata y me la pongo para luego salir con cuidado. Mis pies están demasiado mojados por lo tanto de vez en cuando patinan.
Cuando estoy afuera todo está obscuro me pregunto ¿Cómo es que esta todo obscuro?
De pronto siento como me jalan del brazo, caigo en un regazo el cual es de él estúpido ese ¿Cómo es que dijo que se llama? Ah claro Aarón.
—Guarda silencio—dice de pronto.
Lo único que puedo ver en ese momento son sus labios el reflejo de la lámpara que hay por fuera de la casa da luz justamente en ese lugar, de pronto muerdo mis labios maldita sea si él no hubiera hecho esa señal con sus dedos en sus labios no estaría mordiendo los míos bendito Dios que no le puso barba a este hombre así puedo apreciar esos labios. Reacciono y poco a poco levanto la mirada hacia sus ojos.
¿Pero qué rayos estoy diciendo? Ese tipo insignificante lo único lindo que tiene son sus labios, bueno y sus brazos y sus ojos, maldita sea hasta su pelo con corte como esos chicos asiáticos se le ve genial ¡Rayos! estoy diciendo puras tonterías solo es un chico guapo y ya solo eso y como a mí de ese estilo me sobran él es uno más, así que me desharé de él.
—¿Qué te pasa? —me suelto de su agarre.
Trato de pararme pero él me lo impide.
—¡No! —me vuelve a jalar por lo cual caigo en sus piernas.
—Déjame en paz—le pego en el pecho.
—Señorita mi deber es protegerla —me mira con esa mirada intensa.
—¿Así y de quién o qué? —sueno burlona.
De pronto se escucha como golpean la ventana, volteo y se ven huevos estrellados, de repente se ve como tiran piedras así que eso hace que se estrelle el vidrio.
Él me jala junto con él y me lleva hacia la salida, de pronto él grita ¡Abajo! y cuando volteo veo como una piedra enorme lo golpea en el hombro. Abro mis ojos y me quedo sorprendida de como él solo aprieta los ojos y sacude la cabeza y sigue como si nada.
Me saca de mi recamara y me lleva hacia la sala donde está mi nana y mi madre ambas están aterradas.
—Aarón ¡Sácala de aquí! —grita mi nana a lo lejos.
Aarón me toma de la mano y me obliga a correr por el pasillo junto con él. Me saca por la parte trasera de la casa, cuando estamos ahí, él detiene sus pasos y mira con detenimiento a su alrededor.
—¡Atrás! —grita mientras me hace con su brazo hacia atrás.
Cuando termina de decir eso, salen varios tipos y comienzan a pelear con él. Me agacho y me cubro en la jardinera que hay cerca de la pared de la casa.
Solo veo como él se agarra a golpes con ellos, son demasiados él no va poder, pongo mis manos en mi cabeza mientras veo esa pelea.
De pronto uno de ellos grita “El objetivo” y apunta hacia mí.
Aarón solo voltea a verme y me grita que corra, trato de hacerlo pero uno de esos tipos me toma del brazo y me jala hacía él para luego ponerme un arma en la cabeza.
Estoy muy asustada solo puedo llorar en este momento.
Aarón termina con los otros tipos y solo veo como se regresa hacia donde estoy yo. Mira por un momento a ese tipo, su mirada está muy concentrada.
—Atrás—grita el tipo apuntando Aarón con el arma.
Aarón solo levanta la mirada y lo mira con seriedad y solo sonríe de lado para luego de la nada darle una patada al arma que trae el tipo en la mano y dejarlo desarmado.
Él me libera y continúa peleando con ese tipo hasta dejarlo tirado en el suelo. Aarón me toma de la mano y corre junto conmigo hasta llegar a una moto, me da un casco y me pide que suba.
La verdad me da terror subir a esa moto pero aun así subo y lo abrazo con fuerza mientras cierro los ojos. El conduce hasta llegar a las afueras de la ciudad, me ayuda a bajar y me quita el casco.
—¿Con quién rayos se metió tu familia? —dice seriamente mientras se toca el labio el cual ésta sangrando.
—¿De qué hablas? —pregunto.
—Esos tipos no son haters, los haters solo son una distracción—menciona mientras hace esa mirada intensa.
—No sé de qué hablas, llévame a mi casa, además ¿Cómo sabes todo eso eres policía o que rayos? —frunzo el ceño.
—Para ser escolta personal debes pasar por muchos entrenamientos por lo cual tengo experiencia y no por eso soy policía ah y a tu casa no podemos regresar hasta que haya pasado el peligro, esos tipos te quieren a ti ¿Qué hiciste? —vuelve a preguntar.
—No hice nada más que pelearme con una tipa solo eso—la verdad es que no tiene coherencia todo eso.
—¿De quién es hija? —pregunta.
—Es hija de Mateo Dunker —respondo.
—Dunker, claro—sonríe de lado—Pero ah aún así, algo no cuadra—dice con misterio.
—¿Qué es lo que sabes? —pregunto.
—Por confidencialidad no puedo decir nada, solo te diré algo ya no te metas en problemas con nadie ¿De acuerdo? —me observa con frialdad.
—¿Y quién te crees tú para ordenarme? Y no me tutees igualado —lo miro con descontento.
—Está bien señorita, le responderé yo soy su guardaespaldas y también quién la salvo hace unos momentos—sonríe de lado.
—Tú solo eres un simple empleado nada más —lo reto —Y si me salvaste fue por tu trabajo y por eso te pagan ¿No? Así que no tengo nada que agradecerte Ok.
Él solo sonríe de lado y se pasa la mano por su cabello maldita sea es tan sexi, no puedo mentir más sinceramente no tengo ni la más mínima intención de hacer que él se vaya. A decir verdad él hace muy bien su trabajo y si es verdad que estoy en peligro quien más que él para que me proteja.
Pero aun así no puedo dejarme doblegarme por él.—Vamos a mi casa, tengo mucho sueño—me pongo de pie.—Deje llamar señorita, espere por favor—me pide que me siente en su estúpida moto.Él habla por celular mientras da unas vueltas y después se devuelve hacia mí.—Lo siento señorita, no podremos regresar hasta más tarde aún hay peligro.—¿Y mi mamá y mi Nana? —pregunto preocupada..—Ellas están en un hotel cerca de su casa, ya fueron evacuadas, con el que me comunique fue con el chófer —me explica—Tendremos que esperar un poco más—me observa fijamente.Ni siquiera le contesto, solo me voy a sentar en una piedra enorme, que está frente a mí, maldita sea esta bata de baño me está matando de frio, así que cruzo los brazos para darme un poco de calor, de pronto Aarón me pone su saco en la espalda, me quedo quieta mientras lo observo a los ojos a lo que él solo responde con una mirada seria.Es como si el tiempo
—¿Qué pasa? ¿Estás bien? — pregunto desconcertada.En cuanto pregunto eso, él solo se pone de pie y se sale de la casa. De verdad estoy tan confundida sin embargo aun así me pongo unas pantuflas que estaban ahí y salgo detrás de él, lo busco hasta que lo encuentro recargado en un árbol, él aún está respirando agitado, no sé por qué rayos hago esto pero le toco la espalda para luego preguntarle si está bien.—¡Aléjese! No es buen momento—me empuja un poco con su brazo.—¿Por qué? —pregunto confundida.Lo vuelvo a tocar pero ahora del brazo—Te he dicho que te alejes—me aparta.Lo miro aún más desconcertada que antes.—¿Qué te pasa? ¿Qué fue eso? ¿Por qué tus manos estaban en mi cuello? ¿Acaso tú? —no me atrevo ni siquiera a mencionarlo.Él solo traga saliva y nuevamente mira hacia abajo aunque poco después levanta la mirada y me ve fijamente, sus ojos están llorosos y su boca está un poco seca.—No digas tonterías, solo quer
Despierto horas más tarde y lo primero que hago es ir a bañarme, después de arreglarme decido bajar y caminar un poco por la casa. Escucho ruido en el gimnasio así que voy a ver qué sucede, me asomo a la puerta y miro como Aarón ésta haciendo ejercicio. Con esa playera de tirantes se le pueden apreciar sus músculos los cuales están bien definidos claro sin exagerar. Él es como un chico delgado pero con cuerpo fornido, estoy como una tonta observándolo. Las gotas de sudor resbalan por su cuello y su frente lo cual hace que él levante su playera para luego secarse con ella.—¿Guapo no? —menciona de pronto mi nana.Enseguida me doy la vuelta para después tragar saliva.—¡Nana! Yo… yo solo estaba dando la vuelta —me doy la vuelta.—A mí me pareció otra cosa niña—me sonríe.—Deja de ver novelas nana—sonrío nerviosa.—En fin tu comida esta lista, ven vamos a comer —me toma del brazo y me lleva hacia la cocina.Cuando t
—¿Tienes que seguirme? —freno mis pasos.Eso hace que Aarón me empuje un poco con su peso, él de inmediato me toma del brazo y evita que caiga al suelo. Me doy la vuelta y solo observo fijamente mientras mi expresión es sumamente seria.—¿Qué? —pregunta desconcertado.—¿Enserio? —frunzo el ceño.—Lo siento son ordenes, tengo que cuidarla en todos lados —dice seriamente.—Pero no has dormido—digo preocupada.—Eso no es problema para mí, no se preocupe— termina de decir para luego obligarme a caminar junto con él hasta llegar a mi aula de clases.Pero ¿Cómo es que él sabe cuál es? Cuando me doy cuenta de eso, me doy la vuelta y lo miro con preocupación y estoy por preguntarle pero en eso timbra la campana, así que debo entrar a clases.Han pasado algunas horas desde que entré a clases y Aarón aún está parado cerca de la puerta de mi salón de clases, sinceramente no puedo creer que él siga como si nada cuando lo único que ha hecho e
Salgo del coche y dejo a Bruno dentro y me dispongo a seguir a esos idiotas. Ellos suben a la habitación mientras yo los sigo caudalosamente, veo como entran y no puedo creer que el siga haciéndome esto soy una tonta.Pero esto no se va quedar así, a lo lejos veo pasar una recamarera, por lo cual finjo perder mi tarjeta y solo pido que me abra la habitación.La señora engañada con la idea de que yo soy la esposa del tipo que está dentro me abre y se va.Entro a la habitación y veo como René y Estefanía están en la cama, ambos están por consumar lo que vinieron hacer pero enseguida los interrumpo con un aplauso.—Claro, siempre vas detrás de mis sobras pero… Estefanía ¿De verdad tienes que caer tan bajo como para acostarte con René? —pregunto.—Pues sobras o no, él ahora está conmigo, así que lárgate —sonríe burlona.—Sabía que eres mujeriego pero pensé que era porque no tomaba la decisión de estar contigo, todo este tiempo pensé
Después de decir eso termino dándole una cachetada, la cual le deja marcada la mejilla a René. Lo veo con enojo mientras él se soba la mejilla.—¿Qué te pasa? ¿Estás loca? —menciona Estefanía quien viene caminando con enojo hacia a mí.En cuanto llega me empuja con fuerza haciendo que casi caiga al suelo, lo cual no sucede ya que Aaròn me sostiene.–No me provoques Estefanía, ahora no estoy de humor —digo con molestia.—No me interesa tu humor ¿Estás ardida? Claro como te quite a tu novio, pensaste que jamás sucedería eso pues mira–lo toma del cuello y lo besa frente a mí.Enseguida Aarón, me jala del brazo y me reincorpora en su pectoral, allí me sostiene hasta quita su mano de mi espalda, antes de voltear nuevamente hacia René y Estefanía, miro a Aarón y lo hago de manera sorprendida para luego continuar con lo mío.–Estefanía ¿De verdad crees que besar a mi ex novio te hace mejor? Por favor ubícat
—¿Estás bien? —pregunta asustado mientras me observa fijamente.De pronto me da una risa pero es una risa de nervios, siento mi corazón latir demasiado rapido y solo puedo mirar sus ojos hasta que decido contestar.—Estoy bien, tranquilo—sonrío mientras lo miro nerviosa.Él solo lanza esa pequeña sonrisa que ya es tan parte de él para después ponerse de pie y ayudarme a pararme.—Me encantó tu clase ¿Me puedes seguir enseñando? —le pregunto.—Solo si prometes no usar todo lo aprendido para golpear solo porque sí —dice con seriedad.—Lo prometo—le enseño mi meñique y después tomo el de él para juntarlos.Él separa su mano de la mía y solo pone sus manos en el cinturón del traje que lleva puesto.—Es hora de cambiarnos—dice para luego suspirar y desaparecer de mi vista.Ya listos salimos del lugar pero antes de abordar el coche tomo Aarón del brazo para luego mirarlo a los ojos.—Gracias por ayudarme a
—Si te importará como dices, me llamarías más seguido y no tendria que esperar a mi cumpleaños, si te importará no vendrías a casa solo a discutir y hacerle saber a mí mamà que no te dejarás humillar por ella. Las veces que viniste solo fueron a discutir ¿Que no te das cuenta el daño que me haces? —trago saliva y limpio mis largimas— Pero olvídalo mejor quédate con tu nueva familia papá, tu hijo es mejor hijo que yo—cuelgo la llamada y veo el espejo y tengo tanto coraje que me levanto de la cama y voy a golpearlo unas cuantas veces mientras lloro.De pronto se escucha como entran a mi recamara y me toman de los brazos y me alejan del espejo.Me doy la vuelta y veo que es Aarón ¡Maldita sea! Por qué siempre tengo que llorar frente a él.Lo tomo de su camisa y lo jalo hacia mí y lo abrazo con fuerza me aferro a su cintura y a su pecho. Lloro desconsolada, me duele tanto sentirme así.No dejo de llorar, no puedo dejar de hacerlo, teng