Despierto horas más tarde y lo primero que hago es ir a bañarme, después de arreglarme decido bajar y caminar un poco por la casa. Escucho ruido en el gimnasio así que voy a ver qué sucede, me asomo a la puerta y miro como Aarón ésta haciendo ejercicio. Con esa playera de tirantes se le pueden apreciar sus músculos los cuales están bien definidos claro sin exagerar. Él es como un chico delgado pero con cuerpo fornido, estoy como una tonta observándolo. Las gotas de sudor resbalan por su cuello y su frente lo cual hace que él levante su playera para luego secarse con ella.
—¿Guapo no? —menciona de pronto mi nana.
Enseguida me doy la vuelta para después tragar saliva.
—¡Nana! Yo… yo solo estaba dando la vuelta —me doy la vuelta.
—A mí me pareció otra cosa niña—me sonríe.
—Deja de ver novelas nana—sonrío nerviosa.
—En fin tu comida esta lista, ven vamos a comer —me toma del brazo y me lleva hacia la cocina.
Cuando termino de comer ya está obscuro, así que decido nuevamente caminar pero esta vez por el jardín trasero, camino hasta acercarme al final de él patio.
Miro hacia las demás casas y miro que afuera de una de ellas hay una familia comiendo en el patio. En ellos se ve mucha felicidad la cual se me contagia por lo que termino sonriendo. De pronto siento como me toman de la cintura y junto con ello un susurro en mi oído.
—Al fin —susurran a mi oído.
Empiezo a respirar agitada, esa no es la voz de nadie conocido.
—¿Qué quieres? —digo con temor.
—A ti, anda camina ¡Camina! —me empuja y me da la vuelta.
Trato de voltear hacia mis lados pero no logro ver Aarón.
Maldita sea ¡Donde esta!.
Me tiro al suelo lo cual hace que el tipo se agache y así logro ver como Aarón se asoma por el balcón de mi habitación, al parecer él me anda buscando.
—Aarón—grito con fuerza
Él tipo solo me mira y me da una bofetada la cual hace que caiga al suelo.
Me apoyo de mis dos manos y volteo a ver a mi balcón pero Aarón ya no está, aprieto mis ojos y eso hace que mis lágrimas de frustración salgan.
Él tipo me levanta y pone mis brazos hacia atrás.
—Ahora ya no podrás escapar y más te vale que no grites entendiste ahora camina.
Obedezco y camino junto con él, pero de pronto veo como Aarón salta desde el techo bajo que hay en la primera planta, él cae al suelo para después pararse y caminar hacia a mí.
—Suéltala —dice Aarón firmemente.
—Si claro mira como lo hago—dice con burla.
Ese tipo me jala los brazos hacia atrás lo cual me lastima y hace grite de dolor.
—Suéltala ¡Ahora! —grita Aarón con fuerza.
Eso basto para que los demás guardaespaldas vinieran corriendo.
—Atrás—les dice Aarón a los demás.
Aarón me mira con desesperación. Él respira agitado, en su mirada hay frustración, él voltea hacia los alrededores y después solo se queda viéndome a los ojos.
—Me iré despacio, no intenten nada porque si lo hacen le encajo esto en su hermoso cuello—termina de decir para luego caminar junto conmigo.
Él muy estúpido atacante camina junto conmigo un rato hasta que tropieza con algo y caemos los dos al suelo aprovecho eso y salgo corriendo, me protejo detrás de unos árboles, a lo lejos se escuchan sus pasos, estoy segura de que viene por mí ¡Rayos! ¿Qué hago?
De pronto tapan mi boca y me halan, trato de gritar pero no puedo y eso me frustra mucho, mis ojos están un poco llorosos por lo cual veo borroso.
De pronto me dan la vuelta y me recargan en su pectoral.
—¿Está bien? —pregunta Aarón.
Al escuchar esa voz siento alivio y solo suelto un suspiro y sin pensarlo abrazo Aarón hasta cansarme de hacerlo él permanece quieto hasta que decido alejarme de él.
—Gracias—lo miro a los ojos.
Él solo me toma del brazo y me lleva junto con él a la casa, cuando estamos en la puerta de la recamara solo lo veo con frustración, a decir verdad tengo mucho miedo y sinceramente no quiero que él se vaya, sin embargo cuando él me deja en la puerta solo se da la vuelta y veo como da unos pasos, camino detrás de él y tomo su mano.
—No te vayas—sigo tomando su mano.
Él solo ésta de espaldas, para nada se mueve y lo único que ha hecho desde que tome su mano fue soltarse inmediatamente.
—Está bien, perdón que estupidez pedirte eso—sonrío y me doy la vuelta para entrar a mi recamara.
—Me quedaré —dice de pronto.
—¿De verdad? —me doy la vuelta y regreso hacia donde está él.
—Me quedaré en la puerta, no me moveré de ahí, si necesita algo solo hable —dice seriamente.
Solo le sonrío y me meto a mi recamara.
Entro y me meto a la cama, tener a ese guardaespaldas en la puerta me hace sentir segura. Es que él es tan bueno para pelear y para todo., además me ha salvado dos veces así que confío en él.
Por la mañana despierto para enseguida arreglarme para ir a la universidad, deseo terminar esta carrera pronto ya que cuando lo haga podré estudiar diseño lo que tanto he querido ojala y en esta ocasión mi madre cumpla su palabra y me deje estudiar lo que tanto quiero.
Cuando estoy arreglada, solo tomo mi mochila y salgo de mi recamara. Al salir veo a Aarón sentado en una silla a lado de mi puerta. Él está dormido, realmente se ve muy bien así, su pelo está un poco alborotado, mientras su piel se ve tersa y sus labios, sus, sus ¡Sus labios! ¿Estoy hablando de unos estúpidos labios? Ah maldita sea que estúpida me he vuelto en estos días.
Estoy a punto de tocar una de sus manos pero él rápido reacciona y toma la mía antes yo hacerlo.
—¿Qué pasa? —dice para luego soltarme.
—¿No estabas dormido? —pregunto asombrada.
—¿Usted qué cree señorita? —pregunta mientras veo como esa minima sonrisa de lado se va asomando poco a poco.
Ah genial ahora siento como mis mejillas arden, solo espero no haber puesto cara de estúpida mientras miraba su rostro que estúpida soy ¿Qué rayos me pasa?
—De acuerdo, me iré a la universidad, tú debes dormir desde ante noche no lo haces —me pongo la mochila en el hombro y camino.
—Eso solo yo lo decido, ahora vamos —me quita la mochila y solo veo como el baja rápidamente las escaleras.
Llego al auto y Aarón me abre la puerta por lo cual subo enseguida. Llegamos en menos de media hora a la universidad, así que tomo la mochila y bajo, por un momento pensé que Aarón ya se iba pero no, él bajo junto conmigo para luego caminar detrás de mí. Mis compañeros solo me miran muy raro y claro cómo no, si alguien viene siguiendo mis pasos.
—¿Tienes que seguirme? —freno mis pasos.Eso hace que Aarón me empuje un poco con su peso, él de inmediato me toma del brazo y evita que caiga al suelo. Me doy la vuelta y solo observo fijamente mientras mi expresión es sumamente seria.—¿Qué? —pregunta desconcertado.—¿Enserio? —frunzo el ceño.—Lo siento son ordenes, tengo que cuidarla en todos lados —dice seriamente.—Pero no has dormido—digo preocupada.—Eso no es problema para mí, no se preocupe— termina de decir para luego obligarme a caminar junto con él hasta llegar a mi aula de clases.Pero ¿Cómo es que él sabe cuál es? Cuando me doy cuenta de eso, me doy la vuelta y lo miro con preocupación y estoy por preguntarle pero en eso timbra la campana, así que debo entrar a clases.Han pasado algunas horas desde que entré a clases y Aarón aún está parado cerca de la puerta de mi salón de clases, sinceramente no puedo creer que él siga como si nada cuando lo único que ha hecho e
Salgo del coche y dejo a Bruno dentro y me dispongo a seguir a esos idiotas. Ellos suben a la habitación mientras yo los sigo caudalosamente, veo como entran y no puedo creer que el siga haciéndome esto soy una tonta.Pero esto no se va quedar así, a lo lejos veo pasar una recamarera, por lo cual finjo perder mi tarjeta y solo pido que me abra la habitación.La señora engañada con la idea de que yo soy la esposa del tipo que está dentro me abre y se va.Entro a la habitación y veo como René y Estefanía están en la cama, ambos están por consumar lo que vinieron hacer pero enseguida los interrumpo con un aplauso.—Claro, siempre vas detrás de mis sobras pero… Estefanía ¿De verdad tienes que caer tan bajo como para acostarte con René? —pregunto.—Pues sobras o no, él ahora está conmigo, así que lárgate —sonríe burlona.—Sabía que eres mujeriego pero pensé que era porque no tomaba la decisión de estar contigo, todo este tiempo pensé
Después de decir eso termino dándole una cachetada, la cual le deja marcada la mejilla a René. Lo veo con enojo mientras él se soba la mejilla.—¿Qué te pasa? ¿Estás loca? —menciona Estefanía quien viene caminando con enojo hacia a mí.En cuanto llega me empuja con fuerza haciendo que casi caiga al suelo, lo cual no sucede ya que Aaròn me sostiene.–No me provoques Estefanía, ahora no estoy de humor —digo con molestia.—No me interesa tu humor ¿Estás ardida? Claro como te quite a tu novio, pensaste que jamás sucedería eso pues mira–lo toma del cuello y lo besa frente a mí.Enseguida Aarón, me jala del brazo y me reincorpora en su pectoral, allí me sostiene hasta quita su mano de mi espalda, antes de voltear nuevamente hacia René y Estefanía, miro a Aarón y lo hago de manera sorprendida para luego continuar con lo mío.–Estefanía ¿De verdad crees que besar a mi ex novio te hace mejor? Por favor ubícat
—¿Estás bien? —pregunta asustado mientras me observa fijamente.De pronto me da una risa pero es una risa de nervios, siento mi corazón latir demasiado rapido y solo puedo mirar sus ojos hasta que decido contestar.—Estoy bien, tranquilo—sonrío mientras lo miro nerviosa.Él solo lanza esa pequeña sonrisa que ya es tan parte de él para después ponerse de pie y ayudarme a pararme.—Me encantó tu clase ¿Me puedes seguir enseñando? —le pregunto.—Solo si prometes no usar todo lo aprendido para golpear solo porque sí —dice con seriedad.—Lo prometo—le enseño mi meñique y después tomo el de él para juntarlos.Él separa su mano de la mía y solo pone sus manos en el cinturón del traje que lleva puesto.—Es hora de cambiarnos—dice para luego suspirar y desaparecer de mi vista.Ya listos salimos del lugar pero antes de abordar el coche tomo Aarón del brazo para luego mirarlo a los ojos.—Gracias por ayudarme a
—Si te importará como dices, me llamarías más seguido y no tendria que esperar a mi cumpleaños, si te importará no vendrías a casa solo a discutir y hacerle saber a mí mamà que no te dejarás humillar por ella. Las veces que viniste solo fueron a discutir ¿Que no te das cuenta el daño que me haces? —trago saliva y limpio mis largimas— Pero olvídalo mejor quédate con tu nueva familia papá, tu hijo es mejor hijo que yo—cuelgo la llamada y veo el espejo y tengo tanto coraje que me levanto de la cama y voy a golpearlo unas cuantas veces mientras lloro.De pronto se escucha como entran a mi recamara y me toman de los brazos y me alejan del espejo.Me doy la vuelta y veo que es Aarón ¡Maldita sea! Por qué siempre tengo que llorar frente a él.Lo tomo de su camisa y lo jalo hacia mí y lo abrazo con fuerza me aferro a su cintura y a su pecho. Lloro desconsolada, me duele tanto sentirme así.No dejo de llorar, no puedo dejar de hacerlo, teng
Mientras él termina de poner las cosas decido caminar un poco por la orilla del río. Camino hasta que Aarón va por mí y me lleva hacia el picnic y me pide que tome asiento lo cual hago enseguida, después veo como Aarón desenvuelve una hamburguesa la cual me da enseguida.—Gracias —la tomo mientras observo como él destapa la suya y enseguida la muerde.Él come en silencio y sinceramente se ve que lo está disfrutando.—¿Tu comida favorita son las hamburguesas? —sonrío.—Eh—contesta mientras sus cachetes están inflados.—Sigue comiendo—decido morder la hamburguesa la cual es muy deliciosa.Ambos seguimos comiendo hasta que terminamos de hacerlo, después veo como Aarón limpia su boca y enseguida se pone de pie y camina hacia el carro del cual saca una caja de cartón color blanca.
Aarón no responde, él solo me mira con esa mirada tan intensa que tiene, la cual me pone demasiado nerviosa pero en esta ocasión no permitiré que eso me gane.—Aarón—menciono mientras tomo sus manos y lo miro con suplica.Él solo se sorprende y de inmediato mientras aclara su garganta se suelta de mi agarre y se voltea hacia otro lado.—Aarón por favor, no digas nada—le suplico.—¿Y cómo pretendes ocultar esto? —pregunta de pronto.—Confía en mí ¿Si? —busco su mirada hasta mirarlo a los ojos.—¿Cuál es tu plan? —pregunta.—Vamos al centro comercial, compremos ropa nueva y de los golpes yo te ayudo a ocultarlos, haremos eso y si no te convence el resultado asumiré las consecuencias contigo ¿De acuerdo? —tomo su brazo.—Solo esta
No, no puedo verlo a los ojos, él me descubriría fácilmente.—¿Duele mucho? —toca mi espalda mientras pregunta con preocupación.—Sí, ayúdame por favor ve a enfermería y pide una pastilla para cólicos—digo mientras me quejo.—Vamos—trata de cargarme.—¡No! No me muevas me duele mucho—digo mientras me siento en una de las jardineras que hay cerca de nosotros.Volteo a ver sus ojos solo un momento y veo como él me mira preocupado.—Quédate aquí y no te muevas, vuelvo pronto.Aarón se va corriendo hacia la enfermería, mientras yo aprovecho eso para así salir de la universidad.El mensaje de Ada con la dirección de la fiesta me llega, así que aprovecho para llamar a mi madre y preguntar por qué no quiere que Aarón vaya, se supone