El consejo de Xavier era sensato y extremadamente bueno, todo lo que Stacy debía hacer era seguirlo y contar los hechos justo como habían sucedido mostrándose fría, controlada y serena.

No era como si estuviera a punto de mentirle a la policía, todo era absolutamente cierto, solo cambiaría el hecho de que su padre estaba intentando matarla a ella en lugar de su madre.

—¿Qué detalles está buscando, oficial? Solo pregunté, yo contestaré a cada una de sus inquietudes.

—Eso depende de usted señorita Neelson. Solo quiero que tenga en mente que, o limpia su nombre, o acabará entre las rejas.

Los ojos de Stacy se giran hacia Xavier buscando apoyo y este le hace un gesto sutil para que continúe. Ella da un suspiro y comienza a contar:

—Todo en casa estaba tranquilo, tan tranquilo como se esperaba que fuera un hogar cuyo padre y esposo era un borracho agresivo. Yo llegué de mi trabajo en la cafetería y mi padre me exigió el dinero que había ganado en mi turno ese día, yo me negué y él me atac