Cualquiera hubiese podido ver a kilómetros de distancia lo mucho que se esforzó Stacy cuando tuvo que tragar en seco. En medio de su enojo, acababa de sentenciar a Javier, sin darse cuenta, le acababa de contar al hombre que tenía en frente que su hermano la había ayudado a escabullirse de la mansión.

Las manos de Stacy comenzaron a temblar, estaba asustada, no por ella, por alguna extraña razón, algo en su interior le decía que Xavier nunca la lastimaría; estaba asustada por Javier y por lo que su hermano podría hacerle una vez lo supiera todo.

—De acuerdo —dice ella con firmeza, no le iba a permitir que supiera lo aterrorizada que estaba por dentro— Te lo contaré siempre que me digas cómo me encontraste.

Por supuesto que la rubia nunca delataría a Javier, pero necesitaba ponerle ese señuelo a Xavier. Por la reacción que había tenido el hombre frente a ella, sabía que Javier no la había delatado, así que, Xavier debía haberla rastreado de alguna manera y estaba dispuesta a descubrirl