DashaQuizá todo se ha perdido, lentamente y ahora empezamos a notar las grandes diferencias. Todo ha cambiado, para bien o para mal. Nada es igual.La vida nos enseña que a nuestro presente llegarán cosas nuevas que nos hundirán y otras que nos ayudarán a salir del abismo en el que caímos. En este caso, no comprendo del todo la clase de destino que es este y mucho menos, termino de entender aquello que he presenciado.—Lo que escuchaste Katya, acabo de preguntarte qué es lo que tienes con el italiano —le expresé. Durante la cena, había notado con claridad la clase de miradas que se daban y la tensión que había entre ambos—Acabo de notar la forma en que se miran, y esas miradas no se la dan dos personas que no se conocen mucho o que tan solo han entablado una conversación un par de veces cuando han coincidido en el mismo lugar así que solo hay dos opciones disponibles...O te has involucrado sentimentalmente con ese hombre o tienes alguna especie de problema con él.—¿Acaso estás loca?
LukaTuve que salir hasta el jardín para despedir a mis padres, los cuales estaban listos para partir hacia su destino final; una isla desierta que iba a protegerlos de todos sus pecados.Aunque ante los ojos de Dios, nadie puede protegerlos.—¿Están listos? —Pregunté al darme cuenta que habían terminado de subir sus maletas al auto—En serio, no puedo creer que están a punto de partir. Parece que todo esto fuese un sueño.—Tampoco yo, nunca hemos tenido una despedida —mi hermana menor se limpió las lágrimas que habían llenado su rostro. Aunque siempre hayamos tenido problemas, todos causados a la falta de empatía de mi padre en diversas situaciones, al final del día, hemos sido una familia. Por más que en medio de todos nosotros existan muchos sentimientos y secretos que permanecen ocultos, tenemos que seguir adelante sin vivir tan solo del resentimiento—Solamente espero que al final, puedan tener la oportunidad de disfrutar de todo lo que les ha dejado el negocio porque se han esforz
Lo recuerdo, recuerdo perfectamente la primera vez que mis manos tocaron un arma. Tenía catorce años, pero, eso no le importó a mi padre. A Maximiliano Romanov no le interesó que su hijo entrara dentro del mismo círculo que él y se convirtiera en uno de sus mafiosos.—¿Qué me dices, Luka? ¿Estarás listo si te dejo a cargo? —Puso un arma asesina en sus labios: un maldito cigarrillo— Además no será por nada más que un mes, hasta que tu madre y yo regresemos de Alemania.—¿Sigues seguro de hacer ese viaje? —Enarqué una ceja— ¿Es seguro que ambos vayan a un país tan cercano a Italia?—¿Qué pasa con Italia, Luka? Hijo, no creo que hayas olvidado que nuestros problemas con la mafia italiana llegaron a su fin desde hace un poco de tiempo.—No seas imbécil padre —vaya, no podía creer que iba a darles una ventaja tan grande a sus enemigos—Sabes muy bien que ese inconveniente apenas acaba de solucionarse y que no nos conviene que se acerquen tanto a ellos.—Cállate Luka, quien tiene la experien
Dasha—La única manera de que me devuelvas mi libertad es haciendo lo que debes hacer. Tu deber es conversar con mi padre respecto a tus acciones en el pasado. No seré yo la persona que te delate, serás tú misma la que tome la responsabilidad de decírselo a nuestro padre —indiqué, limpiandos las lágrimas que se acumularon en mi rostro. Acomodé mi maleta, y me preparé para irme.No deseaba tener esta conversación. No deseaba hablar con ella.—Sé que tengo que hacerlo, sin embargo, necesito que me des un poco de tiempo —casi me rogó y asentí—Sé que me equivoqué, terriblemente, en especial contigo. Cometí un grave error al involucrarme de forma romántica con el mejor amigo de Maximiliano, no obstante, no tenía que haberte tratado de la forma en que la hice. Lamento mucho, hasta el día de hoy, el haberte amenazado con quitarte la vida en aquel entonces y por haberte tratado de matarte hace un tiempo. Lo siento, Dasha, y aunque mis disculpas no cambiarán la manera en que me ves ya que ant
Luka—Maldita sea, no tengo ganas de matar a alguien que no tiene la culpa de nada —golpeé mi puño contra el vidrio del auto, causando que mi mano sangrara escandalosamente—Puta madre...—No hay forma de escapar por tierra, Luka, necesitamos que nos envíen un helicóptero lo más rápido posible —Katya comentó como si nada. En su rostro se notaba el enojo que estaba sintiendo, no obstante, era increíble el autocontrol que presentaba ahora mismo. Al contrario de su comportamiento de aquella vez que por poco se atreve a matar al jefe de la mafia italiana, Francesco De Angelis en plena celebración.—Señorita Katya, su padre ha enviado un helicóptero que aterrizará en menos de doscientos metros. Tomaremos ventaja sobre ellos para hacerlo sin problemas, mientras que ustedes no deben dejar ningún tipo de huella aquí.Negué furioso. Era imposible salir de esta situación solo con ayuda de un helicóptero. Si tomábamos ventaja y por una u otra razón algo salía mal y detenían a uno de nosotros, la
DashaCon las manos temblorosas, contesté lo más pronto que pude en cuanto noté que la llamada era de mi hermano. Rápidamente puse la llamada en altavoz, debido a que cada vez que me ponía nerviosa, ni siquiera era capaz de oír correctamente. No entiendo como después de todo lo que he tenido que vivir, sigo poniéndome nerviosa por cosas tan sencillas.—¿Luka? —Susurré, incapaz de relajarme. Mi hermano no solía interrumpir mis viajes repentinos, al contrario, él creía al igual que el resto de mi familia que no debían molestarme cuando estaba de vacaciones porque me las merecía. Ellos estaban muy de acuerdo con mis decisiones de salir de casa por un par de días varias veces, simplemente porque nadie tiene la misma oportunidad que yo.—Dasha, por el amor de Dios, ni se te ocurra moverte a ningún lugar. No regreses a casa, o al menos no hasta que yo mismo no te lo diga. Hazme caso, te lo ruego—su voz se escuchaba un poco entrecortada.—Está bien, pero, me gustaría que me expliques qué se
LukaNo he podido dormir correctamente los últimos días. El asunto de Francesco me ha tenido preocupado y es ahora, que he empezado a darme cuenta de la estupidez que le dije a mi padre. No tendría que haber pensando y mucho menos proponerle asesinar al capo. He cometido un error del que no puedo recuperarme.Me levanté de la cama a eso de las nueve de la mañana porque necesitaba cerrar un trato para una mercancía bastante grande que llegaría dentro de unos días a uno de los puertos más cercanos y después, nos encargaríamos de distribuirla y venderla como siempre hemos acostumbrado. Luego de desayunar salí al jardín debido a que deseaba sentarme a leer un poco sin que nadie me molestara, pero, me encontré con mi hermana quien revisaba su teléfono con insistencia.Bueno, es cierto que parece actuar como nunca lo hace. Me pregunto si le está pasando algo.—Katya ¿Te sucede algo? —Me preocupé al notar su rostro tan asustado, ella estaba prácticamente pálida por lo que me acerqué.Suspiró
DashaLa muerte de Francesco dejó una gran huella en mí. Cambió para siempre mi forma de ver las cosas y me marcó de tal manera, que al fin he abierto los ojos acerca de lo que verdaderamente significa ser un criminal y tener tantos enemigos. Creemos que el poder nos ha de ayudar a superar todos los problemas que aparezcan en nuestro camino y dormimos con suma tranquilidad, aun sabiendo que hacemos cosas malas y que varias personas sueñan con asesinarnos todo el tiempo en búsqueda de venganza.Con la muerte del capo italiano comprendí que no estamos libres de morir, que no somos indestructibles como mi padre me enseñó. Mi padre me aseguró que nada podría ser capaz de destruir a la mafia rusa de la familia Romanov, pero, ahora creo que nadie está libre de ser herido, ni siquiera nosotros.Tuve que volver a Moscú porque así lo quise, debido a que prefería mil veces regresar al departamento de Dimitri y disfrutar de su compañía con la mayor tranquilidad posible en lugar de regresar a cas