Princesa Rebelde
Princesa Rebelde
Por: Sra De Taker
Sinopsis

Aclaratoria importante antes de seguir leyendo este libro; el país en el que se basa esta historia es Edimburgo, Escocia. No se tomará en cuenta la verdadera nobleza que todos conocemos. Se toma en cuenta los títulos, palacios y cualquier información sobre reyes, príncipes y princesas. Solo que el resto será ficción.

Gracias.

☆☆☆☆☆☆

Obra registrada bajo el número: 2410299952238

Con fecha: 10/28/2024

Prohibida su reproducción total o parcial de ella.

☆☆☆☆☆☆☆☆☆

No sé como iniciar esta historia. Creo que puedo hacer el intento de comentar mi situación actual de vivienda. Normalmente, los padres nos abren las alas para que volemos y vivamos fuera de casa al cumplir cierta edad. En muchas ocasiones, tenemos mala relaciones con ellos y somos echados de la casa materna y después, están las personas que son como yo. Gente que son echados por caprichos de una reina.

Digamos que no tuve una mala vida cuando era pequeña. Creo que mientras estuvo vivo la persona que realmente me miró durante mi infancia, puedo decir, que no tuve una mala vida en ese tiempo. Solo que al ir creciendo, me fueron mostrando la otra cara de la moneda. Mi mente y conocimiento se ampliaron mientras estuve aislada y rara vez salía porque fingían que había estado enferma. Mi visión sobre las cosas viajaron lejos de las cuatro paredes en la que solía vivir. Mi vida después de eso se convirtió en una actividad de riesgo y un deseo continuo de querer salir de ahí.

Mi familia es leal a las normas y leyes impuestas por la reina. Mi familia no es agradable. En mi familia respiran y se desviven por la corona y las normativas reales estrictas. Mi abuela es la reina de Escocia. Sí, todavía quedan algunos monarcas. Cuando era pequeña solían decir que era la segunda bendición para la nación, pero por algunos acontecimientos en mi vida ajenos a mi propia voluntad, ahora soy la vergüenza del reino.

No lo debería decir, pero tal vez puede ser que esté huyendo aprovechando que me corrieron del que un día fue mi hogar.

Por órdenes de su alteza real, fui echada del palacio que me vió crecer un día. No es que me moleste, pero no había necesidad de sacarme de la manera en la que lo hizo para hacerme entrar en razón. Aunque sé perfectamente que me lo busqué, pero igual me da un poco de indignación su falta de respeto.

Mi abuela me envió a vivir a Noruega. Allá no tengo ni idea de como se supone que voy a sobrevivir, bueno, sí sé, pero un poco de dramatismo no está de más. Las órdenes reales de la reina fueron:

—Perderás todos tus privilegios como princesa. Vivirás en un hogar compartido, trabajarás y serás plebeya. No causes problemas ahí nadie te conoce. Ruego a los cielos todos los días que después de esta vivencia logres recapacitar y sepas cuál es tu posición.

—Reina, por favor, creo que podemos hablar sobre esto. Yo no tengo la culpa de...

—No empieces, Emili. Desde el inicio te lo advertí. No me iba a aguantar una más. No me importa a donde te vayas. Pero debes cambiar esa manera tan... las cosas no son a tu modo. No es como dices. La reina soy yo y me debes obediencia. Te quejas por todo y haces lo que te da la gana. Estoy cansada de meter la mano por ti y tratar de que entres en razón. Eres una princesa rebelde y eres la vergüenza de mi reino. Ni siquiera puedo casarte con alguien porque das pena. Edward se encargará de que vayas a un buen lugar... contigo he terminado. Ahora, vete, empaca tus cosas antes de que te desherede y te quite tus títulos reales de verdad.

—Ni siquiera te importa que me vaya a vivir con un desconocido. He aguantado tanto... Aquí a nadie le importo ni un poquito. Siempre me aislaron y...

¡Largo, Emili! Vete con Edward a donde sea que él quiera enviarte. Si vas a seguir así, te voy a desterrar y te llevarás a tu karma. No creo que te guste la idea de llevarte a alguien del palacio. Así qué, es suficiente y vete en sana paz. Estoy cansada de ver tu rostro lleno de... solo vete y déjanos vivir una vida tranquila sin ti.

—Como usted ordene, su majestad —respondí con ganas de llorar.

En el palacio soy el cero a la izquierda que más ignoran. Mi palabra no es ley y la de mis padres es callada por la voz de la reina. Voy a vivir en un departamento con un desconocido. Pero sinceramente, quería huir de casa. Por más comodidades que tuviese en el palacio, no todo lo que brilla es oro. En Noruega podré ser quien yo quiera y trabajar de lo que sea. Por primera vez elegiré qué hacer en mi vida sin una voz que me persiga y diga que soy un completo desastre.

Tengo los sentimientos encontrados y el corazón a mil por hora.

Deben pensar que les he contado todo, pero no.

Aún escondo cosas, aún guardo secretos, aún no digo el verdadero motivo de mi salida del país. Solo he dicho de dónde vengo y de quien provengo.

El resto seguirá siendo un secreto.

¿Cómo es el hombre con quien viviré?

Es un sujeto amargado amante del orden. Por darme alojo y ser mi niñero me odia. No quiere ser mi amigo, no confía en mí y me rechaza por esa razón. Yo decidí aceptar y guardar silencio como siempre para no ser descubierta.

No debo molestar o la reina mi cabeza cortará.

Es broma... creo.

Él es un CEO ex militar dueño de una empresa de seguridad.

Yo soy princesa.

Él es noruego.

Yo soy escocesa.

Él no confía en mí.

Yo le di motivos.

Él y yo no tenemos nada en común, pero la vida nos unió y lamentablemente nos tocó conocernos.

Hola, soy Emili y les contaré como fue engañar al tipo más amargado de Noruega sin morir en el intento.

Capítulos gratis disponibles en la App >
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo