Aclaratoria importante antes de seguir leyendo este libro; el país en el que se basa esta historia es Edimburgo, Escocia. No se tomará en cuenta la verdadera nobleza que todos conocemos. Se toma en cuenta los títulos, palacios y cualquier información sobre reyes, príncipes y princesas. Solo que el resto será ficción.
Gracias.
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Obra registrada bajo el número: 2410299952238
Con fecha: 10/28/2024
Prohibida su reproducción total o parcial de ella.
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No sé como iniciar esta historia. Creo que puedo hacer el intento de comentar mi situación actual de vivienda. Normalmente, los padres nos abren las alas para que volemos y vivamos fuera de casa al cumplir cierta edad. En muchas ocasiones, tenemos mala relaciones con ellos y somos echados de la casa materna y después, están las personas que son como yo. Gente que son echados por caprichos de una reina.
Digamos que no tuve una mala vida cuando era pequeña. Creo que mientras estuvo vivo la persona que realmente me miró durante mi infancia, puedo decir, que no tuve una mala vida en ese tiempo. Solo que al ir creciendo, me fueron mostrando la otra cara de la moneda. Mi mente y conocimiento se ampliaron mientras estuve aislada y rara vez salía porque fingían que había estado enferma. Mi visión sobre las cosas viajaron lejos de las cuatro paredes en la que solía vivir. Mi vida después de eso se convirtió en una actividad de riesgo y un deseo continuo de querer salir de ahí.
Mi familia es leal a las normas y leyes impuestas por la reina. Mi familia no es agradable. En mi familia respiran y se desviven por la corona y las normativas reales estrictas. Mi abuela es la reina de Escocia. Sí, todavía quedan algunos monarcas. Cuando era pequeña solían decir que era la segunda bendición para la nación, pero por algunos acontecimientos en mi vida ajenos a mi propia voluntad, ahora soy la vergüenza del reino.
No lo debería decir, pero tal vez puede ser que esté huyendo aprovechando que me corrieron del que un día fue mi hogar.
Por órdenes de su alteza real, fui echada del palacio que me vió crecer un día. No es que me moleste, pero no había necesidad de sacarme de la manera en la que lo hizo para hacerme entrar en razón. Aunque sé perfectamente que me lo busqué, pero igual me da un poco de indignación su falta de respeto.
Mi abuela me envió a vivir a Noruega. Allá no tengo ni idea de como se supone que voy a sobrevivir, bueno, sí sé, pero un poco de dramatismo no está de más. Las órdenes reales de la reina fueron:
—Perderás todos tus privilegios como princesa. Vivirás en un hogar compartido, trabajarás y serás plebeya. No causes problemas ahí nadie te conoce. Ruego a los cielos todos los días que después de esta vivencia logres recapacitar y sepas cuál es tu posición.
—Reina, por favor, creo que podemos hablar sobre esto. Yo no tengo la culpa de...
—No empieces, Emili. Desde el inicio te lo advertí. No me iba a aguantar una más. No me importa a donde te vayas. Pero debes cambiar esa manera tan... las cosas no son a tu modo. No es como tú dices. La reina soy yo y me debes obediencia. Te quejas por todo y haces lo que te da la gana. Estoy cansada de meter la mano por ti y tratar de que entres en razón. Eres una princesa rebelde y eres la vergüenza de mi reino. Ni siquiera puedo casarte con alguien porque das pena. Edward se encargará de que vayas a un buen lugar... contigo he terminado. Ahora, vete, empaca tus cosas antes de que te desherede y te quite tus títulos reales de verdad.
—Ni siquiera te importa que me vaya a vivir con un desconocido. He aguantado tanto... Aquí a nadie le importo ni un poquito. Siempre me aislaron y...
—¡Largo, Emili! Vete con Edward a donde sea que él quiera enviarte. Si vas a seguir así, te voy a desterrar y te llevarás a tu karma. No creo que te guste la idea de llevarte a alguien del palacio. Así qué, es suficiente y vete en sana paz. Estoy cansada de ver tu rostro lleno de... solo vete y déjanos vivir una vida tranquila sin ti.
—Como usted ordene, su majestad —respondí con ganas de llorar.
En el palacio soy el cero a la izquierda que más ignoran. Mi palabra no es ley y la de mis padres es callada por la voz de la reina. Voy a vivir en un departamento con un desconocido. Pero sinceramente, quería huir de casa. Por más comodidades que tuviese en el palacio, no todo lo que brilla es oro. En Noruega podré ser quien yo quiera y trabajar de lo que sea. Por primera vez elegiré qué hacer en mi vida sin una voz que me persiga y diga que soy un completo desastre.
Tengo los sentimientos encontrados y el corazón a mil por hora.
Deben pensar que les he contado todo, pero no.
Aún escondo cosas, aún guardo secretos, aún no digo el verdadero motivo de mi salida del país. Solo he dicho de dónde vengo y de quien provengo.
El resto seguirá siendo un secreto.
¿Cómo es el hombre con quien viviré?
Es un sujeto amargado amante del orden. Por darme alojo y ser mi niñero me odia. No quiere ser mi amigo, no confía en mí y me rechaza por esa razón. Yo decidí aceptar y guardar silencio como siempre para no ser descubierta.
No debo molestar o la reina mi cabeza cortará.
Es broma... creo.
Él es un CEO ex militar dueño de una empresa de seguridad.
Yo soy princesa.
Él es noruego.
Yo soy escocesa.
Él no confía en mí.
Yo le di motivos.
Él y yo no tenemos nada en común, pero la vida nos unió y lamentablemente nos tocó conocernos.
Hola, soy Emili y les contaré como fue engañar al tipo más amargado de Noruega sin morir en el intento.
Palacio Real de Holyrood.Edimburgo, Escocia.23 de octubre de 2025Es el día más especial para la realeza de cualquier país. El fin de un reinado lleno de muchas cosas raras internamente, para darle inicio a otro, que se espera que sea mucho mejor. Pero teniendo a mi madre de reina, lo dudo mucho. Solo deseo que las cosas que mi abuela hizo, no lo repita mamá en el interior del castillo. Ahora estamos aquí, rodeados de muchas naciones con gente de sangre real.¿A quién engaño? Realmente son como tres países, más el poco de pubertos en proceso de príncipes y princesas de diez años que abundan por estos lados sin mirar más allá de su frente.Es medio indignante la situación, si nos ponemos a analizar la falta de respeto de los niños de hoy en día que tienen con los adultos.Se supone que no debería expresarme así, pero yo no quiero ser de la realeza mientras mi abuela y madre sigan en el trono, pero renunciar no me dejan y por eso estoy aquí. Deje de tener principios reales y ahora ten
Taker CompanyOslo - Noruega.Varios meses atrás.Desde que tengo uso de razón siempre he odiado todo lo que esté ligado a la realeza. Nadie hizo nada cuando perdí a la única persona que me amó sinceramente después de mi hermano mayor. No crecimos juntos a pesar de vivir en el mismo palacio y obviamente, los tratos fueron diferentes. Él fue más liberal y yo más aislada. Nunca tuvo problemas con nadie, pero yo fui otra historia.Soy la tercera en la línea de sucesión al trono. Ni siquiera voy a heredar y bueno...Reglas del palacio:1) No hables si no te lo piden.2) Siempre está de acuerdo en todo.3) Respira lento.4) No mereces ser princesa si no sufres.5) Sonríe sin importar que te escupan la cara.6) Todo es tu culpa.Intenté escaparme miles de veces del palacio, pero fue en vano. Los castigos de la reina eran los más crueles cuando se enteraba de que eran para mí.Ella da miedo.Ella es hipócrita.Engaña a su pueblo y lastima a quien no la obedece.Me envió a vivir fuera de mi p
Por mi mente nunca pasó que al salir del palacio viviría otro infierno. Sigo estando en Europa, pero las cosas no cambiaron mucho que digamos. Pasé de normas de la monarquía de mi abuela, a normas de un vikingo dictador.Pero si podemos verle el lado bueno a esta especie de convivencia, nos daremos cuenta de que también llevo las de perder. El tipo es un idiota y quiero golpearlo cada día más. Lamentablemente, no puedo hacerlo.El supuesto caballero amable que me dijeron que era, término siendo un vikingo sin modales. El caballero de la armadura oxidada pasó directamente a ser un vikingo ignorante. Esta mañana antes de ir a la entrevista de trabajo limpié el baño como me lo pidió. Me sentí tan humillada. Tuve que buscar en internet como se hacía porque no sabía.¡Y es una bañera que se podía secar sola! —No es tan malo. Misa tiene una agradable personalidad —el comentario sarcástico de Rachel me saca de mis pensamientos.—¿Agradable? —asiente—. Ese tipo no conoce de eso. ¿Por qué tie
Es precioso admirar los alrededores de la nueva ciudad en la que me encuentro, pero siento que soy la única turista en el país. Nadie observa ni por un instante lo que hay sobre su alrededor. Es angustiante que solo sigan con su vida como si nada."Probablemente, estés loca," responde, mi conciencia.¿Es normal hablar con la voz de tu cabeza? Bueno, tampoco tengo como probarlo.Tengo unas cuantas semanas trabajando en el restaurante de Penny y ha sido bastante complicado para mí. He roto vasos y platos, a la hora de llevar comida a una mesa se la he tirado encima a los clientes y la última vez que hice entrega a domicilio, no sé cómo, pero la comida llego en mal estado. Soy una princesa con un sueldo bastante ajustado. He tenido que pagar por todo lo que he roto.El dinero no me alcanza.«¿Cómo las personas logran vivir con tan poco en su bolsillo?», pensé intrigada.¡Casi ni pagan!—Emili, ve a esta dirección a entregar este almuerzo. Lleva dinero para el cambio y que esta vez todo l
Llegué a la casa al terminar mi turno y vi que ya estaba ahí. Lo ignoré y fui directo a tomar un baño. Me sentía agotada y sudada. Quería solo liberarme del estrés de la calle. Al salir del proceso que es bañarse en este lugar, me di cuenta de que él seguía en la cocina. Eso quiere decir que debo esperar mi turno para hacer la cena. Es su casa y eso, pero estaba cansada y quería comer para irme a dormir.—He encontrado a una persona para que limpie el apartamento cuando no estemos. Lo hará una vez a la semana —me habla mientras me siento en el sofá, asentí y encendí la televisión—. Edward es mayor que tú, debes tener cuidado si desean tener una relación —me volteo y lo miro horrorizada—. No quiero que venga protección social a meterme a la cárcel por ser cómplice de un asaltador de menores y tú tienes ese tipo de aspecto que grita problemas por todos lados.Por un momento pensé que él podía hablar sin ser tan sarcástico o responderme así. Ay, todo un vikingo sin razonamiento lógico. D
Cuando sales de un país ya sea por tu bien o por obligación, dejas en tu tierra la mitad de tu corazón. No soy una excepción, dejé mi corazón en mi país, mi familia, a las personas que ayude y también, deje a las personas que han manchado mi reputación. Nunca me dieron la oportunidad de explicarme, para ellos siempre fui la culpable de todo.Cuando se es de la realeza muchas cosas debemos callar. Debemos guardar la compostura aunque por dentro estemos por estallar. Aprendí a sonreír con ganas de llorar, a fingir una sonrisa cuando por dentro estaba por reventar de la rabia. A ser un ejemplo para los demás cuando nadie era un ejemplo para mí. Como princesa siempre fui marginada, a pesar de tener todo, y como plebeya he conseguido tanto, a pesar de no tener nada.«Qué ironías tiene la vida», pensé.No me considero alguien especial y mucho menos creo ser mejor que los demás."Solo que no te sientes orgullosa de tu sangre real", conciencia mía, como deseo que por unos segundos te calles.