El silencio una vez más inundó el lugar, el delicado susurro de la voz de Thoma que a su vez se expresaba con importancia, era como si rogara a la menor que le creyera. En cuanto a ella, le creía, podría creerle todo lo que Thoma le dijera, por el simple hecho de ser él, sin embargo, sus emociones se salían de control en algunas ocasiones ¿Tendría que ver con su estado de aislamiento durante tanto tiempo?
—Yo…— susurró ella en medio de sus pensamientos.
—No debes sostener nada, Adele, no te estoy pidiendo que correspondas ahora mis sentimientos, simplemente quiero que estés segura de lo sinceros que son— se acercó un poco más a ella —¿Podrías creerme?— susurró muy cerca de su oído.
—Sí— suspiró —lo hago, perdóname por haberme molestado sin razón y no haber permitido que te explicaras desde un inicio— acaric
—Y eso es lo que más me gusta de ella— añadió el mayor con una tranquila sonrisa.Los planes de la mañana siguiente se vieron postergados a causa de la tormenta anterior, el pequeño Joel se había resfriado a causa de mojarse en la lluvia. Aunque no se encontrara en perfectas condiciones, estaba feliz de tener a su cuidado dos enfermeros vestidos de osos gigantes, nada más para animarlos.—No entiendo de dónde sacaste trajes así— susurraba Thoma en medio del baile que él y Adele hacían para levantar el ánimo del niño, el cual se sentía mal por haber arruinado la pequeña expedición al jardín botánico.—Mi hermana puede ser bastante extraña e irritante
—¡¿Eres hija del fiscal Jones?!— preguntó una vez más con sorpresa, luego de dejar su impresión a un lado, se percató de lo que decía en aquella columna:«11 de mayo de 2015.El domingo pasado, se reportó la muerte de la pareja Jones, en una aparente colisión de autos. Aunque se desconoce la razón exacta del accidente, una de las posibles explicaciones es una falla en el motor del auto de los señores Jones, el cual se detuvo en medio de la vía ocasionando una colisión con el auto que iba detrás de él.El conductor que estaba en el otro automóvil resultó sin daño mayor que algunas raspaduras, las investigaciones para aclarar el i
—Sí— respondió Thoma parpadeando numerosas veces.—Él es el padre de una antigua compañera de clases, Naomi, además de eso ¿Recuerdas el chico molesto que nos topamos en el restaurante y el parque de diversiones? Él es su hermano. El hombre es un reconocido empresario que se ha envuelto en algunos problemillas hasta dónde he escuchado en las noticias, lo asombroso del caso es que en cada momento sale ileso— suspiró —o es un genio o un asesino, una de las dos— elevó sus hombros y se enfocó en su pequeño.—Me sorprende que puedas hablar así de alguien. La madre de Evi, Azuquitar— aclaró para la menor que lo observó con confusión —trabajaba con él, lo hizo por algún tiempo, sin embargo,
—¡¿Qué no tiene hijos?!— cuestionó Adele asombrada y casi en un gritito —¿Cómo va a ser posible que no tenga hijos?, si yo misma lo veía en sus reuniones y crecimos juntos, lastimosamente— suspiró. Pero ahora le interesaba aún más el conocer lo que sucedía con Naomi —¿La fuente es confiable?— indagó sentándose al lado del mayor, su posición parecía ser el de una señora con ganas de chisme.—¿Te cuento un secreto?— susurró con una pequeña sonrisa, la menor se acercó instintivamente para escuchar lo que él tenía que decir, a pesar de ser los únicos despiertos en casa —Broun es estéril— expuso de manera rápida.Un chillid
Adele tenía unos vagos recuerdos acerca de cosas que su padre decía de los Weber, sin embargo, lo poco que recordaba le daba una perspectiva más clara de lo que estaba escrito en los informes de su padre. Henry tenía una letra bastante desaliñada, se justificaba en que la razón de su desorden al escribir era para confundir a aquellos que intentaran robar información. Su pequeña hija, Adele, le creyó todo lo que él le hablaba hasta que comenzó a ayudarle con sus informes, eso, sin contar con las numerosas veces que Jade lo regañaba por dejar un desastre por dónde fuera que él pasara.Una pequeña sonrisa se posaba en los labios de Adele, mientras observaba con tristeza la foto de sus padres, aquella que ella había decidido dejar en el lugar que su padre siempre apreció: El sótano, est
Joel ya había despertado, luego de dormir tanto tiempo tenía demasiada hambre, sería capaz de devorar todo lo que se le parara al frente, los jóvenes padres estaban en la cocina intentando esconder la verdura para que su pequeño la comiera con mayor facilidad. Había que admitir que era muy sencillo hacer que Joel se comiera sus verduras, salvo una: El brócoli, este pequeño arbolito que para Joel debería estar plantado en el jardín y no en su plato, era la peor pesadilla de Thoma a la hora de alimentar a su hijo. Una vez, terminó con uno en la nariz y desde entonces había evitado a toda costa incluirlo en las comidas.Ahora que compartía casa con Adele, se había enterado del gusto que la menor le tenía a estos diminutos árboles y no había mejor ocasión que ahora cuando el apetito vor
En medio de la noche Adele tenía problemas para conciliar el sueño, así que decidió regresar al sótano. Los descubrimientos hechos recientemente requerían mucha de su energía, además de que aún no había logrado asegurarse de que la madre de Azuquitar fuera la misma Mía Meyer. En caso de que las sospechas de Adele fueran ciertas, lo cual era muy probable, la siguiente acusación que había en el informe de Henry era que aquel hombre había abusado sexualmente de muchas de sus empleadas. Sin embargo, a causa de la posición en la que el señor estaba, ninguna de las mujeres se decidió a denunciarlo públicamente, a excepción de la misma Mía.Había rumores de que Broun empleaba la fuerza para acallar los rumores si el dinero no funcionaba, esa era una de las cosas que su
—Habla rápido, no tengo tiempo que perder— sentenció la menor tomando asiento, luego de dejar un poco de limonada frente a Naomi. —Espero que lo que me vayas a decir realmente valga la pena y el tener que ver tu rostro por aquí— se quejó la menor bebiendo un sorbo del suyo.—¿Qué es lo que quieres saber de la muerta?— cuestionó Naomi observando la casa —está muy diferente a cómo la recordaba.—Lo está, han pasado demasiados años— suspiró ella —¿Qué es lo que quieres hablar sobre Evi?— indagó sin dejar a un lado su frialdad.—Ya que conoces su nombre, debo concluir que sabes que es la esposa de Thoma ¿No es así?— Adel