Buscar Ayuda.

Al día después pasadas las dos de la  tarde, Roberto y yo bajamos a ver a los hermanos, los tres se habían quedado a dormir en los sofás, Roberto despertó a Damián, pero este no se despertó de la mejor forma.

—¿Qué pasó? —Preguntó muy alterado —¿se suicidó? —Esta vez preguntó muy preocupado.

Giró la cabeza y al verme dio una bocanada de aire para tranquilizarse.

—Estás bien —dijo ya más tranquilo.

Me senté en un sofá libre y miré a los mejores amigos. Roberto me cogió de la muñeca, me levantó del sofá y se sentó él para luego sentarme encima de él. Damián miró a sus hermanos y sonrió. Fue hacia la cocina y regresó con una cazuela y un cucharon de acero, comenzó dando fuertes golpes a la cazuela, cerré los ojos al escuchar ese ruido tan fuerte.

Los hermanos de Damián se levantaron asustados y miraron mal a su hermano.

—Ya es hora de que os levantéis, casi las tres de la tarde.

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP