Mis dulces 17 (2)

Regresé al salón con Sebastián y bailamos juntos las siguientes tres canciones, aunque aquí debo decir que bailé yo sola porque él no es muy bueno, pero hace su mejor esfuerzo y con eso me basta. Cuando estábamos por sentarnos, Myriam se acercó a mí y, tomándome de la mano, me arrastró hasta casi llevarme a la puerta.

—Acaba de llegar tu padrastro y te trae una sorpresa —dijo Myriam.

—¿Otra sorpresa? Mientras no sean boletos para una carrera de autos en Montecarlo, puedo soportarla —contesté. 

—¿Qué? 

—Luego te cuento. 

Noté que estaba por insistir cuando vio, m&aac

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP