59. No haremos nada que no quieras.

La tensión en la sala era palpable. Todos los presentes podían sentir el peso de las decisiones que se estaban tomando. Antuan, como rey y abuelo, sabía que su resolución tendría repercusiones profundas y duraderas. Miró a Franchesca y a Alexander, ambos jóvenes y llenos de un amor que ahora estaba amenazado por las sombras del pasado y las incertidumbres del futuro.

—Alexander, Franchesca —dijo finalmente Antuan con voz firme—, entiendo la gravedad de la situación y el dolor que ambos están sintiendo. No tomaremos ninguna decisión precipitada. Consultaremos con los oráculos y exploraremos todas las opciones posibles. Pero quiero dejar algo claro: nadie tiene derecho a decidir sobre el cuerpo de Franchesca excepto ella misma. Como su alfa, tu papel es protegerla y apoyarla, no imponerle tus deseos.

Alexander asintió lentamente, sintiendo el peso de la responsabilidad en sus hombros. Sabía que su impulso inicial había sido proteger a Franchesca a cualquier costo, pero ahora comprendía
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo