15

Ingresamos al impotente edificios de vidrio azules, el interior es maravilloso, no puedo evitar barrer con la mirada el sitio donde me encuentro. El personal camina de un lado a otro, vienen y van con papeles en las manos en el trajín laboral, todos se ven muy ocupados y estresados.

—¡Al fin llega Señor! —ladeo la cabeza en dirección a la mujer vestida con un traje de dos piezas color azul oscuro. Se detiene al frente y me da una mirada desdeñosa. —Señor Said, los inversionistas lo están esperando en la sala de junta. ¿Quiere que le lleve un café?

—No, gracias Samara. Diles que enseguida voy, primero debo llevar a mi esposa a la oficina. —Ahora la tal Samara eleva sus cejas sorprendida, me da una mirada de disculpa y se marcha excusándose de que le avisará a los inversionistas.

Siento una mano tomar la mía y entrelazar los dedos, tironea de mí e ingresamos al elevador.

—Te dejaré unos papeles que debo organizar por fechas, es lo único que debes hacer además de atender las llamadas y..
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP