Hasley

Los chicos seguían dando vueltas por todo el campo de pelea, Bred y yo lo miramos desde la distancia. El día había amanecido caluroso, y el chico a mi lado traía unos lentes de sol, una camisa negra ceñida a su cuerpo que hacía que sus brazos marcados sobresalieran. Bred a diferencia de Peter no traía un solo tatuaje, tiene la piel perfectamente clara, sus jeans militar eran holgados y como sus enormes botas. A simple vista se veía poderoso, atractivo, no cualquier mujer resistiría a él.

—¿Terminaste?— la voz de Bred me sacó de mis pensamientos, me estaba viendo como una sonrisa y pude imaginar sus ojos acusadores a través de los lentes.

—¿Que te asegura que te estoy viendo?— me defendí con una mentira—. Estoy viendo el bonito día.

—¿Por bonito día te refieres a mi?— Hice una mueca por su comentario, pero Bred se acercó a mi con una sonrisa de arrogante —. ¿Quieres ver lo que esté bonito día puede hacer?

Cuando iba a decir algo alguien nos interrumpe, Christian pasa su brazo p