Alcem gruñó y Kaldem volteó, él también había escuchado las pisadas dentro de las ruinas, el lycan hizo una seña al dragnir, iría a ver a los nuevos visitantes, Birgrem podría despertar en cualquier momento y era mejor que uno de ellos estuviera allí para explicar la situación. El lobo gris del alfa empezó a bajar las escaleras, llegó al rellano y por puro reflejo volteó para ver el cuadro y se encontró con la pared vacía, lo único que había allí eran los restos de un marco y unos pocos pedazos de un espejo que ya no reflejaban nada. Alcem regresó a su forma humana, había algo terriblemente familiar con aquel espejo y tenía la sensación de que estaba pasando algo por alto, algo muy importante. Intentaba recordar que era lo que estaba olvidando, sabía que era muy, muy importante, pero no lograba hilar sus pensamientos, arriba en la torreta Kaldem contemplaba la espada, si no fuera por aquella espada Zinnia estaría con vida. Abajo los cazadores habían atravesado el puente y e
Julted les contó lo que había pasado en el momento en que la cuerda de eophry se rompió y la pesadilla en la que se quedaron atrapados, al parecer no había sido una pesadilla había sido el pasado, Alcem corroboró varios hechos que los cazadores presenciaron, el lycan no estuvo allí, pero tenía fragmentos de la memoria de Birgrem. Kaldem se frotó el rostro, Zinnia le había dicho que tuvo una pesadilla, en su sueño Birgrem moría desde aquella torre, ¿Y si no fue una pesadilla sobre el futuro sino sobre el pasado? Zinnia había muerto por nada, ella vio a Birgrem morir en el pasado, posiblemente en este tiempo Birgrem también hubiera muerto, pero gracias a la maldición él no puede morir, por lo que Zinnia al parecer murió por nada. Los demás escucharon la razón por la cuál Zinnia y Kaldem estaban en aquel lugar y ninguno de ellos sabía si había sido una buena o mala idea, después de todo ninguno de ellos puede ver el futuro y el pasado no puede ser cambiado por mucho que uno desee
Julted y los otros dos cazadores bajaron de lo alto de la torreta, decidieron dejar a la pareja disfrutar de su recién adquirida vida, en la base de la escalera fue en donde Kaldem y Alcem los encontraron, al escuchar lo ocurrido el dragnir sonrió aliviado. Alcem se mantuvo quieto con el ceño fruncido, algo estaba mal, el lobo del Alfa empezó a gruñir y Kaldem se puso alerta, él no había cambiado su muerte nunca con Birgrem, pero si lo había interrogado mucho acerca de eso. — ¿Ocurre algo, Alfa? preguntó el dragnir bajando la voz. — No lo sé, siento que hay algo diferente con el despertar de Birgrem está vez. — ¿Por qué lo dice, señor? preguntó Julted un poco inquieto, talves no debieron dejarlos tan pronto. Alcem les contó que cuándo él cambio su muerte con Birgrem tan solo despertó, era como si su inminente muerte hubiera sido tan solo una pesadilla, no le ocurrió nada más, no le faltó el aire, no tosió, no se sintió desorientado, nada, tan solo siguió vivo. K
Birgrem se detuvo en la entrada de su habitación, el lugar estaba desierto, ya no quedaba nada únicamente se podía ver en la habitación la espada, la espada que su clan forjó para él, la espada que contenía el hierro de la sangre de su clan y que ahora debido a su muerte y a la de Zinnia su sangre también ya era parte de la espada. Cuando Birgrem escuchó que la espada había absorbido su sangre se quedó sin comprender, su espada nunca tuvo aquella cualidad, él siempre limpió la hoja de su espada en el pelaje de su oso. Ahora sola en la pared estaba la espada, la espada ya no tenía el brillo que siempre tuvo, la espada lucía vieja y herrumbrosa, el color plata brillante de la hoja ahora era el color marrón apagado del óxido. Birgrem no entró en la habitación, no podía hacerlo, hubiera sido como volver al pasado y ya era libre de aquel pasado, un pasado que siempre lo había atormentado, y que ya no existía. Un par de delicadas manos se unieron delante de él rodeando su cintur
LOBOS, CRÓNICAS DE CAZADORESAño 521 de la era del brujo antiguo. Limber es el actual líder de la orden de los cazadores, humanos que actúan en las sombras para proteger a la humanidad de los seres mágicos o sobrenaturales que traspasan los límites del tratado. En el año 1376 de la era antigua los sobrenaturales actuaban con total libertad y la humanidad poco a poco iba desapareciendo, los humanos eran cazados, esclavizados y exterminados por todas partes hasta que atacaron a la mujer equivocada. Hagarond el lycan sin manada más poderoso que ha existido, su padre un alfa y su madre una bruja oscura, Hagarond heredó la fuerza de lycan de su padre y parte de la magia de su madre convirtiéndose en un lobo mágico. Hagarond se enamoró perdidamente de una mujer humana, en el año 1340 de la era antigua el lycan estaba siendo atacado por un grupo de cambia formas, así los llamaban los humanos, maoren es la raza de aquellos que tienen el poder de cambiar su cuerpo humano por el de un felin
Zinnia iba a la cabeza del grupo, cinco cazadores en total, tres humanos y un dragnir, un mestizo de vampiro, un dragnir es un caso muy peculiar, un vampiro se alimenta de una mujer embarazada, las toxinas en los colmillos del vampiro atacan directamente al feto y este nace como un mestizo de vampiro, sus casos son contados ya que por lo general el feto muere durante el ataque. El equipo iba en silencio, las planicies por las que cruzaban tenían muchos ojos y oídos, ellos debían seguir su camino sin despertar ninguna sospecha, entre los sobrenaturales existen las criaturas de las sombras, seres que venden lo que ven y lo que escuchan a cambio de comida, los brujos suelen ser sus principales compradores. Se dirigían hacia el cementerio de la ciudad humana de Goldbek, un cementerio de antes de la era del brujo antiguo, se creía que aquel lugar tenía cerca de mil años de almacenar los huesos de miles de seres, en sus capas más profundas incluso se pueden encontrar restos de sobrenatura
Hyllen abrió los ojos de golpe y se sentó frotándose el rostro, había soñado con su familia muerta, en su espalda sintió el morro del lobo acariciarlo suavemente, soltó el aire que había estado conteniendo y respondió: — Estoy bien, alfa, solo fue un mal sueño. Kaldem susurró con fastidio: — Parece que la criatura tiene un rango de ataque mayor al que pensamos. En ese momento otro de los cazadores empezó a removerse, su cuerpo empezó a temblar con fuerza y un grito agudo salió de su garganta, mas no despertó, Zinnia se lanzó fuera de las ruinas antes de que nadie pudiera moverse. Hyllen sonrió de medio lado y después intentó despertar a su compañero, era imprescindible sacarlo de aquel estado o el staigat lo dejaría sin fuerza vital. El tercer cazador que aún dormía se llevó la mano al pecho y se sentó jadeando, había tenido un sueño horrible, en ese instante notó que los gritos que había escuchado entre sueños no se habían detenido, giró el rostro y vio a su gamma i
Ciudad humana de Goldbek. Los cazadores llegaron a las afueras de la ciudad justo después del amanecer, las puertas estaban cerradas, aún faltaba una hora para que la ciudad fuera accesible. Como casi todas las ciudades humanas, Goldbek estaba rodeada de un alto muro, legado de la era antigua, los humanos habían mantenido los muros incluso siglos después de que las criaturas de la noche y los monstruos desaparecieran de sus vidas. Zinnia echó un fugaz vistazo a su cazador, Julted se veía un poco pálido, los temblores ya habían cesado, el ataque del staigat había sido demasiado fuerte para él, Julted era el único sobreviviente de toda su aldea, una manada de svinja, animales similares a cerdos de más de un metro de alto con un cuerno dentado sobresaliendo de su frente, el pelaje de un svinja es duro como el metal y está afiliado, corta todo a su paso y los animales son violentos y carnívoros, además son bestias mágicas, su inteligencia es baja, pero tienen la capacidad de hablar