Luego de cenar, los sirvientes limpiaron todo y se fueron. Antes cuando la casa era frecuentada por sus dueños, los sirvientes permanecían en la residencia en los cuartos de servicio. Ahora cuando terminaban sus labores se retiraban a sus respectivas casas ubicadas dentro de la propiedad. Tenían la orden de Federico de volver después de las 9 am._estoy cansada, me iré a dormir._Ve pequeña, trabajaré un rato en la biblioteca e iré después.Ella asintió y se retiró, mientras se ponía su camisolin se preguntaba hasta cuando Federico aguantaría sin tener relaciones. Ella no sabía si en los días que el la dejó sola en Beressia había estado con otras mujeres notaba que era un hombre que era muy sexual. De solo pensar que el estuvo con alguna se le revolvió el estómago pero no podía hacer nada, ella conocía bien su posición en este matrimonio.Se acostó en la cómoda cama y se durmió profundamente, despertó cuando sintió que acariciaban sus senos suavemente y de inmediato sintió el cuerpo d
Ella salió en bata tratando de mantener la compostura y sonreír como lo había hecho antes que el se fuera. Federico la miró y notó una cierta sombra en sus ojos, Elizabeth no sabía mentir sus ojos eran tan transparentes que decían todo y nada a la vez._sucede algo? preguntó él _oh no! en absoluto! me quedé leyendo y mis ojos se han cansado bastante! El frunció el ceño. Pequeña y hermosa mentirosa.Fue hasta ella y la besó, ella recibió su beso como hacia últimamente pero no atinó a tocarlo como había hecho en la noche ni en la mañana, se quedó con sus brazos caídos. El sintió una leve decepción y furia, debía contenerse o la espantaria. _vístete, ponte algo cómodo y vayamos a tomar algo en el parque.. quieres? _dijo pellizcando su mejilla._claro, bajo enseguida.Federico bajó furioso la escalera._Maria! Hector apareció enseguida _llama a tu hija, necesito hablar con ella que vaya inmediatamente al despacho._si señor! Hector salió angustiado pensando en que su hija atolondra
Habían pasado Varios días, los aprovechaban yendo a cabalgar, usando la piscina, mirando películas, leyendo... pero más que nada el se había dedicado a darle todo el placer posible a Elizabeth. Esa mañana mientras se duchaba el se metió con ella, la empezó a besar hasta que ella se excitó, el comenzó a acariciar su vulva hasta que notó que humedecia, la puso contra la pared y mientras besaba su cuello, introdujo sus dedos en la vagina, Elizabeth trataba de aguantar sus gemidos ya que podrían estar los sirvientes, pero como siempre el la hacia olvidar de todo y cuando llegó al clímax, soltó un gemido profundo._ya no puedo contra usted- dijo acariciándole el pecho...El presionaba su miembro erecto contra ella, no sabia como eran los de los demás hombres pero a ella le parecía que el de él era muy grande._te toca darle un poco de placer a mí> dijo llevándole la mano a su pene, acaricialo lentamente.Ella lo hizo obedientemente._Ahora comienza a hacer este movimiento> le mostró con s
Ella lo abrazaba llorando!_oye, oye- sonrió Federico _estoy convaleciente aún!_perdóname, es que estoy demasiado feliz de verte despierto. El se dió cuenta que ya no lo trataba de usted, pero no dijo nada, aún se sentía mareado. _pequeña recuestate a mi lado, quizás me recupere más rápido. A pesar de sus molestias, tenerla así a su lado era un triunfo, el se dió cuenta que ella sentía algo por él, le parecía recordar su voz rogándole que no la dejara. Afuera seguía lloviendo y la temperatura había bajado considerablemente, ella se levantó y buscó una manta para taparlo._Quizás deberías regresar a casa y dormir más cómoda, yo estoy bien- le dijo comprensivo _Claro que no! de aquí no me iré! solo me iré cuando tu también lo hagas.- lo miró frunciendo el ceño._no seas dramática mujer, solo fue un pequeño golpe-dijo tosiendo un poco._ además aquí hay lindas enfermeras que me cuidarán muy bien..Ella adivinó su tono, pero no le contestó._Señor, soy su esposa y mi deber es estar aq
Melesia había enviado la cena para los dos, de ninguna manera iba a permitir que coman la comida horrible del hospital, por más elegante que fuera.Luego de la cena, caminaron por el pasillo y fueron hasta un parquecito vidriado que había en el lugar, luego entraron porque él seguía con tos, más temprano el médico había pasado y le había recomendado un medicamento, pero en líneas generales estaba bien.Como le costaba dormir y Elizabeth parecía padecer la misma situación, de pronto el le dijo:_cuéntame de ti. Sonreía._oh, que quieres que te cuente, que tu no hayas investigado? Preguntó divertida.El hizo un ademán de vergüenza._algo que no sepa, porqué te llamas así...cuál es tu sueño?? ..o lo que quieras.Ella se sorprendió, jamás pensó que un hombre como él quisiera saber cosas de ella._Como te conté, mi madre Eloisa enseñaba música y literatura, creo que hemos leído docena de veces las obras de Jean Austen, me llamó Elizabeth por una de las protagonistas de sus novelas- Sonrió
Así pasaron varios días, lentamente Federico fue mejorando y todo volviendo a su cauce.Elizabeth pasaba sus días junto a él y volviéndose más cercanos.Quién diría que la casi tragedia los llevaría hasta el punto en el que se encontraban.Ella hablaba diariamente con su tío, quien día a día iba perdiendo fuerzas. Sin que Elizabeth supiera el se había contactado con Alfonso para brindarle todo su apoyo, pagando los mejores tratamientos y también financiero. Si bien la empresa de Alfonso estaba con inconvenientes, el accionar de Federico cuando se encaprichó con Lizy lo llevó casi a la banca rota.Alfonso sentía dentro de él que Elizabeth había logrado el milagro de enamorar de Federico, conocía la nobleza y el corazón de ella, era imposible que Federico fuera inmune a tal encanto. Eso le hacía sentir paz, se iría de este mundo dejando a su sobrina con alguien que la valoraba. Eran las 8 am. y como todas las mañanas Hector traía el desayuno hecho por Melesia, quien estaba convencida
Con Federico fuera de todo peligro, el pudo regresar a la casa, siempre cumpliendo a rajatabla la indicación de los médicos.Se acostó apenas llegó y después que los sirvientes dejaron la cena ,todo preparado en la habitación y se fueron, Ella le dió de comer en la boca._Elizabeth, puedo comer solo y ya estoy bien, el medico solo me dió descanso y tranquilidad, pero puedo seguir mi vida normalmente. _esta bien, toma un poco de agua y ya está.El sonrió y obedeció.Jamás lo habían cuidado así y se sentía afortunado de tenerla. Ella se había sentado a comer su cena por eso no podía ver la adoración con la que el la miraba. Lo dicho: el cazador cazado.Cuando terminó, el le pidió que se acostará con él. _ven por favor, te necesito.Ella se desvistió y se puso un camisolin corto de satén blanco con encaje, con su pelo suelto y esa belleza absoluta que poseía era irresistible. El la tomó del cuello y la beso.Comenzó a besar su cuello y acariciar sus senos sobre su ropa._detente, debes
En los sucesivos días, se dedicaron a disfrutar los días hermosos en la finca, eventualmente volvieron a las cabalgatas y natación en la piscina.El casi enloquece al ver a su esposa con su diminuta bikini se acercó a ella y la besó acariciándola.La llevó hasta una reposera grande y el el se puso a su costado, frente a ella. Empezó a tocarla tal cual a ella le gustaba y ella se dejaba porque extrañaba muchísimo disfrutar todo eso con su esposo._estas toda mojada- dijo sonriendo.. acarició su cuerpo. Ella sonrió tontamente. El se apartó y le dijo:_merendamos?_oh por cierto, mañana vamos a regresar a la capital, seguramente tendrás ganas de ver a tus seres queridos. - la miró como si quisiera estudiar su expresión. _tan pronto?_me tengo que hacer cargo de mis negocios, de eso depende nuestro futuro señora Alvear.Ella miró abajo y se escondió en su pecho. A pesar de todo había sido feliz alli!El la tomó de la barbilla._de que tienes miedo? Estaba convencida de que nada iba a